El desarrollo del 5G vive un momento de gran vitalidad, pero empieza a verse una brecha a nivel mundial en la carrera por implantarla, que lideran Estados Unidos y Asia. Europa "tiene un reto", ha afirmado el director de Estrategia, Políticas Públicas y Relaciones Institucionales de Ericsson Iberia, Iván Rejón.

"Se observa una cierta polarización que me preocupa. Empezamos a hablar de brecha a nivel mundial", ha destacado durante su intervención en la segunda jornada del III Wake Up, Spain!, organizado por EL ESPAÑOL, Invertia y D+I en colaboración con EY, Oesía, Microsoft y EMT de Madrid.

Estados Unidos y Asia lideran la penetración, por encima del 20% y una adecuación a la red de un 80%. "En Europa estamos muy por debajo y tenemos ahí un reto", ha subrayado, apuntando que en el caso de España el grado de cobertura es del 80%, pero la penetración es aún baja, algo que espera revertir a corto plazo.

Un campo en el que la inversión es especialmente necesaria. Según el Banco Europeo de Inversiones (BEI), la brecha se cifra en "cientos de miles de millones": "La inversión en Europa per cápita en telecomunicaciones está muy por debajo de la que se registra en Estados Unidas, Corea o Japón", ha incidido Rejón.

Los fondos de recuperación supondrán un bálsamo para esas necesarias inversiones, ha augurado, citando como ejemplo los 500 millones que llegarán esta primavera para hacer accesible el 5G en zonas rurales "donde no necesariamente hay viabilidad económica".

Rejón ha remarcado que la importancia de esta apuesta no reside solo en la necesidad de acompasar la nueva evolución tecnológica, sino en subirse a la ola de las nuevas fuentes de ingresos para las operadoras que trae consigo. Por ejemplo en a través de experiencias inmersivas imposibles de realizar con otra tecnología.

"Creemos que va a permitir rebalancear el posicionamiento del sector de las telecomunicaciones en el ecosistema digital", ha apuntado. Y también participar en la transición ecológica. 

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Ericsson cuenta con estudios que dicen que el sector puede contribuir a reducir las emisiones de C02 un 15%. Contando ya con el 5G la huella podría disminuir hasta un 20%, el equivalente a retirar uno de cada siete vehículos, o las emisiones conjuntas de España e Italia.

Mientras tanto, quedan retos que atender, como el gap de talento. En Europa la brecha de profesionales cualificados en STEM es de 12 millones, y España no es ajena a esta escasez, para la que ya hay oferta formativa. "Si queremos estudiar 5G no hace falta irse a Stanford, se puede ir a Puerta de Toledo", ha señalado Rejón, que ha considerado "preocupante" que haya ahora menos mujeres estudiando telecomunicaciones que hace 25 años.