Gobierno, Castilla-La Mancha y Madrid validaron el aeropuerto que Sánchez rechaza
Tres informes emitidos entre los años 2014 y 2019 respaldaron la viabilidad del aeropuerto de Toledo como alternativa al Adolfo Suárez-Madrid Barajas.
29 enero, 2024 18:23Noticias relacionadas
Tres informes oficiales del Gobierno de España, la Comunidad de Madrid y la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, emitidos entre los años 2014 y 2019, respaldaron la viabilidad del proyecto del aeropuerto de Toledo como alternativa secundaria al aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas y su emplazamiento en los terrenos del aeródromo de la localidad toledana de Casarrubios del Monte.
El proyecto de Toledo, antes y ahora, pretende convertir Casarrubios en un aeropuerto secundario y alternativo, de carácter regional intraeuropeo y enfocado a las compañías de bajo coste, que complemente la operatividad aérea actual de la capital de España como ocurre, por ejemplo, en capitales europeas como Londres o París.
Estos tres documentos, a los que ha tenido acceso EL ESPAÑOL EL DIGITAL CLM, muestran el respaldo institucional de las tres Administraciones a esta iniciativa privada que promueve la compañía Air City Madrid Sur con una inversión prevista de 2.500 millones de euros junto a la autovía A-5, en los términos municipales de Casarrubios (Toledo) y El Álamo (Madrid), a 30 kilómetros de Madrid.
Aunque el Gobierno de Pedro Sánchez actualmente tiene otros planes y el propio ministro de Transportes, Óscar Puente, ha declarado abiertamente no ser partidario de este aeropuerto alternativo en Toledo, la empresa promotora sigue adelante con el proyecto y confía en que finalmente tenga viabilidad.
La ampliación de Barajas anunciada la pasada semana por Sánchez, lejos de comprometer el desarrollo de la infraestructura toledana, ha sido valorada por Aire City Madrid Sur como una "oportunidad" que hace más necesaria que nunca la alternativa de Casarrubios, tal como ha venido informando EL ESPAÑOL EL DIGITAL CLM.
Apoyo de Fomento
El primero de estos tres informes favorables al aeropuerto de Toledo es del Ministerio de Fomento durante el mandato de Mariano Rajoy en la Moncloa y está fechado el 10 de diciembre de 2014 en respuesta a una solicitud de pronunciamiento por parte de la Comunidad de Madrid.
Fomento emite oficialmente un informe favorable al aeropuerto de Casarrubios, condicionado a que la Comunidad de Madrid se ponga de acuerdo con la promotora para desarrollar la infraestructura y que se cumplan todos los requisitos de legalidad y afectaciones que sean necesarios.
Este informe del Ministerio de Fomento viene avalado por la Dirección General de Aviación Civil y el Ministerio de Defensa, y supone, por tanto, un primer paso importante que en su día animó a la compañía promotora a seguir adelante con sus planes.
El segundo informe favorable está emitido por la Consejería de Economía, Empleo y Hacienda de la Comunidad de Madrid, bajo el mandato del presidente regional Ángel Garrido, y está fechado el 2 de marzo de 2018, con un apoyo expreso y argumentado al aeropuerto de Casarrubios.
Este documento detalla el positivo impacto económico y de empleo del proyecto en la Comunidad de Madrid, con datos que para el Ejecutivo autonómico son muy favorables, entre ellos la creación de entre 10.450 y 13.300 empleados y un impacto directo e indirecto de 3.273 millones de euros.
El informe concreta, además, que el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas puede alcanzar su capacidad máxima y saturarse en 2026, según la tasa media de crecimiento de los aeropuertos de Aena, o en 2033 según la previsión de tráfico de los aeropuertos entre los años 2022 y 2031.
"Aplicando la media de crecimiento del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas de 2013 A 2017 (4,1%): se saturará en el año 2024", decía aquel informe en 2019. La Comunidad de Madrid declaró este proyecto de interés regional.
Ocho argumentos a favor
En sus conclusiones, el informe madrileño expone estos ocho argumentos a favor del segundo aeropuerto:
· Las infraestructuras de comunicación son elementos imprescindibles para la dinamización del tejido socioeconómico de la zona donde se implantan e inciden positivamente en la generación de puestos de trabajo y riqueza.
