Adelgazar y mantener un peso saludable es una de las preocupaciones más habituales entre la población general así como de la ciencia. A lo largo de los años la Universidad de Harvard ha llevado a cabo multitud de investigaciones al respecto que ha resumido en siete consejos que serán de gran ayuda tanto si comienzas un proceso de adelgazamiento como si ya estás en él.
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Perder peso de manera lenta y constante
Las personas que pierden peso de manera gradual y constante tienen más éxito en mantener el peso perdido. Esto permite que el cuerpo se adapte al cambio y pueda reducir el riesgo de desarrollar antojos o sentimientos de privación, sensaciones que a menudo acompañan a una pérdida de peso más rápida.
Haz un seguimiento
Esto incluye establecer objetivos SMART, es decir, específicos, medibles, alcanzables, relevantes y de duración determinada.
El autocontrol, como por ejemplo llevar un registro diario o semanal de alimentos o el uso de aplicaciones específicas, puede ayudar a ser más conscientes y responsables sobre los comportamientos alimentarios.
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Crear un sistema de apoyo
Las investigaciones sugieren que tener contacto frecuente con otras personas para obtener apoyo (como puede ser un médico, un familiar o un amigo de confianza en un proceso similar hacia un peso saludable) puede ser valioso para sentirse apoyado y acompañado.
Desarrollar patrones de alimentación saludable
Aunque algunos investigadores han cuestionado la utilidad del balance energético (calorías ingeridas versus calorías gastadas), la evidencia actual indica que la reducción de calorías sigue siendo el enfoque más efectivo para controlar el peso.
Practica la atención plena
La alimentación consciente aborda comportamientos asociados con el aumento de peso como pueden ser comer rápido, delante del televisor, mientras se mira el móvil, etc. El aumento de la conciencia y el aprecio por los alimentos que se ingieren puede proporcionar una mayor satisfacción, física y mental, y puede ayudar a reducir la ingesta excesiva de comida.
Mantenerse activo
El ejercicio es un componente básico para mantener un peso saludable y prevenir el aumento de peso, pero también desempeña un papel clave en el bienestar y la salud mental. La cantidad necesaria dependerá de los genes y los factores del estilo de vida. Realizar diferentes tipos de ejercicios puede ampliar aún más la gama de beneficios.
Priorizar el autocuidado
Dedicar tiempo para atender nuestras necesidades emocionales, físicas y espirituales puede ayudar a conseguir y mantener un peso saludable. El cuidado personal mejora el estado de ánimo y la sensación de bienestar, y aumentar la motivación y los niveles de energía.