Estas son las mieles de Málaga con Denominación de Origen: ocho variedades protegidas

El pasado año, la gastronomía de Málaga consiguió un nuevo hito. La Denominación de Origen Protegida (DOP) Miel de Málaga es un distintivo oficial que certifica la calidad y singularidad de las mieles producidas en la provincia, algunas de ellas únicas.

Este reconocimiento asegura que las mieles poseen características únicas derivadas de la flora local, el clima mediterráneo y las prácticas tradicionales de apicultura que se han transmitido de generación en generación.

El Consejo Regulador de la Denominación de Origen Protegida Miel de Málaga se encarga de la gestión y promoción de las ocho mieles de Málaga reconocidas bajo este sello. 

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La DOP abarca tanto mieles monoflorales, obtenidas principalmente de una especie vegetal como el aguacate, el castaño o el romero, como mieles multiflorales, que combinan néctares de diversas flores.

La Asociación de Apicultores de Málaga, compuesta por más de 250 productores con una media de diez kilos de miel por colmena, venía reclamando esta declaración desde hace años. 

Esta solicitud se presentó esta solicitud el 7 de febrero de 2022, respaldada por más de 22 años de trabajo en la promoción y valorización de las mieles de la provincia. La apicultura malagueña cuenta con una tradición de casi seis siglos, con referencias históricas a la calidad y abundancia de su miel, que ya en el siglo XVI se exportaba a diversos países europeos.

Características

La miel de Málaga se caracteriza por su baja humedad y acidez, lo que le confiere una alta estabilidad y una vida útil prolongada. La DOP garantizará al consumidor el origen, la calidad y las propiedades de las mieles producidas y envasadas en la provincia, certificando ocho tipos de miel según su origen floral. ¿Qué mieles se incluyen dentro de la DOP?

-Miel de Milflores. Hay una gran variedad de floraciones que pueden ser la base para una miel multifloral, o de milflores. El color de las mieles multiflorales suele ser ámbar, tendiendo a claro, pero las encontraremos también de otros.

-Miel de Azahar. Las mieles de azahar son de color ámbar amarillento muy claro, con tonalidades pajizas. Cuando cristalizan se vuelven más blanquinosas. Tiene un aroma claramente identificable, con marcadas notas cítricas muy características (a antranilato de metilo) y componentes florales, muy intenso y bastante persistente.

-Miel de Romero.  Tiene un aroma floral, generalmente poco intenso y de persistencia variable, a veces mucha, y con un componente alcanforado, siempre delicado. La intensidad y persistencia dependen de la composición del suelo y de la meteorología, que favorecen más o menos la formación por las plantas de aromas. Cuando coincide con almendros la miel resultante tiene notas afrutadas.

-Miel de Tomillo. Las mieles de tomillos tienen dos grupos de colores, unas, las de primavera, son de tonalidades ámbar claro, otras, las de primavera más tardía o verano, suelen ser de color ámbar, a veces con ligeras tonalidades rojizas. Su aroma es muy característico.

-Miel de Eucalipto. Las mieles de eucalipto son de color ámbar claro, con unos característicos tonos verdosos, más perceptibles en la zona superior del envase, donde la miel contacta con el vidrio. Tienen un aroma muy particular, a madera mojada, muy intenso y muy persistente.

Mieles de Málaga.

-Miel de Castaño. Las mieles de castaño son de color ámbar a ámbar oscuro, con unas claras tonalidades pardo-verdosas que son más visibles en la zona superior, donde la miel toca el vidrio del envase. Tienen un aroma muy particular, con un claro componente amaderado, a madera seca, como el de las botas donde se envejecen los vinos, y una base floral.

-Miel de Aguacate. Es de color ámbar oscuro, casi negro, y fluida, sin tendencia a la cristalización. Tiene un aroma floral, con claras notas afrutadas; se diferencia claramente de otras mieles de aspecto semejante, como las de encina, por la total ausencia de componentes malteados en el olor.

-Miel de Bosque. Son de color muy oscuro, ámbar oscuro, a veces con tonalidades grises en la parte superior, donde toca con el envase, que es la parte más iluminada. Tiene un aroma muy característico a malta, a pan o cereal tostado, intenso y medianamente persistente.

El objetivo principal de la DOP Miel de Málaga es proteger la tradición apícola local, garantizar la calidad de los productos y promover la sostenibilidad ambiental. Esto se traduce en la implementación de estrictos controles de calidad que prohíben la adulteración de la miel y certifican su origen.