Llegan los últimos meses del año, y con ellos, una de las tradiciones favoritas de los medios tecnológicos: el repaso a lo mejor del año, incluyendo todo tipo de premios a los mejores productos. Sin embargo, la definición de “mejor” varía mucho de un medio a otro, y lo que puede ser un dispositivo mediocre para unos puede ser una genialidad para otros. Pongamos como ejemplo el Nokia G22, un dispositivo que probablemente ha pasado desapercibido para muchos consumidores españoles; pero que para la revista Time, es uno de los más innovadores lanzados recientemente.
Semejante alabanza, proveniente de semejante pilar de la industria, puede parecer sorprendente; y es que la Nokia de hoy en día se parece poco a la que recordamos los que llevamos ya unos cuantos años usando teléfonos móviles.
De hecho, en su día “Nokia” era sinónimo de “móvil”; mientras que en la actualidad es un simple nombre que ha sido comprado y vendido en un par de ocasiones y que ahora se imprime en las cajas de móviles baratos y poco emocionantes. Pero hay excepciones, por supuesto.
El Nokia más innovador
Una de esas excepciones fue el Nokia G22, que ha sido considerado por la prestigiosa revista Time como uno de los 200 mejores inventos del año. Y no es una broma, ni muestra ignorancia de parte del equipo de periodistas de Time. Puede que este móvil no tenga los avances en Inteligencia Artificial del Pixel 8, ni las pantallas plegables del Galaxy Z Fold 5, ni mucho menos la potencia bruta del iPhone 15 Pro. Pero supera a todos esos móviles en un aspecto que ya es fundamental para muchos usuarios: la facilidad de reparación.
En efecto, el motivo por el que el Nokia G22 ha entrado en la lista es por su ‘reparabilidad’. Es un móvil diseñado para que sus componentes puedan ser intercambiados de manera sencilla y con la cantidad mínima de herramientas. Por ejemplo, sólo con un destornillador es posible cambiar los componentes que más se rompen, como la pantalla, el puerto de carga, o la batería.
El Nokia G22 es un móvil adelantado a su tiempo, algo que ya se está notando en las recientes tendencias del mercado. Más marcas están prometiendo que sus móviles duran más tiempo, en vez de estar diseñados para durar un año hasta la siguiente generación, como hasta no hace mucho. Este mismo año, Samsung anunció que los usuarios ya podían reparar sus propios móviles en España, gracias a una asociación con los especialistas de iFixit; y no es la única que está dando pasos en esa dirección. El software también tiene su papel, con Google anunciando 7 años de actualizaciones para sus nuevos Pixel 8.
Los usuarios por fin se están dando cuenta del gran problema de la basura electrónica, y se han dado pasos para reducirla; y la Unión Europea tiene buena parte de culpa en obligar a los fabricantes a darlos. Fue gracias a la Comisión Europea que el iPhone por fin usa una conexión USB-C, con el objetivo de eliminar la cantidad de cargadores y cables que terminan en los vertederos. Y de la misma manera, este mismo año el Parlamento Europeo votó a favor de una iniciativa que obligará a los fabricantes a facilitar la sustitución de la batería; los próximos smartphones tendrán que eliminar las restricciones de acceso a este componente, el que más se desgasta con el uso.
El Nokia G22 permite eso y mucho más, y por eso tiene sentido que Time ha considerado que es un “gran invento”; aunque no es el único producto semejante ni mucho menos. Este año también fue lanzado en España el Fairphone 5, un móvil que además de ser fácil de reparar y ofrecer acceso a componentes por separado, promete ocho años de actualizaciones de sistema.