El testimonio más duro: el levantador de peso de Irán que desertó para evitar la tortura y la ejecución
Amir Assadollahzadeh deserto en medio del Campeonato del Mundo de Powerlifting celebrado en el mes de noviembre en Stavanger.
26 diciembre, 2021 06:00Noticias relacionadas
El mundo del deporte no es ajeno a los conflictos que viven en conflicto. En los últimos tiempos han sido de lo más comentados los casos en los que diferentes atletas han temido que poner tierra de por medio con sus países de nacimiento en busca de una vida mejor. Virales fueron las mujeres que dejaron Afganistán afirmando que eran jugadoras de fútbol. Y ahora le toca el turno a Amir Assadollahzadeh.
Este nombre puede que no suene al gran público, pero su historia está siendo contada ya a lo largo y ancho del planeta. De Irán a Noruega para contar ahora cómo desertó para evitar ser ejecutado en la CNN. Este es el testimonio del levantador de pesas iraní Amir Assadollahzadeh.
Todo comenzó con la celebración del campeonato del mundo de Powerlifting. En este 2021, el torneo se celebró entre el 8 y el 14 de noviembre en la ciudad noruega de Stavanger. Hasta allí fue Amir Assadollahzadeh para competir, tal y como lo había hecho desde hace 18 años.
Powerlifter Amir Assadollahzadeh says that if he had been forced to return to Iran, "I am 100% sure that I will face jail, torture and maybe even worse than that -- execution."https://t.co/vQBSoHc0dm
— CNN Sports (@cnnsport) December 20, 2021
Hace ya más de una década que formaba parte de la selección de Irán y es todo un referente en su país en esta modalidad al haberse proclamado hasta en cuatro ocasiones campeón de Asia. Hasta aquí todo podría parecer normal, pero después de ganar la medalla de bronce en el Campeonato de la Liga Mundial de Clubes este mismo año, su situación dio un giro de 180 grados.
Después de esto, el levantador de pesas iraní decidió dedicar su éxito a todos aquellos sanitarios que han librado, y continúan librando, la batalla contra la Covid-19 desde la primera línea de fuego. Y esto no sentó nada bien en su país, desde donde esperaban que hubiese dedicado esa medalla al oficial militar Qasem Soeimani, quien perdió la vida durante un ataque aéreo de Estados Unidos en el año 2020.
Testimonio
"Me negué a usar la camiseta (el vicepresidente de la federación le pidió que utilizase una camiseta con la fotografía de Soleimani) y me amenazaron. Me dijeron que a mi regreso a Irán tendría problemas, que sería tratado como alguien que está en contra del régimen y que mi vida podía estar en peligro", comenzó diciendo en la CNN.
Las presiones fueron aumentando de volumen y eso que en este Mundial se prohíbe que cualquier atleta vista imágenes reivindicativas mezclando deporte y política. Ante esto, decidió escaparse. Huir del hotel y comenzar una nueva vida ante lo que le podía pasar cuando regresase a Irán.
"Si se niega a usar la camiseta, a su regreso a Irán, tanto usted como su familia enfrentarán problemas, será tratado como alguien que está en contra del régimen y se lo conocerá como alguien que se ha negado a trabajar con nosotros. Su vida también puede estar en peligro", le dijo el vicepresidente de su federación.
Sin opciones
"No tenía otra opción. Cogí lo que necesitaba y corrí hacia la estación de autobuses, pero llegué cinco minutos tarde. Estaba muy oscuro y estaba muy estresado. Traté de correr por la calle directamente frente al hotel a toda velocidad hasta que finalmente llegué a una gasolinera con una tienda al lado. Le pedí al hombre que trabajaba allí que me llamara a un taxi", reveló.
"En una de las paradas, me bajé del autobús y tiré mi teléfono al agua, tenía miedo a que me rastrearan. Corrí tres kilómetros en medio de la fría noche y escapé", apuntó al señalar que a su llegada a Oslo vio a uno de sus compañeros de equipo en la estación y le entró aún más miedo.
"Estoy muy triste por el hecho de que es posible que nunca vuelva a ver a mi familia. Le pido al Comité Olímpico Internacional y a todas las organizaciones relacionadas que ayuden a los deportistas iraníes y que no estén de acuerdo con que estos deportistas se vean obligados a permanecer lejos de su país, su hogar, solo porque no tienen otra opción que irse", continuó Amir Assadollahzadeh.
Petición al COI
"Estaba muy estresado y muy preocupado de lo que podría encontrarme", aseguró el levantador de pesas, quien ha lanzado una petición al Comité Olímpico Internacional (COI): "El régimen de la República Islámica está tratando enérgicamente de involucrar a los atletas en la política. Le pido al COI y a todas las organizaciones relacionadas que ayuden a los atletas iraníes y que no estén de acuerdo con que estos atletas se vean obligados a permanecer lejos de su país, su hogar, solo porque no tienen otra opción que irse"
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