Liderado por Cristóbal Colón en 1492, el descubrimiento de América es un episodio que ha marcado la historia y cambiado el curso del mundo. A menudo, la narrativa se centra en hombres destacados, pero detrás del viaje trascendental de Colón hay mujeres cuyas contribuciones fueron fundamentales.
Desde Felipa Moniz a Isabel I de Castilla, pasando por Beatriz Enriquez de Arana, Beatriz de Bobadilla y Ulloa e Isabel Moniz, han habido cinco mujeres con gran influencia en el viaje de Colón.
Felipa Moniz
Cristóbal Colón, navegante genovés al servicio de los Reyes Católicos de España, contó con el apoyo y la influencia de varias mujeres a lo largo de su vida. Felipa Moniz, su esposa, fue una de las que desempeñaron un papel significativo. Aunque se sabe poco sobre su vida, su matrimonio con Colón lo conectó con la alta sociedad portuguesa y le proporcionó la oportunidad de presentar sus ideas ante los monarcas.
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Nacida en Portugal, se convirtió en la esposa de Cristóbal Colón en 1479. A través de su matrimonio, Colón ganó el respaldo de importantes contactos que, eventualmente, lo llevarían ante la corte española.
Felipa se convirtió en la madre de Diego Colón, el hijo mayor del matrimonio, y aunque no vivió para ver los viajes históricos de su esposo, su influencia en la formación de la familia Colón fue innegable.
Isabel Moniz
Detrás de un hombre visionario, a veces hay una mujer igualmente perspicaz. En el caso de Cristóbal Colón, esa mujer fue Isabel Moniz, madre de Felipa Moniz y suegra del explorador. Isabel, a pesar de no estar directamente involucrada en los viajes transatlánticos, desempeñó un papel crucial en el respaldo a Colón.
Isabel Moniz compartió con su yerno la creencia en la posibilidad de llegar a Asia por una ruta occidental. Su apoyo fue fundamental cuando Colón buscaba patrocinadores para sus expediciones, demostrando que la fe en una visión audaz no se limita a la persona que la concibe, sino que puede extenderse a aquellos que la rodean.
Bartolomeu Perestrelo, suegro de Colón, fue un famoso navegante portugués de origen lombardo y ostentó el título de primer capitán, señor y gobernador de la isla de Porto Santo. Moniz le facilitó mapas, cartas de navegación y documentos que su marido había ido recopilando a lo largo de su vida de aventuras.
Beatriz Enriquez de Arana
Beatriz Enriquez de Arana, una mujer con la que Colón tuvo una relación fuera del matrimonio, también desempeñó un papel destacado en su vida y en la empresa del descubrimiento.
Madre de Hernando Colón, Beatriz fue parte integral del apoyo emocional que recibió el explorador durante tiempos difíciles. Su conexión con la familia Colón demostró ser esencial en el respaldo continuo al viaje de descubrimiento.
Después de la muerte de su padre, Hernando emprendió la tarea de recopilar y organizar los escritos y documentos relacionados con los viajes de Colón. Beatriz apoyó esta empresa monumental, asegurando que la historia escrita de Cristóbal Colón no se perdiera en los vaivenes del tiempo. Su dedicación a preservar la memoria fue un regalo duradero para las generaciones futuras.
Beatriz de Bobadilla y Ulloa
Beatriz de Bobadilla y Ulloa fue una mujer extraordinaria que asumió un papel de liderazgo después de la muerte de su esposo, Francisco de Bobadilla, quien sucedió a Colón como gobernador de La Española.
Beatriz, conocida por su astucia y habilidades de gobierno, mantuvo la estabilidad en la isla mientras gestionaba las complejidades de las relaciones con los colonos y las autoridades españolas. Entretanto, Colón realizaba sus viajes al Nuevo Mundo.
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Nombrada gobernadora de la isla de Santo Domingo por los Reyes Católicos, Beatriz demostró ser una líder eficaz. Su papel a menudo se pasa por alto, pero su gestión fue esencial para la consolidación de las colonias en América.
Isabel I de Castilla
Su contribución a los viajes de Colón va más allá de ser simplemente la monarca que dio el visto bueno; fue una patrocinadora real que tomó decisiones clave para hacer realidad el sueño de Colón.
Isabel I, junto con su esposo Fernando II de Aragón, brindó el apoyo financiero y logístico necesario para las expediciones de Colón. Su visión estratégica y su voluntad de respaldar proyectos arriesgados fueron cruciales para que el navegante genovés llevase a cabo sus travesías audaces.
Isabel I de Castilla se convirtió en una arquitecta del descubrimiento y, por ende, en una de las mujeres más influyentes en la historia de la llegada de Colón a América. Su apoyo financiero y político, materializado en las Capitulaciones de Santa Fe en 1492, allanó el camino para la expedición histórica.