Una vez más, el Festival de Venecia ha conseguido reunir en su sección oficial algunas de las películas de Hollywood que ya suenan como favoritas para los Óscar. De hecho, en los últimos años dos filmes estadounidenses lograron tanto el León de Oro como el Óscar a la mejor película, La forma del agua (Guillermo del Toro, 2017) y Nomadland (Chloé Zhao, 2020), y otros dos recibieron importantes estatuillas tras imponerse en Venecia, Roma (Alfonso Cuaron, 2018) y Joker (Todd Phillips, 2019). Además, Jane Campion fue reconocida el año pasado como mejor directora por El poder del perro tanto en el Lido como en el Dolby Theatre.
El festival, por tanto, se ha convertido en el gran escaparate de Hollywood, algo en lo que hace tiempo que adelantó a un Cannes lastrado por su negativa a estrenar películas de plataformas de streaming. De hecho, es Netflix quién sirve hoy el filme de inauguración: Ruido de fondo, la adaptación de la novela de Don Delillo que ha dirigido Noah Baumbach (Historia de un matrimonio) con Adam Driver y Greta Gerwig como protagonistas. Además, la empresa de Reed Hastings también presentará en la sección oficial Blonde, el esperado biopic sobre Marilyn Monroe en el que Ana de Armas da vida a la tentación rubia bajo las órdenes de Andrew Dominik (El asesinato de Jasse James por el cobarde Robert Ford, Matalos suavemente), que ha adaptado el libro homónimo de Joyce Carol Oates.
Otras grandes apuestas de la meca del cine que pelearán por el León de Oro son Tár, de Todd Field (En la habitación, Secretos íntimos), en la que Cate Blanchet interpreta a una directora de orquesta y compositora de fama mundial; The Whale, del siempre polémico Darren Aronofsky (Madre!, Cisne negro), en donde un obeso Brendan Fraser intenta reconciliarse con su hija; y Bones and All, del italiano Luca Guadagnino, que tras Call Me by Your Name (2017) vuelve a trabajar con Timotheé Chalamet en la adaptación de una novela de Camille DeAngelis sobre dos jóvenes caníbales.
Pero no acaban aquí las estrellas del séptimo arte que desfilarán por la alfombra roja. Tres producciones británicas de la sección oficial vienen cargadas de ellas: The Son, segunda película de Florian Zeller tras The Father (2020), cuenta con Hugh Jackman, Laura Dern y Vanessa Kirby en los papeles principales de un intenso drama familiar; The Eternal Daughter, nuevo trabajo de la prestigiosa directora Joanna Hogg tras el impresionante díptico The Souvenir, llega con el protagonismo absoluto de Tilda Swinton, y Almas en pena de Inisherin, en la que Martin McDonagh (Tres anuncios en las afueras) recurre a Brendan Gleeson y Colin Farrell para narrar el fin de la relación de amistad de dos amigos en una remota isla irlandesa.
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Fuera de competición aparece No te preocupes, cariño, un thriller psicológico dirigido por Olivia Wilde y protagonizado por Florence Pough y el músico Harry Styles, dos de las estrellas emergentes más importantes de Hollywood.
Mal año para el cine español
En esta ocasión, ninguna película española aparece en una sección oficial en la que sí estará Penélope Cruz como protagonista de L’immesittà, filme del italiano Emanuele Crialese. La actriz madrileña repite en la sección Orizzonti con En los márgenes, debut en la dirección del actor Juan Diego Botto, mientras que su pareja Javier Bardem presenta fuera de competición el cortometraje Look at Me, de Sally Potter, que cuenta en el reparto con el cómico Chris Rock, víctima del guantazo propinado por Will Smith en la pasada gala de los Óscar. Además, Lola Dueñas también estará en Orizzonti (cuyo jurado estará presidido por Isabel Coixet) de la mano del director portugués Sérgio Tréfaut en The Bride. Por último, Rodrigo Sorogoyen formará parte del jurado oficial.
En cambio, sí habrá cine latinoamericano en la pelea por el León de Oro. También con distribución de Netflix, el mexicano Alejandro González Iñárritu presentará Bardo (o falsa crónica de unas cuantas verdades), su proyecto más personal, en el que Daniel Giménez Cacho interpreta a un periodista y documentalista mexicano de gran prestigio que vuelve a su país con la esperanza de encontrarse cara a cara con su identidad. Mientras, en Argentina 1985 Santiago Mitre recluta a Ricardo Darín para narrar la historia de los fiscales que llevaron a juicio a los comandantes de la dictadura militar por crímenes de lesa humanidad.
Habrá que estar muy atentos también en la sección oficial al filme Un couple, del legendario director de documentales Frederick Wiseman, que aborda en 65 minutos la correspondencia entre Tolstoi y su mujer; y a Khers Nist, nuevo trabajo de Jafar Panahi, recientemente encarcelado por apoyar las protestas contra el presidente de la República Islámica de Irán Mahmud Ahmadinejad.
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De las 23 películas que compiten por el León de Oro, cinco están dirigidas por mujeres: la ya mencionada The Eternal Daughter, de Joanna Hogg; Saint Omer, el debut en la ficción de la documentalista francesa Alice Diop; Chiara, con la que la italiana Susanna Nicchiarelli regresa a la Bienal tras Miss Marx (2020), el documental All the Beauty and the Bloodset de la estadounidense Laura Poitras (Citizenfour), sobre la artista y activista Nan Goldin, y Les enfants des autres, de la directora francesa Rebecca Zlotowski.
Más allá de la sección oficial
En cualquier caso, no se agota Venecia en su sección oficial y en otros apartados aparecen sugerentes obras de algunos de los grandes nombres del cine de autor. Destacan filmes como Call of God, la película póstuma del surcoreano Kim Ki-Duk -fallecido por coronavirus en 2020-, o When the Waves Are Gone, otro monumental drama sobre los rincones más oscuros de la sociedad filipina de Lav Diaz.
También aparecen en la programación dos outsiders de Hollywood como el incombustible Paul Schrader, que estrena Master Gardener junto a los intérpretes Joel Edgerton y Sigourney Weaver y recibe un premio honorífico, y el veterano Walter Hill, que regresa con un wéstern protagonizado por Christoph Waltz y Willem Dafoe, Dead for a Dollar. Además, la directora argentina Lucrecia Martel presenta el cortometraje Camarera de piso.
En la sección de documentales aparecen tres nombres a los que es difícil renunciar: el italiano Gianfranco Rosi, que en In Viaggo sigue la estela del Papa Francisco, el ucraniano Sergei Loznitsa, que en The Kiev Trial sigue indagando en los terrores de la Segunda Guerra Mundial, y el estadounidense Oliver Stone, que en Nuclear aboga por la energía nuclear como solución al cambio climático. Por último, los dos provocadores directores daneses Lars Von Trier y Nicolas Winding Refn copan la selección de teleficciones con Riget Exodus y Copenhagen Cowboy, respectivamente.