El sur de España siempre es un buen destino para escaparte, desconectar y disfrutar. No importa qué plan te apetezca a hacer en ese momento, que Andalucía siempre tiene el perfecto. A nadie extraña que haya sido, sea y será lugar de culto para pueblos antiguos, artistas y amantes de lo bello.
Al suroeste de la provincia de Huelva se encuentra una de esas joyas históricas que nadie debería perderse y que no todos conocen. Uno de los pueblos más antiguos del país se encuentra aquí, próximo al Parque Nacional de Doñana y rodeado por el inconfundible río Tinto, Niebla se consagra como el destino idóneo del sur para conocer la historia de nuestro país.
Su población apenas cuenta con 4.250 habitantes y, sin embargo, alberga múltiples edificios de gran valor, por su belleza, antigüedad y excelente conservación. No hay más que pasear por su casco urbano para darse cuenta de la importancia de Niebla dentro de Andalucía.
[Este pueblo de Andalucía tiene uno de los castillos más impresionantes de España]
Considerada en un tiempo lejano capital histórico-cultural de esta zona de la Península, ha sido poblado por tartesios, romanos, visigodos, musulmanes y finalmente, por castellanos, dejando todos ellos su huella a través de los edificios y leyendas de la ciudad.
Apenas a una hora desde Sevilla o media desde Huelva, visitar Niebla se va a convertir en tu punto de mira para tu próxima escapada. No solo te maravillará la espectacular conservación de sus históricos edificios, sino también la gastronomía y forma de ser de su gente.
Uno de los pocos pueblos prerromanos de Andalucía
Este tesoro andaluz puede presumir de ser uno de los pocos pueblos prerromanos del sur de España. Bautizada en sus inicios como Ilipula, las piedras que conforman Niebla han sido testigos de la grandeza de diferentes civilizaciones que dejaron su huella a lo largo de los siglos, alzándose como bastión de poder y resistencia en la región bética.
La iglesia de San Martín, templo gótico del siglo XV, erigida sobre antiguas mezquitas o el hospital de Nuestra Señora de los Ángeles, que anteriormente fue juzgado y hasta una cárcel, son solo algunas de las maravillas arquitectónicas que se pueden visitar paseando entre sus empedradas callejuelas y plazas.
Una de las maravillas que aguarda la ciudad es su castillo rodeado por una monumental fortaleza que ostenta ser una de las mejor conservadas de toda Europa. Esta segura fortificación resultó ser un gran quebradero de cabeza para las tropas cristianas de Alfonso X: tardó nueve meses en tomar la ciudad debido a la magnánima construcción levantada durante la taifa de Niebla.
Como curiosidad añadir que, en esta sonada batalla, fue la primera vez que se empleó la pólvora en Occidente.
Qué no te puedes perder de Niebla
Realmente, ¡nada! Niebla es pequeña y, por tanto, sencilla de recorrer en un día. Caminando por sus calles sabrás la cantidad de veces que este pueblecito onubense ha sido sitiado.
El bonito edificio del Ayuntamiento o la iglesia de Santa María de la Granada, declarada en 1931 Bien de Interés Cultural son perfectos para darte cuenta el paso de las diferentes civilizaciones a través de su arquitectura. Tan solo en el templo encontrarás desde bóvedas góticas hasta arcadas musulmanas, un ejemplo de la antigüedad que albergan sus piedras.
Su recinto amurallado y su castillo, también conocido como el Alcázar de los Guzmanes, imponente y una de las fortalezas mejor conservadas de toda Europa, se yerguen a un extremo de la pequeña ciudad dando fe de su pasado fortificado. Sin duda, uno de los platos fuertes al visitar Niebla.
Desde sus torres podrás adquirir una panorámica increíble de sus alrededores. Para acceder al castillo necesitarás entrada, pero, sin duda alguna, te recomendamos contratar una visita guiada para tener una oportunidad única de conocer la increíble historia de Niebla. Batallas y estrategias militares que podrás recrear en tu imaginación gracias al interior del castillo, que aún conserva su esencia originaria.
El patrimonio de este pequeño pueblo andaluz era mucho más rico y asombroso que lo que hoy conocemos. Debido al terrible terremoto de Lisboa de 1755 que arrasó parte de la Andalucía occidental, se perdieron algunas emblemáticas edificaciones. La Torre del Homenaje del castillo era hasta cinco veces más grande de lo que hoy en día se conserva, por ejemplo.
Aunque también la Guerra Civil hizo estragos en el patrimonio cultural de Niebla. El puente romano construido en la época de Trajano quedó parcialmente destruido debido a un bombardeo. Lo que podemos ver ahora es parte de su reconstrucción.