La fachada del Santuario de Santa María Magdalena en Novelda.

La fachada del Santuario de Santa María Magdalena en Novelda.

Cultura

Este es el origen del santuario de Novelda y por qué no es el clon de la Sagrada Familia de Gaudí que pensabas

La arqueóloga Concha Navarro explica cómo se construyó este monumento, símbolo del poder económico de la ciudad a principios del siglo XX.  

28 noviembre, 2023 06:07
Novelda

Al disfrutar de las vistas del Valle del Vinalopó una iglesia llama la atención, el santuario de santa María Magdalena en Novelda. ¿Es una versión de la Sagrada Familia de Gaudí? La experta arqueóloga Concha Navarro explica las últimas teorías sobre su origen y la inspiración real que tuvieron los arquitectos que la planificaron.

"Antes sí que decía santuario Gaudiano y la primera impresión sí que es esa, pero si vas conociendo ya no hay tanta", razona Navarro sentada en una sala de la céntrica biblioteca de la localidad. Cerca de ella está el casino, ejemplo del auge de una burguesía que tiene mucho que ver en esta historia.

"En Novelda a finales del siglo XIX hay una burguesía comercial que sale de la ciudad y tiene contactos sobre todo con la zona catalana", explica. Allí ha llegado el movimiento europeo del modernismo y en Barcelona triunfa, al igual que en París o Viena. La burguesía lo adopta como ejemplo vanguardia. La relación comercial con la capital condal contagia también esa nueva moda.

[De Novelda a Agres: estos son los lugares más mágicos de Alicante para encontrar el sentido de la vida]

"Esa burguesía quiere manifestar en sus edificaciones la arquitectura de ese momento" y la sintonía que hay entre los dos territorios. Que este santuario esté rodeado de campos de viñas no es casual, "tras la filoxera se empieza a producir mucho vino y se lleva a las exposiciones universales de París y de Barcelona".

La revolución industrial se traslada a las empresas gracias al ferrocarril. "El tren le da una apertura a la comercialización muy grande con la conexión Madrid Barcelona en 1858. La estación de tren a finales del siglo XIX hace que Alicante sea muy importante su puerto, sobre todo en mercancías de producción agrícola, y le da mucha vida a Novelda".

Ese auge económico es el que aviva el interés en parte de la sociedad de Novelda por recuperar la que hasta entonces era una ermita en la colina "que se estaba deteriorando" y "sale un movimiento cívico y otro religioso que piensa por qué no hacer una nueva ermita, en lugar de hacer parches".

[Estas son las iglesias más antiguas y curiosas de la provincia de Alicante]

De ese movimiento surge un concurso de ideas que ganaría en 1917 un jovencísimo José Sala Sala a partir de una propuesta enviada en 1916. Sería él quien se encargara de marcar el estilo del santuario. Y para ello influyó dónde se había formado. Su padre, adinerado empresario textil, le había enviado con 13 años a estudiar ingeniería a Terrassa, donde se había fundado una de las primeras escuelas industriales del sector.

Aquel veinteañero que se había formado en Cataluña "parece que ser que conoce a Gaudí y tiene tratos con él", prueba de que "en esa época los arquitectos e ingenieros industriales estaban muy relacionados". Al igual que el genio de Reus, Sala también era muy devoto católico "y eso es lo que le lleva a plantearse que la construcción tenga un gran simbolismo con la vida de santa María Magdalena".

Fue en aquella época cuando esta pasó a ser patrona de Novelda, después de que el papa Benedicto XV lo apoyara. Eso animó a los noveldenses a que el proyecto de reforma de la ermita fuera a mayores y se inicia una campaña de suscripciones para conseguir los fondos necesarios para su construcción.

[¿Cuál es la ciudad de Alicante con más edificios de estilo modernista?]

En 1918 se inician las obras de lo que sería un santuario cuya planta tendría forma de copa, como la de alabastro con la que suele aparecer la santa porque es con la que unge los pies a Jesús. Este es solo uno de los muchos detalles con los que Sala quiso que se planteara una edificación que rendiría el deseado homenaje.

Y como recalca Navarro aunque a primera vista el proyecto recuerde al de Barcelona, son más claras las influencias de la arquitectura industrial de la que se rodeó Sala en sus años de formación en Terrassa.