Los coches eléctricos en España van más lentos que los de combustión en cuanto al número de ventas. Mientras que en el norte de Europa han cambiado la mentalidad y entienden que la movilidad debe ser sostenible con un 80 % de vehículos de este tipo, aquí el cambio no acaba de despegar. Sin embargo, zonas como la provincia de Alicante cuentan con una gran red de cargadores eléctricos para ofrecer servicio a aquellos que han dado el paso y a los que los darán en los próximos años, algo inminente según los expertos.

En Alicante hay más de 730 puntos de carga públicos que alimentan a los coches, camiones y motos de nueva generación a un precio diez veces inferior al de la gasolina. Una de las principales preocupaciones de los conductores antes de saltar a la electricidad es la creencia de que tendrán problemas a la hora de repostar con vatios, cuando la situación es a la inversa.

"Hay más cargadores por coche eléctrico que gasolinas por vehículos de combustión, Alicante es una de las provincias sino la más dotada de infraestructura para utilizarlo, no hay ningún miedo", asegura el delegado de Grandes Clientes y Administraciones públicas de Iberdrola en la Comunitat Valenciana, Enrique Planells. Aún así, el porcentaje de ventas en España es de tan solo el 5 %, cuando en países con las características similares como Portugal tienen el doble por habitante.

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A finales del 2023 el parque automovilístico de la provincia de Alicante contabilizó 1.069.713 turismos, el 4,2 % del total nacional, un coche por cada dos habitantes. La mayoría de los vehículos utilizan combustibles fósiles, el 52,21 % funcionan con gasolina, seguidos del diésel con 46,85 %. El coche eléctrico con 5.986 unidades tan solo representa el 0,56 % del total provincial y el 3,6 % del nacional.

Aunque la infraestructura está lista para soportar una mayor demanda, el problema está en "los incentivos", señala el responsable. Otro de los aspectos que frenan su evolución es el desconocimiento sobre sus ventajas. Planells afirma que tanto él como Juan Carlos Brotons, responsable Comercial en la provincia de Alicante, viajan por la Comunitat y por Murcia sin recargar en la mayoría de los casos.

Brotons cuenta que en sus cinco años de uso no ha tenido "ningún problema con la carga", mientras que Planells comenta que "la gente toma la decisión sobre comprar un vehículo por el 10 % del uso que hace, no por el 90 %, siempre algún amigo te dice que es un problema a la hora de viajar y no ha ido de viaje en los últimos dos años, hay que pensar en cuántos días al año se hacen más de 300 kilómetros".

La barrera económica es otro impedimento para los indecisos, pero también desmienten este punto, ya que al hacer cuentas sale mucho más rentable el ahorro en combustible, con menos de un euro por cargar 100 kilómetros, coinciden.

Tiempo de carga

No todos los puntos de carga son iguales. Hay de cuatro principales tipos: de hasta 22kW (tiempo de carga 19-3 horas), 22kW a 50kW (3-1: 20 horas), de 150 a 250kW (27-15 minutos) y de al menos 250kW (15-10 minutos), según la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac).

En la Comunitat Valenciana, el 82 % corresponden a enchufes de menos de 50kW, el 13 % son de entre 50 y 150kW y el 5 % son de más de 150kW, de acuerdo con los datos de la Comisión Europea. Con este despliegue es suficiente para disfrutar sin preocupaciones de la conducción. Así, se puede usar un punto diferente en cada momento dependiendo de las necesidades, ya sea una espera de ocho horas en el trabajo o un descanso para tomar un café en una estación de servicio a mitad de un largo trayecto.

Por otro lado, los expertos destacan la eficiencia de los vehículos eléctricos, "que no tienen mantenimiento prácticamente por ser muy eficientes, de 100 kW el 73 % van a las ruedas, y en un coche de combustión si le metes cuatro litros de combustible no utilizará más de 1'5 a la rueda, el resto se gasta en los rozamientos, cambios de marchas, diferenciales y a calentar la atmósfera", sostiene Enrique Planells.

Potencia

El delegado de Iberdrola en la Comunitat compara las dos máquinas con los engranajes de un reloj convencional y uno digital. La eficiencia no solo hace que sea más barato mantenerlo y que haya menos piezas que fallen, sino que además le da una potencia muy superior.

Planells resalta que "los amantes de los coches pueden tener una gran aceleración en eléctricos, con muchos de 150, 200 y hasta 300 caballos, mientras que los vehículos tradicionales con tanta potencia son carísimos".

La provincia es pionera al contar con "instalaciones muy gordas", comenta Juanjo Mira, encargado de la comunicación de la compañía en el territorio valenciano, quien destaca la electrolinera de Elche, "la primera por potencia en toda Europa cuando la pusimos en marcha".

La compañía ya está electrificando cocheras de autobuses en distintos municipios alicantinos y están comenzando a hacerlo con camiones que hacen rutas comerciales entre Alicante y Murcia. Todo está listo, solo falta que España abrace la nueva movilidad, algo que pasará en los próximos años mucho más rápido al ser "una bola de nieve" que cuando comienza a rodar va creciendo con mayor velocidad al ver que más y más gente en las carreteras se pasa al eléctrico, explican los expertos.