Borrell sugiere embargar armas a Israel: "La única forma de que no se tiren bombas es no tenerlas"
El Alto Representante celebra el Día de Europa junto a José Manuel Albares y ambos celebran el "liderazgo" de Pedro Sánchez en el seno de la UE, a pesar de reconocer la desunión de los Veintisiete y con EEUU por Oriente Próximo.
9 mayo, 2024 11:09El Día de Europa es también el Día de la Victoria para Israel. Ambos conmemoran lo mismo, el fin de la II Guerra Mundial. Sin embargo, el Alto Representante de la Unión Europea para la Política Exterior y de Seguridad, ha aprovechado la jornada para sugerir una medida de altísimo calado: "La única manera de que no se tiren bombas es que no se tengan", ha respondido Josep Borrell ante el amago de embargo de armas que supone la decisión anunciada por Joe Biden de no entregar material bélico pesado a Israel.
Fuentes de su entorno precisan que la posición de Borrell es, en este punto, la misma que la del Gobierno de España. Su acompañante en esta celebración era José Manuel Albares, ministro de Exteriores, quien ha anunciado en varias ocasiones un "embargo total" en la exportación de armas a Israel. Aunque lo cierto es que ésta es únicamente una "política de no autorización de nuevas licencias". Algo parecido a lo que apunta ahora EEUU.
A pesar de que tanto la UE como Israel se celebran a sí mismos fundacionalmente en la misma fecha, en los últimos meses ambos lados del Mediterráneo han perdido la unidad. La guerra en Gaza es la respuesta del Gobierno de Benjamin Netanyahu a la masacre terrorista del 7 de octubre. Pero su manera de llevarla a cabo está resquebrajando los cimientos del orden mundial occidental, basado en el vínculo transatlántico y en la presencia de una única democracia en Oriente Próximo, aliada de la UE y EEUU.
Borrell se ha expresado así a la llegada al evento que compartía Albares, un buen amigo que ocupa el mismo puesto que él hasta 2019, bajo el mismo presidente, Pedro Sánchez. Y ambos han elogiado el "liderazgo" del mandatario socialista.
"España se ha ganado una posición geopolítica de primera magnitud en este campo", ha expresado el Alto Representante.
"Hemos liderado la petición de alto el fuego inmediato, la exigencia de la vuelta incondicional de los rehenes", hasta 240 personas secuestradas por Hamás en el sur de Israel aquel 7 de octubre de 2023, "la entrada libre de ayuda humanitaria por todos los puestos terrestres y la solución de los dos Estados como única manera de garantizar la paz justa y duradera en la región", ha proclamado, orgulloso, Albares.
Pero aunque el ministro español presumía de ello, con el apoyo entusiasta de Borrell en el escenario del Ateneo de Madrid, es precisamente su Gobierno el que más se ha enfrentado al de Israel desde el inicio del actual conflicto. O al menos, el que más crisis diplomáticas ha sufrido desde entonces, cuatro. Una le llegó a costar la retirada de la embajadora del Estado judío, en invierno, y la última está ocurriendo esta misma semana, sin ir más lejos.
Albares viaja en la tarde de este jueves a Washington, a explicarse ante su "amigo" Antony Blinken. Se reunirá a las 9.30 (hora local) con el secretario de estado estadounidense, para hacerle entender por qué la posición de España es beligerante con la de Israel.
"Estamos con el pueblo palestino", había dicho el ministro a su llegada al Ateneo, en unos minutos de atención a la prensa, antes de saludarse con Borrell. Y eso lo han enmarcado ambos en una "nueva actitud" que debe adoptar la UE, en la que no baste con las palabras, sino con los hechos: "¿Cuántos muertos son demasiados?", se ha preguntado el jefe de la diplomacia europea. "¿A partir de cuántos muertos pasamos de lamentarlo a hacer algo por evitarlo?".
Desunión europea
El conversatorio debía girar en torno al Día de Europa. Y así ha sido, en parte. Pero enfocándolo por las crisis bélicas que la interpelan, como la de Ucrania y la de Gaza.