· Los impactos calculados en términos de riqueza y empleo podrían ser superiores a los calculados si se consideraran los impactos catalizadores de la inversión, en términos de generación de actividad económica en diferentes sectores de la economía regional al construirse una infraestructura de este tipo.
· La mayoría de las grandes ciudades europeas cuentan con más de una infraestructura aeroportuaria, lo que puede contribuir a intensificar su tráfico aéreo y las actividades económicas directa o indirectamente relacionado con ello.
· El nuevo aeropuerto, en base a la documentación analizada, podría ser complementario al existente en nuestra región, no solo en lo referido al tráfico de viajeros, sino también en el resto de actividades relacionados con el transporte aéreo.
· La construcción de esta infraestructura supondría una continuidad inversora en un espacio dilatado de tiempo.
· Produciría un efecto positivo en el PIB regional.
· Supondría un impulso en el empleo especialmente en la zona sudoeste de la región.
· La construcción de esta nueva infraestructura podría mitigar la elevada probabilidad, en base a los datos aportados, de que el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid Barajas alcance su nivel de saturación en poco más de diez años, e incluso antes, aspecto éste que tendría consecuencias claramente negativas para la economía madrileña.
También Castilla-La Mancha
El tercer documento es una carta de la Consejería de Fomento de Castilla-La Mancha, fechada el 22 de enero de 2019 y dirigida al presidente de Air City Madrid Sur, Gregorio Marañón, en la que se expresa el apoyo del Gobierno de Emiliano García-Page al aeropuerto toledano, al que se considera del máximo interés para la comunidad.
La Consejería afirma en esta carta que el proyecto de Casarrubios debería ser la "evolución razonable" para convertirse en el aeropuerto que pretende la compañía promotora y recuerda que este aeródromo, en sus usos actuales, está declarado de interés regional desde julio de 2010.
La implantación de este segundo aeropuerto en esta zona de la autovía A-5 sería, según la Consejería castellano-manchega, un "revulsivo económico para la comarca y para la región", no sólo por la creación de muchos empleos directos e indirectos, sino también por el "gran flujo de usuarios" que tendrían estas instalaciones, que serían "de gran interés social" para Castilla-La Mancha.
La posición del ministro
El apoyo de estas Administraciones públicas a lo largo de esos años contrasta con la posición actual del Ejecutivo de Sánchez. El propio ministro de Transportes, Óscar Puente, dejó claro la pasada semana en relación con este proyecto toledano que "ese expediente está en desestimación por silencio administrativo. La prioridad es desarrollar todo el potencial de Barajas. Me guiña el presidente de Aena, así que debo andar en lo cierto".
Esa idea del Gobierno de potenciar Barajas no es contradictoria con el proyecto de Toledo, según dijo recientemente a EL ESPAÑOL EL DIGITAL CLM el consejero delegado de Air Cuty Madrid Sur, Javier Ruedas, quien considera que precisamente ahora la alternativa de Casarrubios "es más necesaria que nunca".
Con la ampliación de Barajas anunciada por Sánchez, el Gobierno pretende "fortalecer el liderazgo del hub a América Latina y a desarrollar el hub con Asia, con nuevas rutas y aerolíneas que operan con ese continente", ha dicho el presidente del Gobierno, en unas declaraciones que, según el consejero de Air City Madrid Sur, evidencian la necesidad de este segundo aeropuerto que de cobertura a los vuelos intraeuropeos y a las compañías de bajo coste, que es donde actualmente Barajas tiene menos capacidad y adonde tampoco llegará con la ampliación.
Las posiciones, por tanto, están claras, pero habrá que ver el desarrollo de todas estas inversiones en los próximos años y qué termina pasando tanto con Barajas como con el aeropuerto de Toledo, pero en todo caso parece obvio que el aeropuerto de Madrid necesita soluciones. "El fuerte crecimiento de tráfico aéreo en los últimos años, previo a la covid-19, hace realista considerar un escenario en el que a largo plazo se puede alcanzar la capacidad máxima del Aeropuerto AS Madrid-Barajas", recoge otro informe del Ministerio de Transportes conocido la pasada semana.