La experiencia heredada: consejos de belleza imprescindibles que pasan de madres a hijas
Celebramos el Día de la Madre con tres expertas en belleza y sus hijas herederas de su experiencia en el mundo de la estética.
7 mayo, 2023 03:18Son madres e hijas que comparten su afición por la belleza, sus negocios y muchas horas al día. No hay secretos entre ellas y una mirada es suficiente para entenderse.
[Maribel y Myriam Yébenes: pasión por la belleza y la estética con la tecnología más puntera]
Hoy, en el Día de la Madre, cuentan para MagasIN los consejos heredados en torno a la estética y alguno que otro para la vida.
Maribel y Miriam Yébenes
Pasan entre 10 y 12 horas diarias juntas en el Centro de belleza y medicina estética Maribel Yébenes. Se parecen y se entienden a la perfección. La madre ha recibido el apodo de 'manos de hada' y la hija es una gran entendida en tecnología y aparatología de nueva generación. Un tándem perfecto.
¿Cuáles son los consejos de belleza que te ha dado tu madre y se te han quedado marcados a fuego para toda la vida?
Me ha dado muchos consejos para la vida, pero uno muy especial para mí es 'sé feliz', y que cualquier cosa que realice, incluida mi profesión, tiene que moverme la pasión y que con ello, realmente sea feliz. Mis padres me dieron la oportunidad de estudiar lo que yo quisiera y luego probar aquí en la empresa para ver si me gustaba.
Para mí, eso fue muy importante porque me encantó trabajar aquí desde el primer día y se convirtió en mi pasión. Esa lección de vida me parece maravillosa.
¿Y en cuidados de belleza?
En cuanto a cuidados personales, me ha aconsejado de todo. Cuando eres más joven te quieres hacer y probar todo, y mi madre siempre me iba frenando y me decía: "todo a su debido tiempo".
Aquí tenía a mi disposición todas las herramientas y toda la cosmética del mundo y había cremas para mujeres de 40 y de 50 años, que no debía de probar. Ella me decía que tenía que esperar y siempre buscar la naturalidad, es decir, que tuviese mucho cuidado con los excesos, que al final es la filosofía de nuestro centro: trabajar los rostros aportando mucha naturalidad y sin cambiar las expresiones. Desde pequeñita me ha ido repitiendo una y otra vez estos mantras.
Otra de las cosas que siempre me ha inculcado es la filosofía del esfuerzo y del trabajo. El lema de mi madre siempre ha sido 'trabajo , trabajo' que es como se consiguen los objetivos. Y además, algo que siempre he visto en ella, es que se rodea de gente muy joven, y esto le hace mantenerse siempre joven y también le motiva para seguir innovando, para seguir buscando tendencias y todo eso también me ha influido.
Es verdad que las jóvenes cada vez adelantan más la edad de tratamientos y se aplican en ocasiones, los que no deberían con su edad.
Claro, cuando eres jovencita no te das cuenta porque crees que eso no va a tener ninguna repercusión en el futuro. Por ejemplo, en mi época había una moda de la que luego muchas se han arrepentido, que era la de depilarse las cejas en una línea muy fina.
Mi madre siempre me decía que luego estas cejas que te quitas, no crecen y que seguro que después iba a querer unas cejas más pobladas. También la tendencia de los labios gruesos, pero sin tener en cuenta la forma del rostro, la fisonomía. Yo tenía la suerte de tener a Maribel Yébenes a mi lado, que me iba corrigiendo. E incluso, si me mostraba rebelde con las decisiones de mi madre, también tenía detrás a la gente del equipo.
¿Transmitirás estos valores a tus hijos?
Por supuesto. A mí me han venido muy bien, así que se los trasladaré a ellos. Ahora que tengo niños, un niño y una niña de nueve y ocho años, me doy cuenta de que lo tengo interiorizado, que voy repitiendo estas enseñanzas, que forman parte de mi educación, una y otra vez.
¿En qué no te pareces en nada tu madre?
Nos parecemos muchísimo, y a veces pasamos por situaciones en las que nos miramos y sabemos lo que estamos pensando, porque a parte de la genética, también hemos pasado mucho tiempo juntas. Yo me fui de casa a los 30 años, pero es que vivíamos en el instituto 10 y 12 horas diarias.
En la parte más profesional, quizás la diferencia sea que Maribel es mucho más manual, esa parte de cosmética aplicada y yo he vivido una era más tecnológica. Aunque he aprendido que lo maravilloso es la combinación perfecta de ambos mundos, porque la parte de artesanía, de manos en estética, nunca podríamos perderla. Y si podemos apoyarla con la tecnología, pues mejor.
