Soldados israelíes disparan proyectiles de mortero, cerca de la frontera de Israel con Gaza. Reuters
Hezbolá trata de arrastrar al Líbano a la guerra con Israel: EEUU y UE redoblan sus esfuerzos para la paz
"Vemos una preocupante intensificación del intercambio de fuego a través de la Línea Azul, en la frontera entre el Líbano e Israel", afirma Borrell.
7 enero, 2024 02:42El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, mantuvo una reunión en Estambul el sábado con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan. Un encuentro que, según la agenda oficial, iba a estar centrada en la prevista ratificación turca de la adhesión de Suecia en la OTAN y la situación en la Franja de Gaza. Un conflicto que poco a poco se exiende por el Líbano, con enfrentamientos cruzados entre Israel y el grupo Hezbolá. A los que, además, se están uniendo otras organizaciones islamistas, como la sunní Jamaa Islamiya -rama libanesa de los Hermanos Musulmanes (Egipto)-.
La gira del enviado de Washington tiene lugar en un momento en que la guerra de Israel contra Hamás amenaza con escalar y expandirse en la región. Coincidiendo con el recrudecimiento de los ataques entre Israel y Hezbolá en el Líbano, tras la muerte del número dos de Hamás, Saleh al Arouri, a las afueras de Beirut.
El Alto Representante de Política Exterior y Política de Seguridad de la Unión Europea, Josep Borrell, viajó a Beirut con el ánimo de evitar su entrada en el conflicto. "Estoy aquí mientras vemos una preocupante intensificación del intercambio de fuego a través de la Línea Azul, en la frontera entre el Líbano e Israel. Creo que se puede prevenir una guerra, tiene que evitarse y la diplomacia puede prevalecer para buscar una solución mejor", afirmó en una rueda de prensa en la capital libanesa.
El líder de Hezbolá en Líbano, Sayyed Hassan Nasrallá, pronuncia un discurso televisado en Baalbek. Reuters
Los esfuerzos diplomáticos de Estados Unidos, con la visita de Blinken por Grecia, Jordania, Catar, Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudí, Israel, Cisjordania y Egipto, pierden eficacia mientras los grupos terroristas de la región salvan distancias y se unen 'contra el enemigo común'.
Las fuerzas de Al Fajr, brazo armado de la facción islamista suní Jamaa Islamiya, dijo en un comunicado el sábado que había disparado dos ráfagas de cohetes contra Kiryat Shmona, en el norte de Israel. Justo después de que Hezbollá -respaldado por Irán y de corte chií- disparara al menos 62 misiles contra Israel esa misma mañana.
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— Pheebo🍉 (@galpalpheebs) January 6, 2024
La relaciones entre ambas organizaciones siempre han sido difíciles, teniendo en cuenta que cada una pertenece a una rama del islam. Sin embargo, desde que comenzó la Operación Inundación de Al Aqsa el 7 de octubre, las fuerzas de Al Fajr se alinearon con el partido financiado por Irán.
No obstante, podría decirse que esta alianza es temporal, siendo imposible su convergencia política. Una de esas diferencias es su posicionamiento con respecto a Siria: mientras que Jamaa Islamiya se ha declarado su "enemigo", Hezbolá luchó del lado de Bashar al Asad en la guerra.
El Primer Ministro interino del Líbano, Najib Mikati, se reúne con el Jefe de Política Exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, en Beirut. Reuters
Josep Borrell alertó durante su visita al Líbano de que es "absolutamente necesario" evitar que éste sea "arrastrado a un conflicto regional" y consideró que eso es "lo último" que necesita la nación. El Alto Representante recordó que "nadie ganará con un conflicto regional" y señaló que "está ahi para explorar la situación y contribuir a una salida de la crisis". Borrell considera que los canales diplomáticos "tienen que permanecer abiertos para enviar una señal de que la guerra no es la única opción, es la peor opción".
El ministro de Exteriores libanés, Abadalá Bou Habib, aclaró en una rueda de prensa que "la paz es esencial para el Líbano, que todos los libaneses están sujetos a la paz" y reafirmó que "el Gobierno libanés está buscando activamente desescalar y los libaneses están practicando el autocontrol".
Fuego cruzado
Hezbolá lanzó 62 proyectiles contra uno de los principales centros de inteligencia en el norte de Israel, en su primera respuesta al asesinato del número dos de Hamás, Saleh al Arouri.
Un hombre trabaja en un tanque cerca de la frontera con el norte de Gaza. Reuters
Combatientes de la formación dispararon decenas de proyectiles "de varios tipos" contra la Base de Vigilancia Aérea de Meron, uno de tan solo dos centros con esas características en el Estado judío.
Según su comunicado, las instalaciones atacadas se ubican en la cima de la montaña "más alta de la Palestina ocupada" -otro pico mayor en manos israelíes pertenece al Golán arrebatado a Siria- y son las únicas destinadas a la "administración, vigilancia y control aéreo" en el norte de Israel. "No hay ninguna alternativa importante a la Base de Meron", afirmó Hezbolá, al explicar que el Estado judío solo cuenta con otro centro similar en el sur del país.