También, por las elecciones del 9-J "que son decisivas para el espíritu europeo, con el riesgo de darle la oportunidad al PP Europeo de que pacte con la extrema derecha". Más aún, por la ampliación "obligatoria" que afronta la Unión en los próximos años. Y finalmente, por la "necesaria" reforma de sus métodos decisorios cuando la UE vaya pasando de los actuales 27 miembros a "quizás 37 en pocos años".
El problema es que la posición de "liderazgo" de Sánchez en este asunto, lo reconoció Borrell, no ha concitado la unidad en el seno de la UE.
Todos reivindican el 9 de mayo, pues también se celebra como el Día de la Victoria en Rusia, hoy el "gran desafío existencial" para la UE.
"Vladímir Putin pensaba que nuestra dependencia energética de Rusia nos quebraría cuando invadió Ucrania, y no lo logró. Sin embargo, en la crisis de Oriente Próximo, sí nos hemos dividido". Para el Alto Representante, esto es una desgracia, porque en su opinión, quienes no se suban a las posiciones españolas no estarían cumpliendo con los principios fundacionales de la Unión.
Aun así, la división también ha llegado al Gobierno español. Los ministros de Sumar, liderados por la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, han abierto una grieta, exigiendo unos el reconocimiento del Estado palestino ya.
Otro, Pablo Bustinduy, enviando un requerimiento en nombre del Gobierno a las empresas españolas con intereses en Israel para que demuestren no estar participando en el "genocidio".
Y una tercera, Sira Rego, ella de origen palestino, apuntándose a un lema que aboga por la destrucción del Estado de Israel... "Desde el río hasta el mar, Palestina vencerá", es una frase que defienden Hamás, la Yihad Islámica y aquellos otros entes, organizaciones y Estados que niegan la legitimidad de la decisión de Naciones Unidas, que en 1947 dividió el Mandato Británico de Palestina en dos territorios para dos Estados independientes, uno judío y uno árabe.
La cumbre con Blinken
España va a defender este viernes que Palestina sea reconocida como Estado de pleno derecho en la ONU. Lo hará en una votación de la Asamblea General convocada a tal efecto. Pero los efectos serán nulos: sí, como dice Albares, habrá 141 países, "una inmensa mayoría", que lo secundará, pero el asunto volverá al Consejo de Seguridad, donde EEUU seguirá vetándolo.
Porque el Gobierno Biden sigue sin considerar que sea "el momento". Y porque, en año de elecciones, el gobernante demócrata, que aspira a su reelección frente al ultra Donald Trump, tiene la presión de sus bases (propalestinas) y la de su aliado clave en la región, Netanyahu. A las primeras trata de calmarlas dejando de venderle material de guerra pesado a Israel; al segundo, asegurándole el "apoyo incondicional".
Tanta contradicción en los matices demuestra lo complejo del asunto, que ya cumple casi 80 años sin resolverse y acumula cientos de miles de muertos en decenas de guerras. Y eso es lo que tratará de exponer Albares este viernes a Blinken.
Para Borrell, la advertencia del presidente Biden a Israel si invade Rafah es una buena noticia, aunque ha instado a conocer con detalle la posición de Estados Unidos al respecto.
Para Albares, ese aviso no puede considerarse como un paso más de presión internacional a Israel, porque él, ha remarcado, no puede "hablar en nombre de otros gobiernos". Más aún cuando no se atendió el desafío de Yolanda Díaz, en parte, por respeto a esta cumbre del ministro español con el secretario estadounidense.
Este viernes tendrá la ocasión de defender ante su homólogo estadounidense que "en pocas semanas" su presidente reconocerá el Estado palestino. ¿Será el 21 de mayo, como ha filtrado a su televisión pública el Gobierno irlandés, el único que se ha sumado explícitamente a las posiciones de Sánchez en la UE? "Lo importante no es la fecha, sino que la decisión está tomada, y lo haremos formalmente en el momento oportuno".
Y deberá escuchar a Blinken para entender bien las razones que esgrime Washington para mantener una postura muy distinta de la de España... que tampoco ha concitado el consenso en la Unión Europea.
De momento, y para consumo interno, quede claro que con Bustinduy no ha "hablado" Albares, desde que le abrió esa grieta este miércoles. Aunque públicamente sí lo ha desautorizado. Porque la posición del Gobierno de España, ha recordado, pasa por "rechazar esa operación militar en Rafah porque hay demasiadas vidas de civiles en riesgo".