El fichaje de Adrian Newey ha opacado los movimientos en el mercado de traspasos de pilotos. Ferrari y Aston Martin son los grandes candidatos a llevarse al ingeniero británico si finalmente se confirma que está dispuesto a abandonar Red Bull.
El gurú británico podría abandonar la escudería austriaca tras 18 años de exitosa colaboración. Pese a los rumores, Red Bull emitió un comunicado desmintiendo todo y asegurando que Newey tiene contrato hasta finales de 2025, un detalle clave para la negociación de su salida.
Si Newey y el nuevo equipo por el que fiche no llegan a un acuerdo con Red Bull para que facilite su salida, el ingeniero británico no podría comenzar a trabajar en otra escudería hasta el 1 de enero de 2027. El influjo del genio de la aerodinámica no se vería en el monoplaza del equipo que le fiche hasta la temporada 2028, la tercera con el nuevo reglamento.
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El motivo de este retraso es que Newey estaría obligado a cumplir su contrato y un año de lo que se denomina 'gardening'. Un tiempo fijado en los contratos de los ingenieros de Fórmula 1 para que el conocimiento técnico que se pueden llevar los ingenieros 'caduque'.
De salir ahora de Red Bull, Adrian Newey se llevaría consigo lo aprendido dentro de la escudería austríaca para 2026 o, más reciente aún, los detalles más profundos sobre el RB20, el actual monoplaza del equipo, un coche que domina de forma incontestable este año.
Red Bull lo pondrá difícil, pero sabe que será imposible impedir la salida de Newey si el ingeniero quiere salir. Lo que sí que puede impedir, y Christian Horner está trabajando en ellos, es la salida de algunas de las 'manos derecha' de Newey dentro de la escudería.
Según Soy Motor, el equipo austríaco trabaja en el blindaje de Pierre Waché, el hombre que en la práctica lleva el día a día técnico del equipo y que se encarga de implementar las directrices de Newey, y Enrico Balbo, el director de aerodinámica, el que se encarga de llevar las intuiciones de Adrian a la realidad y hacer que funcionen.
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Caso Dan Fallows
Algo similar a la situación de Newey lo vivió, a principios de 2022, Dan Fallows. El también británico llegó a la par que Adrian a Red Bull y en 2021 ostentaba el cargo de ingeniero jefe de aerodinámica.
A principios de 2022, Fallows comunicó a Red Bull su decisión de dejar la escudería austríaca para fichar por Aston Martin, era uno de los primeros grandes fichajes de Lawrence Stroll en su proceso de reconstrucción del equipo.
Christian Horner y el departamento legal del equipo austríaco legaron que el ingeniero debía cumplir un periodo de 'gardening' para evitar la fuga de conocimientos hacia otro equipo. Finalmente, y tras una batalla legal intensa entre ambas escuderías, el 'gardening' se limitó a dos meses y Fallows se incorporó en abril de 2022 a Aston Martin.
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"He disfrutado de muchos años felices en Red Bull y estoy orgulloso de lo que hemos conseguido", explicó Fallows en su momento. "Tengo ganas de que llegue la próxima temporada con sus nuevos desafíos".
El cambio de posición de Red Bull, reduciendo el tiempo habitual de 'gardening' de un año a unos pocos meses, no sólo estuvo basado solo en una batalla legal, sino que, pese a no ser oficial, Lawrence Stroll tuvo que hacer frente al pago de un canon para que esto sucediera, algo que se supone que sería similar en el caso de Newey.
Pese al acuerdo, las suspicacias sobre la información que pudo llevarse Fallows de Red Bull a Aston Martin siempre han estado presentes. En el pasado Gran Premio de Bareín 2023 Red Bull dejó claro que las similitudes entre ambos coches no eran una casualidad.
"Es genial ver a tres Red Bull en el podio”, bromeó Sergio 'Checo' Pérez con los periodistas tras el tercer puesto de Fernando Alonso en aquella carrera. Más contundente fue Helmut Marko que afirmó: "Si comparas los dos coches, el Aston Martin es el más similar al Red Bull. Hay razones para que eso sea así. No es solo Dan Fallows quien pasó a Aston Martin, sino también otros empleados. Obviamente tienen buena memoria".
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Hamilton o Alonso
Al margen de la guerra con Red Bull para conseguir la carta de libertad de Adrian Newey, Ferrari y Aston Martin disputan otra batalla entre ellos para conseguir que el británico se decante por su proyecto.
Aston Martin le ofrece la astronómica oferta de 100 millones de euros por cuatro temporadas, trabajar de nuevo con Honda, un equipo de ingenieros que conoce bien. Además, Newey tendría la comodidad de no tener que mudarse (poco más de 20 millas separan ambas fábricas) y podría comunicarse con su equipo fácilmente en inglés.
Ferrari por su parte, sería opción incómoda para Newey dado que tendría que mudarse a Maranello pero ello implica estar en un lugar único en la historia del automovilismo, algo que puede encajar en los sueños por cumplir del británico.
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Por si fuera poco, Aston Martin y Ferrari también han puesto sobre la mesa el peso de dos pilotos de leyenda como Fernando Alonso y Lewis Hamilton. El octavo título mundial del británico y el tercero del español.
Newey ha reconocido su deseo de trabajar con ambos y todo hace pensar que cualquiera de los dos con un coche competitivo son capaces de optar a las más altas cotas. Unir su nombre a la leyenda de Ferrari o una marca histórica como Aston Martin que entraría en la historia de la F1 con su primer título depende ahora de Newey y de cómo de difícil lo ponga Red Bull.