'Rabia': El antídoto de Cuatro contra el virus de 'Dreamland'
Pocas series han hecho tanto daño a la imagen de una cadena como Dreamland a Cuatro. Se vendió con una promoción sin precedentes para luego descubrirse no solo como un mal producto sino como un estrepitoso fracaso de audiencias.
Año y medio después, muchos seguimos recordando aquel sonoro resbalón por su significado: era el regreso de la ficción española al prime time de Cuatro tras la llegada de Mediaset. Pero es hora de pasar página porque la cadena por fin puede quitarse esa espinita gracias a Rabia.
Cualquier serie que se estrenara tras Dreamland iba a tenerlo todo a favor en las comparaciones
Es cierto que cualquier serie que se estrenara tras Dreamland iba a tenerlo todo a favor en las comparaciones. Pero Rabia va más allá. Es una apuesta que por fin tiene en cuenta el perfil de Cuatro y no se queda con los restos de Telecinco.
Un resultado digno gracias, principalmente, a su guion
El resultado final, al menos del primer episodio, es más que digno. Con sus errores técnicos y algún fallo de racord que no pasará desapercibido a los espectadores, brilla en el guion poniendo su fuerza en unos personajes que soportarán el peso más incluso que la trama troncal que les une.
Salvando las lógicas distancias, el planteamiento puede incluso recordar a Perdidos en este sentido donde un grupo de personas se ve obligado a colaborar para intentar sobrevivir.
Nuria González, Concha Cuetos y Adriana Ozores son los grandes aciertos del casting de 'Rabia'
Entre ellas, las hay de todos los colores. En el lado bueno, se encuentran personajes aupados por las grandes interpretaciones de Adriana Ozores, Nuria González y Concha Cuetos, quien a pesar de declamar su texto logra uno de los trabajos actorales más brillantes.
En el lado negativo, se encuentra Patricia Vico, quien no solo tiene el personaje con menos matices sino también la interpretación menos creíble. Y lo peor es que ella es una de las que lleva sobre sus hombros el peso de las tramas.
'Rabia' sufre el 'efecto Alatriste' con su iluminación
La iluminación vuelve a ser un problema en una serie de Mediaset, al menos en el piloto mostrado a la prensa. Rabia sufre el "efecto Alatriste" con una luz saturada en muchas ocasiones que, aunque mejora el resultado de la serie basada en el personaje de Pérez-Reverte, deja claro que el área de ficción del grupo tiene un asunto pendiente con este apartado.
Con todo ello, Rabia consigue el aprobado y, lo más importante, marca un necesario camino por el que debe andar la cadena roja. Las series, no solo las americanas, deben volver a elegir Cuatro.