Álex, hijo de Ivonne Reyes, tras su debut en el teatro con Rafael Amargo: "Mi madre dice que estoy brutal"
EL ESPAÑOL ha entrevistado al actor tras interpretar al personaje de El Macho Cabrío en la particular versión de 'Yerma' que dirige el bailaor.
17 noviembre, 2021 01:43Noticias relacionadas
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Ha nacido una estrella. La incursión de Álex Reyes (21 años), el hijo de Ivonne Reyes (54) y Pepe Navarro (70), en el plantel de la obra de teatro Yerma, dirigida por Rafael Amargo (46), ha despertado el aplauso del público y la crítica.
La estruendosa ovación de siete minutos que sonó el pasado sábado en el Teatro Martínez Montañés de Alcalá la Real, en Jaén, fue el golpe de oxígeno definitivo que el joven debutante necesitaba para terminar de abrazar este proyecto con tanta responsabilidad como ilusión, con tanta seguridad como alegría.
Tras interpretar de manera sublime a El Macho Cabrío, ese personaje con hechuras de mito, de índole oscura y algo satánica, ideado por el maestro Federico García Lorca, el actor atiende a EL ESPAÑOL y con este medio expresa sus sensaciones. Álex es sincero y de su voz se deduce la emoción de quien está encontrando, por fin, su camino, de quien está logrando, ahora sí, su sueño: vivir de la interpretación.
Álex, ¿cómo se siente tras el debut en Yerma?
Muy contento porque era un debut complicado por el tema del tiempo. No tuve mucho tiempo, pero estoy orgulloso de mi trabajo. Pude aprenderme todo en poco tiempo y, sobre todo, enterarme bien de la función: el espacio, el tiempo, cómo se manejaba y el espectáculo que había. Muy contento con mis compañeros, también, con el público. Fue impresionante esa sensación de que te aplauden a ti cuando acaba el espectáculo. Es como "¡guau!". Te aplauden por el arte y por el entretenimiento que le das durante ese tiempo.
¿Qué sintió al recibir la llamada de Rafael Amargo?
Yo estaba en Extremadura recogiendo aceitunas cuando me llamó. Me sorprendió bastante. Él y yo habíamos hablado antes a través de mi madre y estábamos en proceso de hacer cosas, pero no pensaba que iba a ser tan rápido. Me llamó y me fui a Madrid para los ensayos. El fin de semana posterior ya fue el debut. Supercontento. Me puse a gritar cuando colegué la llamada. Tenía nervios porque nunca había hecho teatro, aunque tenía pensado empezar. Quería formarme en Corazza o en Cristina Rota, pero trabajar con Rafa es un Máster. Es lo mejor para empezar. Es un verdadero genio. Un artista.
Ha llamado mucho la atención que esta llamada le pillase vareando aceitunas en Extremadura. No se le caen los anillos, ¿no?
Te digo la verdad: yo quería ganar mi propio dinero. Un colega me animó a hacerlo, a ir con él. Y yo ya quería ir el año pasado, pero me habían quitado el puesto. Mira, una experiencia más. Y como actor, como experiencia, me ha servido bastante. Somos todos esponjas y, en ese sentido, cuantas más experiencias vivas, mejor. Es un trabajo duro, pero se lo recomiendo a los jóvenes: artistas y no artistas, a todos aquellos que quieran lidiar con un nuevo desafío. Para mí fue un desafío mental y físico. Cada telón de aceitunas que tiraba, pensaba que algo bueno iba a salir de ahí. Lidiaba con 230 kilos de aceitunas en cada telón. Es un trabajo muy interesante y aprendes a valorar mucho todo.
Dicen que está muy bien pagado.
Sí, sí. Está muy bien pagado. En el campo se gana muy bien. Y te rodeas de gente muy respetuosa, muy educada. Si necesitas cualquier cosa, están allí para ti.
¿Qué está aprendiendo de Rafael Amargo, que ha dirigido y trabajado junto a tantos grandes de la interpretación?
Muchísimo. Es la primera vez que trabajo con Rafa, pero cuando empezamos a pasar el texto, a hablar y quedamos en Madrid, ya noté que todo iría bien. Es que la energía que tiene, la capacidad que tiene para sacar lo mejor de ti, para que des lo mejor como actor, para llevarte a hacer bien el personaje... es fantástico. Lo que me llamó la atención, sobre todo, es que fue en muy poco tiempo. Una obra de teatro necesita muchas horas de ensayo, reuniones... Pero es que Rafa, en dos días, me contó todo. No sé cómo lo hice yo tampoco. Fue como '¡bua!'. Yo estaba flipando, metido en el personaje. Le di ese sentimiento y fue una impresión. Me gustó mucho el resultado.
¿Ha podido ver tu madre algo de su actuación? ¿Qué le ha dicho?
Le grabaron unos vídeos, se los pasaron y me dijo que le encantó como lo hice. No vio toda la obra, pero sí ha visto fotos y vídeos. Y me ha dicho que fue brutal (risas). Es que el espectáculo es increíble.
¿Tiene pensado ir a verle?
Yo creo que sí. Ella está a sus cosas y yo a las mías, pero seguro que sí. Tenemos carreras individuales, pero obviamente hablamos y me da muchos tips. Cuando estemos en Madrid, irá. Seguro, cien por cien.
¿Quiénes son sus referentes en el cine y en el teatro?
De teatro, Rafael Amargo y Jaime Lorente. En cine, de directores, Rodrigo Sorogoyen, Daniel Calparsoro, Álex de la Iglesia, Pedro Almodóvar me gusta muchísimo. Y de actores hay un motón que admiro y que me encantaría trabajar con ellos: Patrick Criado, Miguel Herrán, Luis Tosar, Eduard Fernández, Najwa Nimri, Inma Cuesta. Es que estoy siempre viendo cine en casa. Estoy pegado al ordenador 24/7. Cuando fui a los Premios Platino, veía a los actores y directores y era como: ¡guau! Hablé con Javier Cámara e Inma Cuesta y son tan profesionales...
¿En qué proyectos se ve?
Me encantaría estar en una película española donde haga de alguien muy natural. Tipo A cambio de nada, de Daniel Guzmán. Un papel de algo sencillo. Yo tengo mucha energía y tendría que estar mucho más calmado. Sería un reto. Estoy abierto a todo. A cualquier proyecto, literal. Actuar es mi pasión.
¿Descarta la tele, tras su paso por Supervivientes, o le apetecería volver?
Si es para series en televisión, sí. Mucha gente me dijo que le había gustado mi paso por Supervivientes, pero yo no tengo talento para dar juego en televisión. Estando en el programa veía todo como si fuera una película. Podría hacer de náufrago, como Tom Hanks. Cuando la gente peleaba, yo estaba ahí, mirando, me faltaba el cubo de palomitas. En las galas me reía, decía mis chistes, lo intentaba llevar a la comedia. Soy muy malo para ponerme a discutir con alguien a no ser que sea muy necesario.
Para concluir, ¿hay alguna persona especial en su vida que tenga ganas de ir a verlo actuar? Me refiero a una mujer.
Mi familia, mi familia. Quiero hacer que pasen un buen rato. Mi familia lo es todo. Quiero que ellos vean el progreso que he hecho desde que llegué de Estados Unidos, donde me formé. Mis primos, mis tíos. De verdad, quiero que vayan ellos y mis amigos.
¿Descartamos novia?
(Risas) De momento, descartado. De momento, de momento...
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