A Pablo Iglesias solo le quedan "ganas de llorar": Podemos llega moribundo al 23-J tras diluirse el 28-M
Podemos se quedó sin margen para negociar con Sumar tras su fracaso en las autonómicas: sólo obtuvo más del 5% del voto en Extremadura, Navarra y Rioja.
10 junio, 2023 03:25"Yo me voy a callar hoy para que no se me caigan las lágrimas, eso sí, de orgullo". El exvicepresidente Pablo Iglesias parecía realmente al borde del llanto cuando ha pronunciado estas palabras en su programa de Canal Red.
Acababa de retransmitir en directo la comparecencia, llena de dramatismo, en la que la ministra Ione Belarra confirmaba la determinación de Podemos de incorporarse a la coalición Sumar, pero rogaba a Yolanda Díaz que retirase el "injusto" veto a Irene Montero en su candidatura.
Una presentadora de Canal Red remató la noticia advirtiendo de que si Yolanda Díaz "no ofrece un pacto justo, se arrepentirá". Luego Pablo Iglesias demostró que no va a ser el propagandista más entusiasta de Sumar: decidió guardar silencio y se dedicó a publicar en Twitter los mensajes de varios seguidores que anunciaban que no votarán a Sumar, salvo que Díaz retire el veto a la ministra de Igualdad.
Sin @IreneMontero no voto a nadie. Para mí, ella ha cambiado la vida de las mujeres de este país. Soy irenista y bien sabe ella y todo el mundo que he sido y voy a seguir siendo muy crítica en sus políticas, sobre todo porque hace falta legislación contra el racismo.
— Silvia Agüero Fernández (@Kamipnasqo) June 9, 2023
Pero ha sido un error de cálculo del propio Pablo Iglesias el que ha llevado a Podemos al borde del abismo. Se negó a cerrar el acuerdo con Sumar antes de las elecciones del 28-M, con la exigencia de celebrar unas "primarias abiertas" para configurar las candidaturas.
Podemos ha salido de las elecciones municipales y autonómicas como un partido sin implantación territorial, incapaz de obtener un solo escaño en la Asamblea de Madrid o en las Cortes Valencianas. Ni un solo concejal en el ayuntamiento de las capitales de ambas regiones.
En otros parlamentos autonómicos ha obtenido una representación testimonial, sin capacidad para participar en los nuevos gobiernos. Sólo ha logrado superar el 5% del voto en tres regiones: Extremadura, Navarra y La Rioja.
El agónico resultado del 28-M ha dejado a Podemos sin margen de maniobra para negociar las condiciones de su incorporación a Sumar. Ione Belarra se ha visto obligada a firmar el acuerdo sin arrancar ni una sola concesión a Yolanda Díaz, que mantiene su veto a Irene Montero. Aunque las conversaciones pueden prolongarse hasta el 19 de junio, fecha límite para registrar las candidaturas.
Podemos queda relegado a la quinta posición en Madrid (que ocupará la propia Belarra, por detrás de Íñigo Errejón) y a la cuarta en Barcelona.
Tras el fiasco de los resultados del 28-M, Podemos ha intentado hacer valer, como palanca, la fortaleza que le dan los más de 52.000 inscritos que han participado en la votación electrónica convocada el jueves para respaldar la negociación de sus dirigentes.
Pero esta cifra también muestra el declive del partido morado: es menos de la mitad de los 190.000 inscritos que participaron en la consulta convocada por Podemos en mayo de 2018, para decidir si Pablo Iglesias e Irene Montero debían dimitir de todos sus cargos por comprarse un chalé en Galapagar. Aquella cuestión desató muchas más pasiones, y mucha más participación, que el acuerdo electoral con Sumar.
Todos los dirigentes que abandonaron Podemos en las sucesivas purgas (como el propio Íñigo Errejón) han doblado finalmente el pulso a Pablo Iglesias. Pero era imposible que Podemos obtuviera puestos más destacados en las listas de Sumar, tras sus resultados del 28-M.
Los resultados del 28-M
En las elecciones autonómicas de la Comunidad de Madrid, la lista de Más Madrid encabezada por Mónica García logró 27 escaños y 620.631 votos (el 18,36% del total). Podemos apenas logró la cuarta parte de estos votos, 161.032, y no obtuvo ni un solo escaño, al quedarse en el 4,76%.
Ahora Podemos sólo tiene reservado el puesto número 5 de la lista de Sumar por Madrid (que ocupará Ione Belarra), mientras que a Más Madrid le corresponderán los puestos número 3 (que ocupará la activista saharaui Tesh Sidi), 4 (que ocupará Íñigo Errejón), 7 y 10.
Compromís también le ganó la partida con amplia ventaja a Podemos en la Comunidad Valenciana. El partido de Joan Baldoví obtuvo 15 diputados en las Cortes Valencianas, con un total de 349.096 votos (el 14,3%). Por su parte, Podemos no logró ni un solo escaño, al quedarse con 85.571 votos (el 3,5%). Ahora el partido de Ione Belarra no tiene reservado ni un solo puesto en las listas de Sumar por la Comunidad Valenciana, a la espera de que consiga mejorar sus condiciones en la negociación de los próximos días.
Podemos tampoco logró el 28-M ni un solo escaño en los parlamentos autonómicos de Castilla-La Mancha (sacó 44.462 votos, el 4,14% del total) y Cantabria (obtuvo 13.130 votos, el 4,08% del total).
El partido de Ione Belarra se quedó con un solo diputado testimonial en cuatro parlamentos autonómicos. En Asturias obtuvo 20.349 votos (el 3,9%). Pero Izquierda Unida (IU) dobló este resultado: sacó 39.715 votos (el 7,6% del total), que le han proporcionado tres escaños.
En las Cortes de Aragón, Podemos obtuvo un escaño con 26.087 votos (el 3,9%). Pero también se quedó por detrás de su socio de Sumar, la Chunta Aragonesista (CHA), que tuvo tres escaños con 33.454 votos (el 5,1%).
Podemos ha logrado un único representante en el Parlament balear, con 19.632 votos (el 4,44%). La mitad que Més, que ahora encabezará la candidatura de Sumar por las Islas, tras obtener seis escaños en el Parlament con más de 43.000 votos (el 9,7%).
La formación morada sólo logró superar el 5% del voto en tres parlamentos autonómicos. En Navarra obtuvo tres escaños con 19.539 votos (el 6,08%). En Extremadura cuatro escaños con 36.373 votos (el 5,98%). Y en La Rioja dos diputados con 8.457 votos (el 5,07%).
La agresiva estrategia de Pablo Iglesias (que con sus ataques desde Canal Red pretendía obligar a Yolanda Díaz a ceder) ha tenido otro daño colateral: la credibilidad de la foto de unidad, tras la firma del pacto, ha quedado definitivamente dañada.