¿Cómo nos afecta el cambio de hora? Consejos de un psiquiatra gallego para adaptarse mejor
El psiquiatra Juan Carlos Día del Valle explica que al cambiar la hora el cuerpo vive un "proceso adaptativo que dura dos o tres días". Un estudio de la USC cuestiona los posibles efectos negativos como infartos
25 marzo, 2023 05:00Esta madrugada el reloj se adelantará una hora. A las 02:00 serán las 03:00. Regresamos así al horario de verano, con el anochecer una hora más tarde y, como consecuencia, el amanecer tardará un poco más en asomar.
Esto ocurrirá los primeros días, ya la tendencia serán días cada vez más largos. Esta medida se tomó por primera vez en los años 70, con la primera crisis del petróleo y ahora es obligatoria en toda la Unión Europea. El objetivo, en principio, es el ahorro energético. Pero, ¿tiene alguna consecuencia en nuestra salud? Esta hora que nos "roban" se hará notar en nuestro organismo.
La clave está en la melatonina
El psiquiatra Juan Carlos Día del Valle explica que al cambiar la hora el cuerpo vive un "proceso adaptativo que dura dos o tres días". El hecho de cambiar de un día para otro el tiempo en el que vemos los primeros rayos de luz, explica el experto, "alterna la secreción de melatonina", una substancia que disminuye cuando nos exponemos a menos luz solar. "Si cambiamos esta secreción podemos tener problemas de alteración del sueño. El levantarnos una hora antes hace que durante los primeros días, antes de la adaptación, podamos padecer cansancio, fatiga o un poco de ansiedad", cuenta el psiquiatra.
Estas consecuencias son las mismas tanto en niños como en adultos, "en principio no hay estudios que demuestren diferencias", cuenta el psiquiatra, aunque destaca que los más pequeños al necesitar más horas de sueño que los adultos podrán experimentar más cansancio.
Consejos para los días de adaptación al horario
Para llevar estos primeros días lo mejor posible, el psiquiatra da una serie de pautas, que aconseja para "una vida sana". Estas serían tener la costumbre de acostarse y levantarse siempre a la misma hora; evitar estímulos lumínicos o de sonido en la habitación, como pantallas, ya que dificultan la conciliación del sueño; no hacer ejercicio físico intenso unas horas antes de acostarse y levantarse con tiempo suficiente para prepararse y organizarse con calma.
Desde la USC cuestionan los efectos dañinos como infartos
Jorge Mira, investigador de la Universidad de Santiago y José María Martín Olalla, de la Universidad de Sevilla, creen que no hay motivos para asegurar que el cambio de horario tiene consecuencias dañinas en la salud, después de analizar varios estudios y afirmar que las "muestras analíticas" son "insuficientes".
Estas "consecuencias dañinas" no hacen referencia a síntomas como el cansancio, si no a efectos más graves como traumatismos o infartos. Por ello, creen que estudios que sostienen que las personas pueden padecer estos trastornos debido al cambio de hora generan una "alarma innecesaria". Según explican la incidencia de los riesgos asociados al cambio de hora de primavera se limita al 5% mientras que para el otoño no se detectan incrementos asociados.
Por otra parte, afirman que "practicar el cambio de hora ayudó a no adelantar los horarios en el invierno, algo que se demanda por parte de profesionales de Medicina y especialistas en fisiología, porque en si mismo implica una mejora en cuestiones sociales y de salud".