La Ciudad del Rock, en Arganda del Rey.
El macrocentro logístico de Arganda del Rey pone en jaque la viabilidad de la 'gafada' Ciudad del Rock
El recinto para festivales está dentro de los terrenos en los que se va a ubicar un gran polígono que puede crear 18.000 puestos de trabajo en la localidad.
2 febrero, 2024 02:11En su última entrevista con Madrid Total, el alcalde de Arganda del Rey, Alberto Escribano, anunciaba que el macrocentro logístico de la localidad iba a ser una realidad "muy pronto". Una buena noticia para los vecinos de una de las localidades con peores cifras del paro de la Comunidad, pero que esconde la hipotética desaparición de la Ciudad del Rock.
El espacio de eventos fraguado en 2005 con motivo del Madrid Rock in Río ha ido perdiendo fuerza en el panorama musical nacional, quedando relegado a acoger uno o dos festivales al año y eventos privados. Situación que podría empeorar con este proyecto urbanístico.
Y es que, tal y como han confirmado fuentes municipales a este diario, los terrenos en los que está asentada la Ciudad del Rock pertenecen al polígono industrial que está dando sus primeros pasos tras llevar parado más de 12 años.
Todos estos terrenos son de la Comunidad de Madrid, por lo que, desde el Ayuntamiento, insisten en que no hay que precipitarse en las conclusiones, puesto que el proyecto "puede compatibilizar ambas cosas". Es decir, por un lado, un gran centro logístico y, por el otro, mantener la Ciudad del Rock tal y como está.
Ni el Ayuntamiento de Arganda ni la Comunidad de Madrid se atreven a asegurar qué va a pasar finalmente y apuntan a que el desarrollo industrial está en una fase muy "temprana". Todo depende de cómo se configure finalmente y de qué decidan hacer con él los inversores.
Alberto Escribano, alcalde de Arganda del Rey.
La duda es si pueden convivir centros logísticos con un recinto de estas características. O, más bien, si van a querer que esto ocurra. Las opciones son dos: integrar la Ciudad del Rock o destruirla para levantar en su espacio más empresas.
Fuentes cercanas al proceso insisten en que es difícil decir qué va a pasar a corto plazo, puesto que todo el proyecto es "muy lento" y lleva "muchos trámites".
De hecho, el último paso que se ha conocido fue el informe ambiental estratégico de la futura plataforma logística. Elaborado por la Dirección General de Transición Energética y Economía Circular de la Consejería de Medio Ambiente, Agricultura e Interior de la Comunidad de Madrid.
El terreno de la Ciudad del Rock es un 'pequeño' espacio dentro de la plataforma logística. Concretamente, 35 hectáreas entre el área de parking (con capacidad para 6.000 vehículos) y el recinto musical (en el que entran 96.000 personas).
Es un gran espacio, pero pequeño si se compara con los terrenos previstos para la plataforma logística: un millón de metros cuadrados edificables.
Historia de un naufragio
Este recinto 'gafado' por las sucesivas crisis económicas ha tenido sus luces y sus sombras. En él se celebraron todas las ediciones de Rock in Río y la primera y única edición del Primavera Sound en Madrid.
Cuando los terrenos (que siempre han pertenecido a la Comunidad de Madrid) se cedieron al Ayuntamiento de Arganda del Rey, el contrato de gestión era por varios años. Estaba la promesa de que se celebraran más de diez ediciones del Rock in Río.
Pero, aun así, en sus orígenes, esos terrenos ya pertenecían a la citada plataforma logística. El problema era que como España estaba atravesando una crisis económica, el centro industrial quedó aparcado y se decidió apostar por este formato festivalero.
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Hizo falta una recalificación de los terrenos que tampoco se libró de los escándalos. Los movimientos de dinero aparecieron reflejados en el juicio de la trama Gürtel hasta terminar dependiendo del Ayuntamiento de Arganda en 2006.
Se desconoce cuánto invirtió el Consistorio en este espacio, pero se estima que más de 10 millones de euros. Con ese dinero se aisló parte del suelo, se construyeron instalaciones cerradas y se levantó la Fuente de las Estrellas, que tiene un récord Guinness por ser la fuente visitable más grande del mundo.
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Al principio parecía la mejor decisión posible: Bob Dylan, Amy Winehouse, The Police, Metallica... Todos venían a tocar a Madrid. Pero el festival duró solo tres ediciones: 2008, 2010 y 2012.
La empresa de Rock in Río decidió usar una cláusula del contrato inicial y puso punto final a su aventura en Arganda. Ambos organismos habían firmado, en su convenio de 2006, que Rock in Río podía salirse del contrato si no se cubría la mitad de los gastos del evento. En plena crisis económica, fue fácil que esto ocurriera, y Rock in Río se lavó las manos.
Desde entonces, se han alternado los usos privados del recinto con algún que otro festival como A Summer Story y Puro Latino. Precisamente, estos dos eventos musicales han confirmado sus ediciones de 2024. Esto supone que si la Ciudad del Rock termina reducida a ruinas, no será este año.