¿En el centro disponéis de un 50-50 de tecnología y manual?
En tratamientos faciales siempre vamos a tener esa parte manual de limpiar, tonificar, exfoliar, masajes, mascarillas y luego en el centro, la parte de tecnologías va variando. Tenemos ahora más de 50 energías, con más de diez tipos de radiofrecuencia, cuatro o cinco tipos de láser, ultrasonidos, etc.
Como madre orgullosa, ¿cuál crees que ha sido la mayor aportación de tu hija al centro?
MY: Muchísimo. Desde la atención al cliente, la modernidad, formar el equipo, la formación y sobre todo, la ilusión. Un rejuvenecimiento en todos los sentidos para el equipo y para mí, fuerza y apoyo.
Ha sido muy importante lo que ha aportado al instituto, y aparte, tengo la enorme suerte de que es una mujer muy trabajadora, y claro, lo da todo. Yo como madre le digo: ¡Miriam descansa! La dedicación que tiene es exagerada. Ella aporta toda la tecnología, todo lo que es nuevo, aquello que a la gente que tenemos cierta edad ni se te pasa por la cabeza.
Ahora ella lidera el grupo muy bien con gran éxito profesional.
¿Quién de las dos viaja de manera recurrente para ver qué se cuece en el panorama internacional?
Miriam: Ahora voy yo, pero piensa que con 15 años ya empecé a acompañar a mi madre a todos los congresos internacionales. Ahora es muy fácil porque tenemos internet, pero antiguamente eso no existía, y ella se recorría todo el mundo para buscar las novedades. Yo la acompañaba, como si fuera un juego, de forma muy natural, conociendo todas las marcas, todos los proveedores, comenzando a distinguir lo bueno de lo malo, y de lo regular. He podido vivir todas las tendencias, lo que funcionaba y lo que no. Por eso ahora, es relativamente fácil para mí, porque lo llevo haciendo desde bien pequeña.
MY: Claro es difícil tener ese ojo clínico ante una nueva máquina. Cuando comienzan a explicarte cómo funciona. A Miriam ya le pasa, y eso lo ves cuando tienes mucha práctica. Enseguida me llama y me dice: ¡Oye mamá he visto esto! ¿Qué te parece? Y yo le digo: ¡Te parece a ti interesante, pues adelante! Y ella se dedica a hacer los estudios pertinentes sobre el método y la máquina, antes de comprarla.
Miriam: Creo que somos la única empresa de belleza y medicina estética que exijo que la máquina esté una semana, un mes o dos, dependiendo del tipo de tecnología que sea para que yo pueda hacer un estudio antes de comprarla, realizando a lo mejor 200 tratamientos para saber cómo la podemos mejorar, porque tenemos método propio y movemos parámetros y potencias para mejorar y aumentar los resultados. Hay algunas máquinas que no pasan el filtro y se quedan en el camino. Total seguridad ante una nueva tecnología.
¿Tu hija se parece a ti?
MY: En muchas cosas sí. La gente nos lo dice mucho. Ya sea cuando hablamos con el equipo, que les decimos lo mismo sin saberlo, e incluso en casa, con su padre, nos repetimos... (se ríe) Estamos mucho tiempo juntas, como decía Miriam, y al final te haces clónica.
Muchas veces me dice: ¡Mamá qué pesada eres repitiendo tanto! Y le digo: Verás que te va a pasar lo mismo, la historia se repite... Yo me reconozco como madre pesada.
Miriam: Creo que eso puede ser la única diferencia entre nosotras, porque es verdad que mi madre y mi padre han estado tan pendientes de nosotras, tan encima... Y yo soy una madre un poco más pasota, más independiente, dejo a los niños que ellos hagan lo que quieran... Si se caen les digo: ¡Vamos, levántate! y no pasa nada... Yo vivo más relajada. Es verdad que vosotros no vivíais relajados porque eran otros tiempos. A mí me da igual como vayan vestidos, o lo que hagan...
Eso también es un signo de diferente generación, ¿no?
MY: Eso es, y tienen toda la razón. Yo sufría y sufro ahora.
¿Cuál es el tratamiento de belleza que aconsejáis realizar en cabina para el verano?
Miriam: Este año tenemos muchas novedades. El tratamiento Emface ha revolucionado el sector de medicina estética porque por primera vez tenemos a nuestra disposición dos tecnologías juntas: radiofrecuencia sincronizada y tecnología focalizada de alta intensidad. Por primera vez, hay un desarrollo muscular muy importante porque al final la firmeza y el rejuvenecimiento es colágeno, elastina y músculo.
