La inocencia de las alternativas
Juicio al teatro español: 12 nombres sin piedad
26 septiembre, 2001 02:00Cargos. Acuso al teatro de aburrido, de convencional, de poco arriesgado, de no buscar nuevas voces, de vivir de espaldas a la actualidad. Hay una tendencia al conformismo muy grande por parte del espectador. Pruebas. Es muy difícil que una nueva voz se abra camino en el teatro. Al artista se le permite muy poco el error y la búsqueda. Hay que tener en cuenta que un autor con tres críticas malas a sus espaldas ya no puede levantar cabeza. Veredicto. Creo que las soluciones a estos problemas pasan por que el creador se fije más en el mundo que le rodea, que hable de lo que sucede hoy, de lo que nos preocupa, y no tanto de sus quebraderos de cabeza. Hay que hacer un "teatro comprometido" pero sin didactismos ni maniqueísmos. Los productores deben apoyar a lo alternativo, que es donde realmente hay una búsqueda de nuevos lenguajes, donde se tiene una inquietud por experimentar, de donde salen los que harán el teatro del mañana. Por eso, las salas alternativas son las únicas que se salvan en este juicio. Se deberá incentivar a la gente joven, tanto a los creadores como a los espectadores. El abaratamiento de las entradas es fundamental para atraer a los jóvenes, por eso creo que no es suficiente con un solo día del espectador a la semana. Faltan teatros públicos que muestren el trabajo que se hace en las comunidades autónomas, y las redes de exhibición, otro tema preocupante, deberían mejorarse muchísimo.