El compromiso
Serguey Dovlatov
2 febrero, 2006 01:00El compromiso (1981) refleja las miserias de un periodista que ejerce su trabajo en la ciudad estonia de Tallin. El narrador escribe en primera persona, cotejando sus reflexiones y vivencias con sus notas de prensa. La sombra de la censura no consigue erradicar su incorrección política, su tendencia al sarcasmo y la irreverencia. Ese espíritu también se manifiesta en sus cuentos, simple copia de un mundo en el que "la maldad es tan natural como la lluvia o la nieve". En una dictadura, el periodismo es un acto de envilecimiento. Condenado por asesinato, el hermano del narrador considera que sus crímenes no son tan vergonzosos como escribir en un periódico. Ante esa acusación, sólo cabe el elogio de la mentira, pues es imposible una complicidad racional con una utopía que presume de "condenar al hombre a la felicidad".
La novela de Dovlátov es un alegato contra el totalitarismo, pero también es una crónica del fracaso, un panfleto nihilista y vagamente poético. Se escribe para soportar los momentos de lucidez, los inevitables intervalos entre cada borrachera. No hay esperanza en la obra de Dovlátov. Sólo el sinsabor de haber vivido, sin saber para qué.