Otro lanzamiento que fue y es una revolución se llama Método Yellow, que es un láser amarillo que lo que hace es reducir las manchas, unificar el tejido y se puede hacer en cualquier época del año. Es decir, en mayo o junio, que es el momento del sol y empiezan a salir muchas manchas y es cuando comienzan a preocupar.
Antiguamente cuando había sol, no podíamos aplicar tratamientos de este tipo porque había riesgo y ahora se puede realizar ese tipo de tecnología. Y se consigue un resultado muy bonito, porque trabajamos no solamente las manchas, sino también los capilares.
Y te avanzo en primicia, porque es la primera que lo contamos, que el 8 de mayo tenemos el lanzamiento de una tecnología que se lla Titanium US. Ultrasonidos perfectos para reafirmar el óvalo, el cuello, etc., ideal para pegar tejido y para tensar. También se puede hacer en brazos, en rodillas, etc.
Felicidad y Leticia Carrera
Tras la pandemia y con 40 años al frente de su centro de estética, Felicidad Carrera cedió el puesto de mando a Leticia, su hija, quien contaba a MagasIN que su madre seguiría supervisando el negocio, pero una forma más relajada. Y es que ambas son uña y carne y nos desvelan algunos de sus secretos.
¿Cuáles son los consejos de belleza que te ha dado tu madre?
Leticia: Uno de los primeros recuerdos que tengo en este sentido es la obsesión que tiene mi madre con los rayos UV y la protección solar. Recuerdo desde muy pequeña que en la casa de la playa nos ponía a mis primos y a mí en fila, y no nos dejaba salir hasta que nos había aplicado el protector solar, gastaba casi un bote al día. Siempre ha sido muy cuidadosa con esto y me lo ha inculcado para toda la vida. También me ha insistido mucho en la prevención y la naturalidad, como pilares básicos de belleza.
[Leticia Carrera se pone al frente del Centro Felicidad Carrera, fundado por su madre hace 40 años]
¿Tus hijos heredarán estos valores?
L: Por supuesto que sí. Y hablando como farmacéutica, pienso que desde niños tienen que conocer el fuerte impacto que tiene la radiación UV en la piel, y cada vez más por el cambio climático.
A pesar de resultar complicado, porque a los niños no les suele gustar usar el protector solar, poco a poco, como un juego, tenemos que conseguir que ellos mismos se lo apliquen correctamente, del mismo modo que se lavan los dientes a diario o se peinan.
¿En qué no te pareces en nada a tu madre?
L: Bueno, creo que me parezco bastante a ella, pero por decirte una diferencia, ella es más impulsiva y valiente en la toma de decisiones, quizá por la larga experiencia que tiene y su capacidad de analizar pros y contras de diferentes situaciones.
Yo me considero algo más reflexiva o precavida a la hora de decantarme en una situación compleja.
¿Cuál ha sido la aportación de tu hija al centro?
Felicidad: Desde luego, no puedo estar más orgullosa. Leticia es trabajadora, emprendedora y perfeccionista, y verla trabajar me llena de emoción. Gracias a ella nuestro centro ha alcanzado un nivel superior.
Su visión y conocimientos hacen que la experiencia de nuestros clientes sea excelente en todos los sentidos. Me encanta cómo está en constante evolución, siempre aprendiendo y buscando los tratamientos más vanguardistas. Las nuevas incorporaciones de aparatología, su selección de talento, el desarrollo de nuestro complemento nutricional FC Collagen o de la crema de cuerpo multifunción FC Perfect Shape, ha hecho tantas aportaciones… Lleva dirigiendo el centro ya mucho años, desde mucho antes de que yo me retirara.
¿Tu hija se parece a ti?
F: Se parece mucho a mí en muchos aspectos, de lo que más orgullosa me siento es de haberle transmitido el rigor y la honestidad que esta profesión necesita. Ella es muy perfeccionista, quizá demasiado, como yo he sido siempre, pero ahora mirando con más perspectiva, me gustaría que se relajara un poco y viviera más tranquila dedicando algo menos de tiempo a la empresa.
Quiero que sea feliz, que disfrute de la vida y también de su trabajo, pero sin presión, no es necesario pretender ser perfecta en todas las facetas de su vida.
¿Cuál es el tratamiento de belleza que aconsejáis realizar en cabina a vuestras clientas de cara al verano?
Leticia: Uno de nuestros tratamientos estrella para rostro es Ultherapy, un equipo médico de ultrasonidos, que compactan, retraen y tensan la piel en una única sesión anual. Llega a las capas más profundas de la piel (el nivel conocido como SMAS) y logra generar puntos de microcoagulación que condensan el tejido y reorganizan las fibras de colágeno.
