El expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero se ha mostrado "a favor" de la amnistía como solución "al conflicto político" en Cataluña y como herramienta para "el reencuentro con el resto de España". Señala, además, que "cabe en el ordenamiento jurídico" y que no existe ningún país democrático que haya renunciado a esta figura legal.
Zapatero ha afirmado que la amnistía ayudaría a iniciar un proceso para solucionar un "problema histórico" en Cataluña y ve positivo que se beneficie de ella el expresident de la Generalitat, Carles Puigdemont, porque eso ayudaría a que la sociedad catalana "vuelva a encontrarse" después de un "conflicto gravísimo" que ha producido una "división profunda".
El exdirigente socialista ha explicado que la amnistía es compatible con el programa electoral del PSOE, pero no la autodeterminación, porque el Gobierno de Pedro Sánchez ya aplicó los indultos a los condenados del procés. También ha destacado que la amnistía es "una institución de la que disponen todas las democracias homologables a la española", mencionando que ha habido "decenas de amnistías" desde la Segunda Guerra Mundial.
"No hay ningún país occidental, democrático, europeo, que haya renunciado a la amnistía. ¿Por qué tiene que renunciar España a ella? Unas figuran en la Constitución, otras no", ha añadido, declarándose a favor porque la situación es "excepcional" y favorecería el interés general. También ha remarcado que toda amnistía tiene que estar "justificada" y "ser razonada", requisitos que en el caso de los condenados por el procés se cumplirían.
Amnistía a Lluís Companys
En su defensa de la amnistía, Zapatero ha remarcado en una entrevista en Onda Cero que el expresidente del Gobierno José María Aznar "era un defensor de Azaña" de quien ha recordado que "amnistió a Lluís Companys" en 1936. "Fíjate ahora cómo se repite la Historia", ha apuntado, equiparando esa situación con la de Puigdemont en este momento. Cabe recordar que Companys fue condenado por rebelión y estuvo en la cárcel tras proclamar el Estado catalán dentro de la República Federal Española.
A diferencia de otro expresidente socialista, Felipe González, que considera que la amnistía es inconstitucional, Zapatero ha insistido en varias ocasiones en que la amnistía "cabe en nuestro ordenamiento, igual que cabe en los ordenamientos democráticos, que todos reconocen la división de poderes, el principio de igualdad, pero que contemplan situaciones excepcionales para que este instituto actúe en favor del interés público, en favor del interés general". "Obviamente, en situaciones excepcionales", ha añadido.
Sobre por qué Pedro Sánchez dijo antes de las elecciones generales del 23-J que la amnistía no cabía en la Constitución, Zapatero ha sostenido que el actual presidente se refería más bien al tipo de amnistía que habían presentado los partidos independentistas.
"Si hay que cambiar de opinión se cambia de opinión y siempre es por el interés general", ha señalado. "Se está acusando a Sánchez de querer ser presidente a toda costa", ha añadido negando que esta sea la pretensión del líder de los socialistas, de quien ha alabado su "valentía".
Amnistía a Otegi
Preguntado si en algún momento de su mandato pensó en amnistiar a Arnaldo Otegi, Zapatero ha desvelado que "claro que lo tuve en la cabeza". "Cómo no voy a pensar ello. Lo tuve que estudiar, si así había finalizado el terrorismo del IRA", ha admitido. Finalmente no fue una condición para el fin de ETA ya que, según ha explicado, primó el diálogo y el entendimiento con la banda terrorista.
"El final fue un final dialogado y no hubo necesidad de amnistiarle", ha explicado, dejando muy claro que la situación con ETA "no es comparable" con la de Cataluña.
"Afortunadamente, en lo que pasó en 2017" en Cataluña "no hubo delitos contra la seguridad de las personas, no hubo delitos que atentaran a la vida, y eso que en 2017 estuvimos en unas circunstancias al borde", ha dicho.
En el procés hubo delitos con "intencionalidad política" que no dañaron a personas ni a la seguridad, en su opinión, por lo que una amnistía a los independentistas catalanes sería buena para el interés público, aunque tiene que estar justificada y ser proporcional, según ha considerado