Candela Peña: "Soy madre soltera, y pienso qué tipo de hombre será mi hijo, Román, al no tener figura masculina"

Candela Peña (50 años) está de estreno. La famosa actriz se encuentra de promoción con la serie de Netflix, El caso Asunta, que recrea el crimen de la niña asesinada por sus padres adoptivos en 2013, y que llega a la plataforma este viernes, 26 de abril. La ganadora de un Goya interpreta a Rosario Porto, la madre.

De este modo, ha acudido al pódcast A solas con... de Vicky Martín Berrocal (51) para hablar sobre su papel en el documental, pero no sólo sobre la industria del cine, también sobre el amor, sus relaciones de pareja, su hijo pequeño y la crianza, y el feminismo.

"Con la serie he tenido mucho miedo. No te voy a mentir, yo no tenía trabajo ni nada, y me ofrecieron ser la guardia civil, y pregunté que quién hacía de Rosario Porto. Me respondieron que no sabían, pero que yo no iba a ser. Buscaban a alguien fina, delgada, pequeña, y yo en ese momento estaba muy ternera, ancha. La gente cree que yo soy fuerte, y no, soy frágil, lloro mucho... Soy una desgraciada. Y bueno, pedí una prueba para el papel de Rosario y me dijeron que era mío. Ha sido el papel que más rápido me han dado de la historia", ha desvelado en la entrevista que ha visto la luz este martes, 23 de abril. 

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"El primer día de rodaje empecé a vomitar y tuvieron que llamar a una ambulancia, y la médica al verme se desmayó, que resulta que era una compañera de Rosario Porto de clase. Al verme ya con la peluca y el maquillaje le dio una bajona, y ahí pensé 'bueno, entonces vamos bien'. A los cinco meses ya lo tenía hecho", ha aclarado.

Peña siempre se ha mostrado sin filtros, sin censura, algo que "me ha pasado factura". "Me han llegado a decir en promociones que esté calladita o que me porte bien porque habrá niños, y eso gente que es la primera vez en la vida que me ve. Siempre son hombres", ha apuntado.

Ella cree que "cuando una mujer dice que no, detrás hay un 'eres problemática', y por mucho que me lo digan no voy a cambiar. Soy como soy. Yo no soy clasista y la gente que te tacha de problemática sí que lo es", ha indicado. De ahí que se vea como una "amenaza para parte de la industria".

El amor y su hijo, Román

Su sueño es convertirse en productora ejecutiva, sin embargo, "me veo en un momento de mi vida muy perdida, con mucha ansiedad". No sólo por lo profesional, sino también por lo personal. "No soy alguien a quien se hayan parado a mirarle nunca. Tampoco soy buena en el amor, no sé amar. No me han enseñado a hacerlo".

Y es que Peña considera que "puedes hacer conmigo lo que quieras, y a malas, porque la gente que puede hacer sobre los demás lo ve desde lejos. Muchos listos lo han sabido ver. Ahora hago terapia". Aunque el amor ocupa un segundo plano en su vida. "Nunca le he dado prioridad al hombre. Me la he dado a mí misma", ha manifestado.

Candela Peña, en marzo de 2022. Gtres

Tal y como ha señalado, no mantiene relaciones sexuales desde hace cinco años. "No pincho desde 2019. Tampoco tengo yo unas prisas locas en hacerlo. Yo antes tenía una vida superactiva y de repente se acabó. Y es que yo si no tengo pareja no voy buscando tener nada, y llevo sin pareja todo este tiempo. Me he bajado aplicaciones de ligar, pero hay muchachos que me dicen 'quita la foto de mi actriz favorita' y digo 'coño, que soy yo', y no me creen y me borran el chat. Pero bueno, tengo mis juguetes, muchos dispositivos", ha bromeado entre risas con la diseñadora.

Lo que sí tiene claro es que "no quiero repetir esquemas de cómo me han enseñado a amar a mí y cómo debo enseñar yo. Mi hijo no está viendo muchas parejas en casa. Soy madre soltera, entonces pienso qué tipo de hombre será porque no ve ninguna figura masculina". Pero ha apuntado: "Yo quiero que mi hijo vea cómo soy yo, y que si no me apetece hacerle la merienda no se la voy a hacer, aunque tenga 12 años. No quiero que me vea como una madre del colegio que son formalitas. Quiero que vea que soy una artista".

Sobre la crianza de su pequeño, ha asegurado que, pese a ir a un colegio de categoría, "nunca le han importado las marcas. Tú fíjate cómo es, que cuando tenía ocho años y yo no estaba muy bien, se me acercó y me dijo 'mamá, tú tranquila, que a mí me va a ir increíble en la vida'. Y ahora, con 12 años, está pensando en crear una marca de sudaderas con unos amigos. Pero claro también ver a un hombre crecer ahora es distinto, porque ven que las niñas están por encima y me dice 'es que no se las puede decir nada' y yo le digo 'claro que no, para que veas la mierda que hemos comido, no me das pena ninguna'. Así que ahora es el amigo de las chicas", ha indicado.

Además de criar a su hijo, Román, y "sacarle adelante y seguir peleando por él", también quiere ser "fiel a mí misma y no rendirme", porque "llegará el día en el que tus niños se vayan de casa, tus familiares se mueran, y al final a la única persona que tendrás es a ti misma".

Otra de sus grandes preocupaciones es "el dinero". "Cuando no trabajaba y no tenía un hijo me daba igual, porque sé que aunque esté tres años sin trabajar encontraré algo y será la hostia. Pero entre tanto, ha habido veces que le he tenido que pedir dinero a mi madre, que también me ha dado mucho apuro porque son sus ahorros de toda la vida, pero se lo devolví", ha sentenciado.