La zona de Castilla y León inmune a la ola de calor y donde tendrás que dormir con manta

La cuarta ola del calor de verano azota de lleno a España, y por supuesto a Castilla y León. Para este sábado pronostica la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) que será el día más caluroso con temperaturas que van a superar los 40 grados. Es el momento de hidratarse bien, buscar la sombra o mejor, una buena piscina o playa. Habrá que tener paciencia porque se espera que se mantenga hasta el lunes.

Este episodio comenzó este pasado viernes y durará, como mínimo, hasta el próximo domingo. Esta vez, en lugar de en el sur, las máximas se concentran en el norte del país y se elevarán sustancialmente en el alto Ebro y en interiores del Cantábrico oriental. Esta inusual situación se produce por la confluencia de varios factores. La masa de aire cálido que cubre actualmente la península se ve reforzada con la llegada de una dorsal atmosférica. Esta última introduce aire caliente procedente de África, lo que aumenta todavía más las temperaturas.

Ahora bien, todavía existe un lugar en Castilla y León que es inmune a esta ola de calor y donde se registran temperaturas más propias del invierno que del verano. Si quieres tener noches frescas e incluso tener que echarte una manta, tienes que visitar Puerto del Pico, en la provincia de Ávila, que ha registrado en la mañana de este sábado, 10 de agosto, la temperatura más baja del país, con 9,4 grados. Por ejemplo, algunos de los pueblos que están muy cerca son Cuevas del Valle o San Martín del Pimpollar.

Según datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), es el lugar más fresco para poder pasar esta ola de calor. Tras ella, han ocupado los primeros puestos de la tabla las estaciones de Reinosa (Cantabria), con 11,3 grados; Salvacañete (Cuenca), donde se han registrado 11,4 grados.

El puerto del Pico es un puerto de montaña de la sierra de Gredos, situado en el sur de la provincia. Su altitud real es de 1395 m s. n. m. y comunica el valle del Tiétar con el valle del Alberche a través de la N-502.

El puerto constituye un paso natural de la Cañada Real Leonesa Occidental entre la altiplanicie abulense y el Valle del Tiétar y cuenta también con un tramo en buen estado de conservación de una calzada.