España empeora en el ranking de corrupción internacional: baja dos puestos en sólo un año
Tranparencia Internacional afirma que una economía como la española no debería tener menos de 70 puntos. España ha obtenido 61.
25 enero, 2022 13:22Noticias relacionadas
España ha bajado un punto y dos puestos en el ranking global del Índice de Percepción de la Corrupción (IPC) de 2021 de la ONG Transparencia Internacional, dedicada a combatir y a concienciar sobre los efectos de las malas prácticas que se dan en el mundo.
En concreto obtiene 61 puntos sobre 100 y ocupa la posición 34 entre los 180 que se integran en esta clasificación mundial -compartiendo puesto con Lituania- y la 14 entre los 27 estados de la Unión Europea, dos puestos menos. De la posición 30 en 2019, España ha pasado a la 32 en 2020 y a la 34 en 2021. Cuatro posciones en menos de menos de tres años.
A la cabeza se sitúan Dinamarca, Finlandia y Nueva Zelanda, que obtienen 88 puntos y que se encuentran también entre los 10 mejor valorados en libertades civiles, según el informe Democracy Index. Por contra, Somalia (13), Siria (13) y Sudán (11) consiguen una vez más las puntuaciones más bajas.
España "no progresa"
Durante la presentación, la presidenta de Transparencia Internacional España, Silvina Bacigalupo, ha llamado la atención sobre el hecho que este país "no progresa" y que "se estanca en la lucha contra la corrupción".
Y lo ha atribuido a la "falta de implementación de las reformas importantes" que hay pendientes en la agenda legislativa en materia de prevención de la corrupción, de buen gobierno y de transparencia que, a su juicio, es necesario materializar.
En cuanto a la puntuación de España, que se sitúa en 61 puntos sobre 100, uno menos respecto al año anterior, ha dicho que no es una diferencia significativa desde el punto de vista estadístico, pero que refleja un nivel de corrupción que incide en el buen funcionamiento de las instituciones.
Control de corrupción y fraude
El informe sostiene también que España ha empeorado respecto a otros países con los que compartía puntuación y posición similar en ediciones anteriores, en concreto con Portugal, Lituania y Corea del Sur, que se situaban por debajo y ahora están por encima en la clasificación.
Además destaca que aquellos países que tenían notas superiores pero que se encontraban cercanos en la lista, se han alejado este año (es el caso de Barbados, Bahamas y Catar) y los estaban por debajo de la posición española han reducido su diferencia significativamente, entre ellos Israel y Letonia, según el estudio.
Transparencia Internacional España advierte de que una economía como la española, que se sitúa entre las 15 primeras del mundo, no debería estar por debajo de los 70 puntos en el Indice de Percepción si quiere mantener su imagen y competitividad.
De ahí insista en que reducir la corrupción es fundamental para garantizar la integridad política y el buen funcionamiento de las instituciones democráticas.
Transparencia Internacional señala que, ante la llegada de los fondos europeos, deben existir controles serios de la corrupción y del fraude, es necesario introducir mecanismos de evaluación de conflictos de interés y tomarse en serio los códigos éticos, entre otras cosas.
Según el IPC de 2021, que es el principal indicador mundial de medición de la corrupción en el sector público, los niveles de corrupción se encuentran estancados a nivel mundial con escaso o nulo progreso en el 86 por ciento de los países evaluados en los últimos 10 años.
Este índice clasifica 180 países y territorios según el nivel de percepción de la corrupción en el sector público de cada uno, medidos a través de datos de 13 fuentes externas, en una escala de 0 (los más corruptos) a 100 (los más limpios).
Soborno, malversación...
Se evalúan los siguientes aspectos: soborno, malversación, funcionarios que utilizan la función pública para provecho personal, funcionamiento de las instituciones para prevenir la corrupción y hacer cumplir las normas, burocratización y el nepotismo, entre otros.
En cuanto a la puntuación media global, se mantiene en 43 puntos por décimo año consecutivo y llama la atención que dos tercios de los países no llegan a 50 sobre 100.