El próximo 28 de agosto Fernando Fernán Gómez hubiese cumplido cien años. El hijo de Carola, “el que muere en Botón de ancla”, el actor en más de 200 películas y el director de filmes como El extraño viaje y El mundo sigue, el autor teatral (Las bicicletas son para el verano, Morir cuerdo y vivir loco…), el académico que ocupó el sillón B en la Docta Casa (dos de sus miembros, Luis María Anson y José Manuel Sánchez Ron lo recuerdan en estas páginas) y el escritor de novelas como El viaje a ninguna parte, de memorias como El tiempo amarillo, de poemarios, ensayos, artículos… se hubiese convertido en el sabio centenario que tanto echa de menos la cultura en estos momentos.
Este es nuestro homenaje. Publicamos el guion inédito de La Puerta del Sol y recorremos su monumental legado cinematográfico con Miguel Marías, el teatral con César Oliva y el narrativo con Santos Sanz Villanueva. Natalia Menéndez e Ignacio del Moral ponen su mirada en la frágil fortaleza del teatro que admiró y el escritor Sergio del Molino nos abre las puertas al mundo del maestro, del cómico, del hijo de Carola, del “que muere en Botón de ancla”…
Fernando Fernán Gómez, el actor que escuchaba con sus ojos a los muertos, por Luis María Anson. Pocos son los que recuerdan la vertiente poética del inmenso actor y dramaturgo que brilla en El canto es vuelo, donde se asomó a la selva sagrada de la poesía con aires y recelos de cazador furtivo.
¿Por qué sobrevive el teatro? Los cien años de Fernán Gómez nos recuerdan, como deslizó en El viaje a ninguna parte, que el teatro nunca desaparece (aunque siempre lo parezca). Natalia Menéndez e Ignacio del Moral constatan la delicada fortaleza de un ritual apegado al ser humano.
Nadie quiere ser Fernán Gómez, por Sergio del Molino. No recuerdo que nadie nunca haya querido ser Fernando Fernán Gómez en ninguna de sus facetas. Sin embargo, yo envidio la forma en que el maestro respondió con su voz –su inimitable voz– a una vida que siempre sospechó hostil y provisional.
La Puerta del Sol: guion inédito de Fernán Gómez. Basado en su novela de 1995 y ambientado en el convulso Madrid de principios del siglo XX, lo escribió para una producción que no llegó a cuajar. Reproducimos los primeros tramos junto a los storyboards que lo acompañaban.
Muy capacitado para no hacer nada, por Helena de Llanos. Con su dialéctica entre los de arriba y los de abajo, la obra de mi abuelo abre la opción de una sociedad más justa. La cineasta y nieta del actor y director analiza para El Cultural el guion inédito de La Puerta del Sol, que nunca se rodaría.
El gran camaleón, por Miguel Marías. se podría reconstruir la historia reciente del cine español solo con seguir el ingente rastro cinematográfico del director de películas como El extraño viaje y El mundo sigue. El crítico repasa los mayores hitos de una carrera con más de 200 películas.
Teatro para filmar, cine para representar, por César Oliva. Fernán Gómez fue el último cómico. O, al menos, el símbolo del último cómico. Su condición de actor, su viaje a ninguna parte, lo impregnó todo. Y se convirtió en la metáfora más brillante del siglo XX.
Un prosista seducido por el fracaso, por Santos Sanz Villanueva. Novelas, guiones, artículos, cuentos, poemas, memorias... Fernán Gómez fue un hombre de letras que arrojó sobre sus páginas una poderosa y fértil veta autobiográfica y cuyo molde narrativo reactivó y actualizó la picaresca.
Lo que Fernán Gómez nunca entendió, por José Manuel Sánchez Ron. En la Real Academia no conocí al Fernán Gómez belicoso y malhumorado del que tanto hablaron algunos. Al contrario, era educado y algo silencioso. El historiador de la ciencia y académico recuerda el paso del maestro por la RAE.
Diez cumbres del Fernán Gómez director, por Javier Yuste. De la comedia pura al drama más intenso, fue un cineasta dotado, brillante y valiente, que entrego obras maestras y películas libres y gozosas. También un cineasta maldito, al que la censura privó en varias ocasiones de un éxito más que merecido.