Málaga, Baleares, Valencia, Barcelona, Madrid… y así, hasta 26. El precio del alquiler cierra 2023 con el pedal a fondo, aupado por una Ley de Vivienda que lo ha llevado a máximos históricos en importantes ciudades y sin visos de frenarse en los grandes mercados durante los primeros meses de 2024.
En este sentido, las familias de 26 provincias españolas ya destinan uno de cada cuatro euros de sus ingresos al pago del alquiler. A nivel nacional, de media, los núcleos familiares utilizan 3 de cada 10 euros de su renta familiar para abonar las correspondientes mensualidades a su casero.
Del total de provincias, sólo en cinco de ellas no se ha producido un aumento de precio en comparación al año anterior: Albacete, Cuenca, Lleida, Palencia y Segovia. En este sentido, en ninguna región de España disminuyó la tasa de esfuerzo para alquilar una habitación de dos dormitorios. En lo relativo a las capitales de provincia, sólo hay una en la que el precio sea menor y es Melilla.
Los cálculos se han realizado a partir de los datos ofrecidos por el portal inmobiliario Idealista y el Instituto Nacional de Estadística (INE). La tasa de inversión en vivienda recomendada por los expertos es del 30%. Esto quiere decir que, con carácter general, las familias no deben invertir más del 30% de sus ingresos en el pago de alquileres, hipotecas o cualquier otro producto relacionado con el mercado inmobiliario. Atendiendo a este dato, en España, de media, ya se supera el máximo.
En este sentido, dentro de los grandes 'hervideros' patrios, algunas cifras comienzan a ser alarmantes. En Málaga capital las familias ya destinan el 37% de su salario al pago del alquiler, un 7% más que el año anterior. La cifra es aún superior si atendemos a la media del precio a nivel provincial, donde una unidad familiar ya usa el 50% de sus ingresos para pagar a su casero.
En lo que va de curso, el número de viviendas en alquiler de temporada en Málaga -ese que no está topado por la Ley de Vivienda y al que cada vez recurren más los propietarios- se ha disparado un 126%. De los grandes mercados, es la ciudad que registra una mayor subida. En toda España, sólo le superan Huesca (367%), Huelva (292%) y A Coruña (290%).
Barcelona (43%), Palma de Mallorca (42%), Valencia (39%), Madrid (35%), San Sebastián (33%), Santa Cruz de Tenerife (30%) y Bilbao (30%) son el resto de capitales de provincia en la que se destina tanto o más de lo recomendado.
"Esta situación se está viendo agravada por la acuciante falta de oferta provocada por la Ley de Vivienda que ha provocado un trasvase de producto desde el alquiler permanente al de temporada en esos mercados y que está aumentando la tensión sobre los precios y aumentando la dificultad de las familias por encontrar vivienda", detalla Francisco Iñareta, portavoz de idealista, al respecto.
Otro de los puntos calientes del alquiler en España son los territorios insulares. Tanto Canarias como Baleares, en su conjunto, están por encima del umbral recomendado, un 49% en el caso de Palma y un 34,5% de media Canarias.
El problema en estos dos enclaves es parecido. La oferta está completamente orientada al turismo, sobre todo en las zonas más próximas al mar, comentan fuentes del sector. Además, al tratarse de islas, los espacios para construir son mucho más escasos que los suelos de los que dispone una gran urbe.
Éxodo al extrarradio
La imposibilidad de alquilar una vivienda a un precio competitivo en el centro de las ciudades ha llevado a los inquilinos a una mudanza obligada al extrarradio. De entre los diez municipios con mayor demanda de España -esto es, los diez que más búsquedas para alquilar recibieron durante estos últimos meses en Idealista- sólo dos son capitales de provincia (Palma de Mallorca y Vitoria).
El resto -todos- son barrios periféricos de los tres grandes mercados: Madrid, Barcelona y Valencia.
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Así, Hospitalet de Llobregat, que se encuentra a 18 minutos en coche de la Ciudad Condal- ya se ha convertido en el enclave de España donde más casas en alquiler se buscan. Hasta cuatro enclaves cercanos a Barcelona se encuentran entre los lugares donde los españoles más buscan un inmueble en arriendo: Hospitalet de Llobregat (1), Badalona (3), Sabadell (9) y Terrasa (10).
Barrios de extrarradio de Madrid como Alcalá de Henares (6) o Móstoles (2), también pujan fuerte por captar inquilinos y ya están entre los más demandados del país. Torrent (Valencia) es el tercer mercado de toda España en cuanto a búsqueda de piso.
El problema del ahorro
Mientras el precio del alquiler siga sin moderarse la capacidad de ahorro de las familias que viven como inquilinas seguirá estancada. Este es el llamado circulo vicioso del alquiler, un proceso maquiavélico del que es sumamente complicado salir.
Los ingresos necesarios para alquilar una vivienda de dos dormitorios en España son un 46% más altos de los que se requieren para tener el mismo inmueble en propiedad. La diferencia -y el gran obstáculo para los inquilinos- es llegar a los 43.000 euros de entrada que, de media, se debe abonar en este país.
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La diferencia es abismal. Los inquilinos pagan 10.000 euros más que los propietarios a final de año, el problema, como se señala, es la imposibilidad de llegar a esa cantidad dada su escasa o nula capacidad de ahorro. Sólo en 2023, la inflación ha obligado a las familias a retirar cerca de 22.000 millones de euros en ahorros para poder llegar a fin de mes.
"La mejor manera de romper este círculo vicioso pasa por un cambio en las políticas de alquiler que logre aumentar significativamente la oferta de viviendas en alquiler",, remarca el portavoz de Idealista.
"Hay que relajar la tensión sobre las mismas y logrando una tendencia bajista en los precios que incremente la capacidad de ahorro de las familias para hacer frente a la entrada en un futuro".
Los principales portales de estudio de España prevén que el alquiler modere su subida al 1% el próximo curso. Esta subida podría acentuarse si la oferta sigue reduciéndose como ha ocurrido en este 2023. Los pisos en modalidad de alquiler permanente han caído un 12%, una tesitura que, de prolongarse durante el próximo ejercicio, podría seguir elevando el precio medio del arriendo patrio.