Escribir tres páginas a diario pueden liberar al artista que llevas dentro. Esta es la consigna que defiende Julia Cameron, la periodista y autora del bestseller El camino del artista (Aguilar, 2011), publicado originalmente en 1992. Cameron las describe como "tres páginas de escritura a mano alzada, estrictamente de flujo de conciencia", que se hacen nada más despertarse.
Esta técnica, muy parecida al journaling o la escritura expresiva, ha demostrado tener beneficios para la salud de las personas. Pero tiene su particularidad. Cameron explica que las morning pages no son lo mismo que el journaling: "En las morning pages, no fijamos un tema. Es como si tuviéramos TDAH: saltando de tema en tema, recogiendo ideas y orientaciones de muchas partes".
El tema central del libro que introduce ese concepto es la creatividad. Enseña a los artistas rotos y asustados a volver a su sendero creativo y a alejarse del miedo que les frena. Podría parecer que las morning pages solo sirven si eres un artista que ha perdido la magia de la creatividad, pero este hábito también es valioso para todos los aspectos de la vida, desde el matrimonio hasta las tensiones diarias del trabajo.
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Cualquiera puede ponerlo en práctica: nada más levantarse, solo hay que coger un papel y un bolígrafo y escribir todo lo que se te ocurra en el momento. Es muy probable que al principio escribas sobre los pensamientos y preocupaciones del día, pero, poco a poco, notarás que empiezas a expresar los sentimientos más profundos de tu inconsciente.
Páginas de luto
Cameron ha sugerido que más que páginas matutinas (morning pages), deberían llamarse páginas de duelo o de lamento (mourning pages). "En realidad es una despedida de la vida tal y como la conocías y una introducción a la vida tal y como va a ser".
"Muchas veces la gente piensa que deben ser creativas y yo digo que no, que deben ser quejumbrosos, mezquinos, gruñones lo que sea que seas", añade.
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Para explicarlo mejor, la autora realiza una analogía: "es como encontrarte con tu sombra y llevártela a tomar un café". E insiste: "Cuando pones la negatividad en la página, esa negatividad ya no estará rondando tu conciencia durante el día".
La artista y cineasta Leighann Chandler ha podido probar este método de primera mano y, para incorporarlo en la rutina, propone una serie de consejos para sacarle el máximo partido.
1. A diario y a primera hora de la mañana
"Sí, tienes que levantarte y escribirlas a primera hora de la mañana (pero no antes de prepararte un café)", explica la artista. Para Chandler, las morning pages son "una forma de despejar la mente y prepararnos para el día que tenemos por delante". E insiste que no se trata de un diario o una agenda.
2. Corriente de conciencia
Chandler, al igual que Cameron, afirma que hay que ponerse a escribir una corriente de conciencia, y para hacerlo hay que pensar en las morning pages como si fueran una forma de "descarga cerebral". Es decir, "una forma de deshacerte de pensamientos no deseados que viven libres de alquiler en tu cerebro".
"Tienes que hacer la colada" o "no te olvides de comprar pasta", este tipo de pensamiento es lo que Julia Cameron llama "estática mental". "Es esa molesta voz que te persigue diciéndote cosas", señala Chandler. Las morning pages pueden ayudarte a despejar la mente de este tipo de pensamientos: "No son más que ruido, y nublan tus pensamientos y te impiden centrarte en tus prioridades", añade.
Otro de los consejos de Chandler es que hay que evitar el perfeccionismo: "están hechos para ser desordenados". Y por eso recomienda no permitir que nadie más las lea.
3. Tres páginas completas
"El objetivo es comprometerse a terminar 3 páginas completas, sin importar la cantidad de escritura que eso suponga en realidad", escribe Chandler. En el libro de Cameron, se recomienda escribir en las páginas de un cuaderno de 21.6 x 27.9 cm de tamaño.
Sin embargo, el medio de lo de menos, según Chandler: "el libro en sí no es tan importante, siempre y cuando sea uno dedicado a tus páginas matutinas y nada más".
4. A mano alzada
Es posible que hayas dejado atrás el bolígrafo y el papel y estés llevando una vida completamente digitalizada. Chandler explica que es importante que, al escribir las tres páginas, se haga a mano alzada. Porque así, podrás "obtener más resultados". "La escritura a mano alzada requiere que vayamos más despacio". Y, al hacerlo, es más fácil conectar con nuestras emociones y pensamientos, y volcarlas sobre el papel.