José Antonio había empezado a tantear los bancos para solicitar un préstamo porque 26.342 euros separaban a su hijo, Bruno, de su sueño: aceptar la plaza que le había concedido la Universidad de Oxford. "En la campaña de crowdfunding recaudamos 16.078 euros, pero necesitábamos 42.420 euros para pagar la matrícula", tal y como detalla el cabeza de familia. Este jueves 8 de junio, vencía el plazo para abonar el coste de la vacante, en una de las instituciones docentes más prestigiosas del mundo, y sobre la bocina se ha obrado el milagro: a Bruno le ha salido un mecenas.
"La Fundación Humanismo y Ciencia se ha puesto en contacto con nosotros para informarnos de que le han concedido una beca para la matrícula", tal y como confirma José Antonio Mompeán en exclusiva para EL ESPAÑOL. De forma que Bruno (Alcantarilla, 2006) protagonizará un hito académico el próximo 1 de octubre, cuando ponga un pie en la Universidad de Oxford, con solo 16 años, para estudiar el Grado de Matemáticas.
"Estamos muy contentos porque era una cosa a la que no le veíamos salida, pero hace dos semanas contactó con nosotros esta fundación que beca a estudiantes de altas capacidades", subraya agradecido José Antonio, profesor del departamento de Filología Inglesa de la Facultad de Letras en la Universidad de Murcia. "Ha sido un final totalmente inesperado porque habíamos contactado con otras organizaciones sin éxito".
El cabeza de familia ha removido cielo y tierra para que el esfuerzo de su hijo no fuese en vano porque este adolescente, menor de edad, al que le chiflan las 'mates', superó el proceso de admisión de esta institución británica: uno de los más duros del mundo. Primero se enfrentó a un examen que se hizo simultáneamente en dos sedes en España: Valencia y Madrid.
La familia de Bruno no puede afrontar el coste de la matrícula de 42.420 euros y han iniciado un crowdfunding para reunir fondos para cumplir su sueño de estudiar en Oxford.
Después de pasar la criba del British Council, este estudiante de matrícula de honor aprobó con nota tres exámenes en los que fue evaluado por tres tribunales distintos de Oxford. Los padres de Bruno no querían que por culpa del dinero su hijo perdiese su plaza en el Grado de Matemáticas, ya que había logrado una gesta académica: de las 28.000 solicitudes que cada año tramitan estudiantes de todo el planeta, para formarse en la universidad más antigua del mundo angloparlante, solo se aceptan 3.000.
El coste de la vacante, de 42.420 euros, resultaba inviable para la economía de una familia que cada mes afronta las letras de una hipoteca y un préstamo del coche. Todo ello, sin olvidar que también debían abonar 12.500 euros por la residencia donde se alojaría Bruno durante el curso 2023-2024 en la Universidad de Oxford. "Estábamos mirando préstamos: buscando opciones porque el 8 de junio vencía el plazo para pagar la matrícula", tal y como admite José Antonio, tras quitarse una losa de encima.
La recaudación del crowdfunding se había estancado y hace un par de semanas recibieron un correo electrónico de la Fundación Humanismo y Ciencia, una institución sin ánimo de lucro, inscrita en el Ministerio de Educación y con sede en Madrid. Entre sus objetivos resaltan la promoción de valores que contribuyen al progreso y al desarrollo del ser humano, así como la realización de investigaciones y estudios científicos.
"Nos escribieron contándonos que habían conocido la historia de nuestro hijo por los medios de comunicación y estaban interesados en hablar con Bruno". La entrevista telefónica no pudo ir mejor porque le comunicaron al adolescente que le financiarían su sueño.
"Hemos tenido un final feliz, le ha becado una fundación: mi hijo no se lo podía creer". La noticia ha colmado de felicidad a José Antonio y a su esposa, Veridiana, una autónoma que imparte cursos en academias para que personas desempleadas obtengan certificados de profesionalidad.
José Antonio, Marco, Bruno, y Veridiana, este miércoles, en su domicilio de Alcantarilla.
"Es increíble, no esperábamos tanta repercusión", admite Veridiana, emocionada ante el desenlace que ha tenido el reto que perseguía su hijo. "La gente se ha volcado con Bruno, ha recibido más de 450 donaciones de quienes han creído en él desde el primer momento. Quiero agradecer a Marevents por dar a conocer su historia, a todos los medios de comunicación que se han hecho eco, a familiares, a amigos, y a todos esos donantes anónimos que nos han apoyado, y cómo no, a la Fundación Humanismo y Ciencia que ha terminado de hacer esto posible".
Este estudiante comenzará el Grado en Matemáticas siendo dos años menor que el resto de sus compañeros en Oxford. Tal diferencia de edad no será un problema porque ya le ha ocurrido a lo largo de su formación en Primaria y Secundaria donde ha ido adelantado un par cursos.
De hecho, Bruno ha afrontado una 'selectividad' al cuadrado: primero ha hecho la EBAU con la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) y ahora está realizando el 'Advanced Level', la prueba a la que se enfrentan los alumnos de Reino Unido al terminar el instituto.
"Los estudiantes británicos sueñen hacer tres 'A-Levels' porque tienes que enfrentarte a varios exámenes finales por cada asignatura, pero Bruno está haciendo cinco y los exámenes de Matemáticas Avanzadas le están saliendo como un tiro", resalta orgulloso su padre.
Bruno terminará las pruebas del Advanced Level el 20 de junio: es el último reto que afronta este adolescente, antes de viajar a finales de septiembre a Inglaterra. "Todo este apoyo me tiene supermotivado y estoy deseando empezar en Oxford, van a ser años intensos a la vez que interesantes, donde espero formarme lo mejor posible y traer todo ese aprendizaje de vuelta para compensar todo este apoyo", tal y como reflexiona el propio estudiante.
Patio de la Biblioteca Bodleian de la Universidad de Oxford.
Lo lógico es esperar que este estudiante que reside en Alcantarilla, obtenga un sobresaliente plus en las pruebas 'A Levels', como todo lo que ha hecho hasta ahora en su vida académica. "Estamos muy contentos con la forma en la que ha respondido a esta campaña, alternando los exámenes finales con las entrevistas en medios de comunicación y la recaudación de fondos: Bruno tenía claro su objetivo y se ha mostrado entero durante todo el proceso", aspotilla su padre.
La presión no ha podido con este adolescente sociable, simpático y cariñoso, fan del videojuego League of Legends y del anime. "Bruno no quería ser famoso, solo ir a la Universidad de Oxford".
Dentro de tres meses, Bruno hará la maleta para continuar con su gesta académica, iniciando un Grado de Matemáticas con solo 16 años: "Muchas gracias a todos los que me han ayudado a hacerlo posible, me habéis cambiado la vida para siempre, y en especial a mis padres, Veridiana y José Antonio, por apoyarme siempre".