Ecologistas radicales atacan por igual a PSOE y PP aunque Sánchez llamó "negacionista" a Feijóo

Cinco personas han sido detenidas acusadas de daños, resistencia y desobediencia a la autoridad, todas ellas vinculadas al grupo activista climático Futuro Vegetal. Lanzaron pintura negra con extintores contra las puertas y los logotipos de ambas sedes.

"Vox niega los efectos del cambio climático. Y el PP no los niega, pero actúa como si no existieran. Por tanto, ambos, unos por acción y otros por omisión, son negacionistas del cambio climático", había manifestado el presidente durante un acto del PSOE en Fuenlabrada.

Se trata de un discurso que los socialistas llevan reiterando desde hace una semana, tras la decisión de la Junta de Andalucía de regularizar los regadíos ilegales en Doñana. 

Futuro Vegetal no ha discriminado entre PP y PSOE. El grupo ecologista radical, justificaba así su agresión: "Queremos quitar la careta a todos los políticos que dicen preocuparse por el medio ambiente y la habitabilidad del territorio pero siguen financiando industrias ecocidas como la cárnica".

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Los dos ataques fueron prácticamente simultáneos. A pesar del revuelo causado, ambas formaciones se encontraron ayer con el silencio del resto de partidos: nadie condenó los hechos. 

El PSOE, cuyo símbolo quedó totalmente sepultado por la pintura negra, repudió en su cuenta de Twitter "cualquier acto de violencia e intimidación contra las formaciones políticas" que representan a la ciudadanía. "Nuestra solidaridad con otros partidos afectados", recalcó, sin citar PP.

Para bañar los logos de los partidos, los cinco detenidos —tres en Génova, dos en Ferraz— descargaron un extintor con pintura negra contra las fachadas. En el caso de la sede del PP fue un escolta del presidente del partido, Alberto Núñez Feijóo, quien dio la voz de alarma sobre la acción.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, criticó el acto vandálico y dijo que "esto demuestra que los proyectos autoritarios cuando se van empequeñeciendo, embrutecen y se extreman".

"No nos van a amedrentar las acciones violentas de radicales", compartió por su parte la portavoz nacional, Cuca Gamarra, que también se solidarizó "con los partidos políticos que también han sufrido estos ataques", sin mencionar a los socialistas.

En unos términos parecidos, el diputado del PSOE Juan Cuatrecasas también condenó "sin paliativos" el ataque, "sea de quien sea y contra quien sea". 

Futuro Vegetal lleva tiempo exigiendo al Gobierno de Pedro Sánchez que acabe con "las subvenciones a la ganadería" y ese dinero público se destine a promocionar alternativas "social y ecológicamente responsables basadas en plantas para afrontar el necesario cambio de sistema alimentario".

El colectivo afirma que están "cansadas de engaños y de falsas esperanzas" y critican que las corporaciones están dispuestas a dejar "un territorio en ruinas", acusando a los políticos como responsables del "expolio y la contaminación que las corporaciones agroalimentarias y eléctricas están haciendo de los recursos hídricos comunes".

Esta acción se enmarca dentro de la campaña Resistencia civil no violenta que el colectivo está dinamizando para todo el mes de abril y se da unas semanas después de que el director académico del Foro de la Economía del Agua y profesor de derecho de la Universidad de Granada, Estanislao Arana, advirtiera en la Conferencia del Agua en la ONU que en siete años unas 829.000 personas morirán en el planeta por agua y saneamiento contaminado.

Los activistas de Futuro Vegetal atacaron el pasado mes de enero el Congreso de los Diputados, pegando sus manos a los micrófonos del atril de la Cámara Baja. "Escalaremos en la disrupción hasta que se deje de subvencionar a la ganadería", avisaban entonces. Previamente, en noviembre, se pegaron a los cuadros de La maja desnuda y La maja vestida de Goya en el Museo del Prado.

Su último acto vandálico que había adquirido notoriedad hasta la fecha fue cuando en el día de San Valentín rociaron pintura de témpera en el salón principal del restaurante MasterChef en Madrid. Mancharon el logo del programa televisivo, así como mesas y suelo con témperas rojas y negras, los colores que identifican al colectivo.

"La izquierda radical pretende amedrentar a quienes vienen a los actos del PP y también en nuestra sede. Y quedan 34 días. La mejor respuesta en democracia es el 28 de mayo. Frente a su intolerancia y radicalidad, urnas llenas de votos por la libertad con ganas", denunció también en redes sociales el secretario general de los populares en la Comunidad de Madrid, Alfonso Serrano.