Si no puedes con el enemigo, únete a él. Algo así debieron pensar en Atresmedia cuando, a la par que la ficción española pinchaba en audiencias en lineal, las series turcas triunfaban. Fue así como dieron luz verde a adaptaciones de este tipo de ficciones como Alba (Fatmagül) o Heridas (Madre). 

Y dentro de la misma estrategia se puede englobar Entre tierras, la serie que estrena esta noche Antena 3 a partir de las 23:00 horas y que es una adaptación libre de La esposa, una miniserie italiana del estilo de las turcas que se estrenó de manera muy positiva en la cadena.

Y para protagonizarla quien mejor que una actriz como Megan Montaner, que saltó a la fama por una serie de corte clásico como El Secreto de Puente Viejo, que justamente después triunfó en Italia. La actriz, que también protagonizó recientemente una ficción 'turca' como Si lo hubiera sabido para Netflix, regresa así a la cadena que le dio su primera gran oportunidad con aquella serie de sobremesa y casi ocho años después de La embajada.

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No obstante, Atresmedia se encontró con un contratiempo de última hora. Montaner se encontraba embarazada de su segundo hijo, por lo que tuvo que cambiar toda la logística de la serie para ocultar su avanzado estado de gestación. Un estado que años atrás le supuso a Montaner el despido de una película.

Megan, ¿cómo ha sido la experiencia de rodar embarazada, tanto a nivel profesional como personal?

Ha sido compleja para todos. Para mí por la dificultad del cansancio, el agotamiento, lo lejos que grabábamos... recuerdo llegar siempre a casa con calambres en las piernas en los traslados. Pero también es cierto que tenía toda la ayuda posible para poder estar lo más cómoda, dentro de las circunstancias. Terminé el rodaje cuando estaba de ocho meses y medio, era una bola.

Con mi primer embarazo, terminé una película estando ya en estado, fui a hacer otra y cuando lo supieron me dijeron que no la hacía.

¿Logísticamente te adaptaron el número de horas de trabajo al día?

Ellos todo el rato respetaban los horarios, que tuviera los descansos. Todo estaba muy medido. Me lo pusieron todo a favor porque si no hubiera sido imposible hacer ese esfuerzo porque no es lo mismo rodar estando embarazada, que si no lo estás. Además tenía las hormonas, imagínate. Tenía las emociones a flor de piel. Ha sido un viajazo curioso y también para ellos [el equipo], por todas las dificultades que implican tener que ocultarlo en pantalla.

¿Cómo habéis conseguido ocultarlo?

Con planos más cortos, tapándome con la cesta, la sábana, la silla, con camisas sueltas... Y yo cuando lo veo no puedo evitar ver siempre la tripa.

Una vez termináis los rodajes y estrenáis, ¿sois de ver vuestros trabajos?

Todo no, pero alguna cosa sí que veo. Para verlo todo no me da la vida, con los niños no es fácil sacar hueco. Yo cuando me veo intento que sea una aprendizaje porque no me gusta tampoco. Me escucho la voz rara, hago cosas que luego pienso que tendría que haber hecho de otra forma mucho mejor, pero es algo que te ayuda a aprender y a tener más herramientas.

Eso hace diez años hubiera sido impensable, ¿no? Si una actriz dice que está embarazada, le hubieran dicho que se fuera a su casa...

A mí me pasó, de hecho. Con mi primer embarazo, terminé una película estando ya en estado, fui a hacer otra y cuando lo supieron me dijeron que no la hacía. Es cierto que es muy arriesgado y en ese momento no lo veía para nada. Pensaba 'no estoy enferma, puedo hacerlo perfectamente'. Pero si de repente pasa cualquier cosa, ¿qué hacemos? Si tengo que quedarme en cama... Por eso agradezco lo valientes que han sido por darme la oportunidad de hacer la serie, porque no estaba enferma, y asumiendo también los riesgos.

También es una forma de normalizar los embarazos dentro de la industria...

Claro que se normaliza. Al final, un cuerpo es un cuerpo, y si sucede algo... Si me dicen que tengo que quedarme en reposo tres meses porque mi embarazo es de gravedad, es complicado.

¿Cómo recuerdas el triunfo de 'El Secreto de Puente Viejo' en Italia? ¿Crees que 'Entre Tierras' también puede viajar a ese nivel?

Cualquiera puede viajar, lo que pasa es que de repente suena la campana y resulta que funciona superbien y que una serie diaria de aquí, allí se convierte en un prime time. Había cromos de Puente Viejo. Fue una alegría, porque al final la repercusión mediática que adquieres es muy buena como escaparate, para que te den oportunidades. De hecho, he podido trabajar allí por la repercusión que tuvo la serie.

Imagen de 'Entre tierras'. Pipo Fernández.

¿Te quedaste con algún paquete de cromos?

¡Pues no! Me lo dijeron, lo pedí, y nunca llegó [ríe]. Pero esto no es nada, imagínate a los de La casa de papel con todo lo que han creado. Lo mío era un cromo.

¿Habéis visto 'La Esposa'? (serie en la que se basa 'Entre Tierras')

No, no la llegué a ver. 

No sabía que Paolo Vasile estuviera tan obcecado conmigo.

¿Cómo veis la influencia del éxito de las series turcas en esta tendencia de producir más melodramas en España para el prime time? Están los casos recientes de 'Alba', 'Heridas'...

Al final, si es un buen producto funcionará. Cogerán turcas, españolas, italianas y de donde sea. Es cierto que la audiencia que han hecho las turcas... lo 'petaron'. Pero también han funcionado muchas que no son turcas.

Hablando de Italia, Megan, Vasile se obsesionó contigo hasta que consiguió que hicieras una serie con él. Te había visto en 'Puente Viejo' y quería tenerte en Mediaset...

Tú tienes mucha información, ¿no? [Ríe] Me acuerdo que me llamó su secretaria una vez estando en el arenero, jugando con mi hijo. Fue curioso, pero no sabía que estaba tan obcecado...

¿Y qué te ofreció cuando te llamó?

La serie Lejos de ti.

¿Te llegaron más ofertas de Italia?

Han llegado propuestas, pero me gusta estar en casa.