PJ Harvey durante su concierto en Noches del Botánico, este viernes en Madrid. Foto: Martín Page

PJ Harvey durante su concierto en Noches del Botánico, este viernes en Madrid. Foto: Martín Page

Música

Una PJ Harvey hipnótica y envolvente conquista el corazón madrileño

La cantante y compositora británica ofrece un impecable concierto en las Noches del Botánico de Madrid.

8 junio, 2024 11:11

Polly Jean Harvey se planteó dejar la música durante la pandemia, pero afortunadamente no lo hizo y el año pasado acabó publicando I Inside The Old Year Dying, uno de sus trabajos más místicos y envolventes, que daba un giro con respecto a su anterior y más enérgico álbum, The Hope Six Demolition Project. También culminaba un periodo de siete años en el que la artista ha estado más ocupada en componer bandas sonoras para teatro y televisión, además de editar todas las demos y maquetas de toda su discografía.

La cantante de Bridport (Dorset, Inglaterra, 1969) es una de las figuras más genuinas, ingobernables y esenciales de la música popular contemporánea. Durante los años noventa revitalizó el legado de Patti Smith, del punk y del primer indie rock con una versátil secuencia de discos imprescindibles, con los que se erigió en una fuerza motriz de primer orden en el rock internacional mientras abría camino a otras muchas artistas que siguieron su estela.

Se cumplen ya casi 30 años de su primera visita relevante a Madrid, cuando presentó en la sala La Riviera su legendario álbum To Bring You My Love mientras nos dejaba con la boca abierta a todos aquellos que tuvimos la fortuna de poder presenciarlo. En aquel momento la estela rockera, mística y seductora de la artista británica estaba en su máximo esplendor y el rotundo vigor de sus directos desprendía una poderosa sensación eléctrica que también quedaría reflejada en sus posteriores discos Is this Desire? y Stories From The City, Stories From The Sea.

Con el tiempo, PJ Harvey se ha ido alejando lentamente de esa esencia (pero sin nunca perderla de vista) hacia una musicalidad más reposada y atmosférica, repleta de paisajes literarios envolventes pero también de un carácter más melancólico y social.

Mucho tiempo llevaba sin pasar PJ Harvey por la capital y la expectación entre el público era muy palpable para verla protagonizar este viernes una de las veladas mágicas habituales a las que nos tiene acostumbrados las Noches del Botánico, sin duda uno de los mejores espacios posibles al aire libre para disfrutar de la música en verano.

PJ Harvey y John Parish, este viernes en Noches del Botánico. Foto: Martín Page

PJ Harvey y John Parish, este viernes en Noches del Botánico. Foto: Martín Page

Así que, en medio de un bochorno caluroso y un cielo blanquecino, la artista británica apareció puntual sobre el escenario para comenzar suavemente con los sugerentes y delicados cantos de sirena de Prayer At The Gate.

Después vendría Autumn Term a doble voz con su inseparable guitarrista, compositor y productor John Parish, que desembocaría en un bello y entusiasmado baile por parte de la artista británica. Su sonrisa lo decía todo.

El lamento quebrado de Lwonesome tonight también vendría acompañado de su faceta más escénica, interpretándola a lo largo del escenario con una delicadeza shakespeariana que levantó una gran ovación entre el público y es que su magnetismo sobre las tablas sigue intacto.

La vestimenta blanca de sacerdotisa y el excelente estado vocal que está demostrando a lo largo del comienzo de esta gira ayudó notablemente a arropar todas las canciones que interpretó de su último trabajo y que conformaron en su totalidad la primera mitad del concierto (A Child’s Question, I Inside the Old I Dying) hasta que comenzó a atacar las canciones de su legendario Let England Shake.

El excelente sonido inundaba todo el recinto, pero no impidió que se acabase echando de menos una propuesta lumínica (pantallas incluidas) más poderosa y envolvente para un recinto repleto de 4.000 almas ávidas de vibración artística.

Al comenzar el segundo set del concierto la intensidad sónica subió un escalón con The Glorious Land y The Words That Maketh Murder mientras PJ tocaba el autoarpa y era excelentemente secundada por los coros de sus cuatro músicos de acompañamiento. 50th Quennie y Black Hearted Love también sonaron poderosas y demostraron que la voz de Harvey no ha hecho más que mejorar con el tiempo. Su ejecución sigue siendo impecable mientras alterna con pasmosa facilidad falsetes y susurros con su habitual timbre grave. La confesional y emotiva The Desperate Kingdom Of Love lo corroboró por todo lo alto.

Con su canción insignia Down By The Water el jardín botánico se vino abajo literalmente obsequiando a la artista con una larguísima ovación y provocando que la cantante confesase estar "muy emocionada por la calidez del público y por la inspiración que le estaba proporcionando un recinto tan bonito y especial como este". El remate final vendría con la desgarradora y poderosa To Bring You My Love que siempre estremece, empodera y tiene algo de entregar tu alma al diablo a cambio de la eterna juventud musical.

PJ Harvey y el resto de músicos saludan al final de su concierto de este viernes en Noches del Botánico. Foto: Martín Page

PJ Harvey y el resto de músicos saludan al final de su concierto de este viernes en Noches del Botánico. Foto: Martín Page

Tras un breve interludio PJ volvía al escenario para ejecutar otras dos joyas imprescindibles de su repertorio: un C'mon Billy menos enérgico de lo habitual pero sin embargo delicioso y una estremecedora y espectral White Chalk con PJ a la armónica que sonó a gloria, cerrando un concierto que duró poco más de hora y media. Quizá un repertorio más corto de lo que el público madrileño esperaba teniendo en cuenta lo poco que se prodiga por la capital. Esperemos que vuelva pronto y pueda seguir atrapándonos en sus postales enérgicas y melancólicas.

Larga vida a Polly Jean y su legado.