Para cuerpo tenemos fantásticas opciones: Zionic para tratar celulitis o elevar glúteos, Transform para reducir volumen y reafirmar a la vez (es nuestra gran novedad de esta primavera), Morpheus8 para combatir la flacidez cutánea de los brazos por ejemplo o Wonder para tonificar los músculos.
¿Qué es lo que hacemos fatal las españolas para cuidar nuestra piel?
Felicidad: Las españolas hacemos muchas cosas bien, pero quizá con el tema del sol tenemos que tener más cuidado. Tomar el sol no es tumbarnos en la playa durante horas, es pasear por la orilla, hacer deporte al aire libre o sentarse en una terraza.
Para hacer todo esto es necesaria la protección solar. Recomiendo SPF 50+ durante todo el año.
Y no restemos importancia a la prevención, es muy frecuente recibir consultas de cómo tratar la flacidez o las arrugas cuando ya están en un grado muy avanzado, no dejemos todo para el último momento, es importante cuidar nuestra piel desde jóvenes, porque nos va a tener que acompañar toda la vida.
Isabel y Ana P. Lostao
54 años lleva Isabel al frente de su centro de estética Lostao, local de referencia en Zaragoza. Hoy, su hija Ana Puelles, es su gran apoyo al frente de la dirección y la gestión del negocio.
¿Cuáles son los consejos de belleza que te ha dado tu madre?
Ana: No hay belleza sin constancia. Lo escucho desde que tengo uso de razón. Es su mantra. Por supuesto. Y no solo en cuestión de belleza, en todos los ámbitos de la vida. Estudios, deporte, trabajo... No creo en los resultados rápidos y sin esfuerzo.
¿En qué no te pareces en nada a tu madre?
Ana: ¡Creo que no nos parecemos en casi nada! Yo soy más cariñosa, mucho más habladora y también más desordenada.
¿Cuál ha sido la aportación de tu hija al centro, o a la belleza o a la estética de la que te sientes especialmente orgullosa?
Isabel: El giro ha sido enorme desde que ella está más al frente. Sin perder la esencia de Lostao y de la estética tradicional le ha dado un toque de modernidad absoluto. Está a la vanguardia en tecnología y cosmética.
Sin ella, Lostao no estaría hoy donde está. Antes, trabajábamos de un modo diferente. Quizás solo nos centrábamos en nuestro trabajo y no en la visión más empresarial del negocio.
¿Tu hija se parece a ti?
Isabel: En nuestra forma de ser creo que poco. Ella es muy generosa y cariñosa. En capacidad de esfuerzo y amor hacia el trabajo, desde luego somos iguales.
¿Cuál es el tratamiento de belleza que aconsejáis realizar de cara al verano?
Ana: Es importante preparar la piel de cara a la exposición solar. Aunque nos pese, no usamos todo el FPS que deberíamos, así que trabajar en cabina con antioxidantes es muy recomendable en esta época del año para preparar la piel y minimizar los efectos más nocivos de la radiación solar, sobre todo, para evitar el envejecimiento prematuro.
En cuanto a corporal, empezamos a descubrir zonas que están tapadas la mayor parte del año, así que antes de cualquier tratamiento, una exfoliación, hidratación y preparación serán fundamentales para un bronceado saludable y uniforme.
¿A favor o en contra de la operación bikini?
Ana: Ni a favor ni en contra. Evidentemente, lo ideal es cuidarnos todo el año y es algo cada vez más habitual. El cliente no quiere perder los resultados obtenidos, pero también es indiscutible que hay determinados tratamientos, como de reducción o mejora de la celulitis que crecen en primavera.
Tenemos que verlo cómo algo positivo, como un punto de inicio en aquellas personas que no se han cuidado nunca y que para ellas supone el inicio o el descubrimiento de algo nuevo y con muchos beneficios a largo plazo. Para todo hay una primera vez. Y si empezar a cuidarnos se llama 'operación bikini', 'previo a mi boda' o 'postembarazo', bienvenidos sean.
¿Qué es lo que hacemos fatal las españolas para cuidar la piel?
Ana: Hace unos años te hubiera dicho que no utilizar tónico y FPS. Ahora creo que dejarnos guiar por modas o tendencias. Aunque supongo que esto no ocurrirá solo en España.
Internet puede ser muy beneficioso para algunas cosas, pero en otras nos abre puertas que nos llevan a terrenos desconocidos y creer que sabemos más de lo que sabemos.