Una persona espera un tren en la estación de Atocha.

Una persona espera un tren en la estación de Atocha. eP

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El día a día de un trabajador de Cercanías: obras, falta de personal y piezas caseras hechas con máquinas 3D

Los trenes pasan más tiempo en la vía del que deberían entre revisiones y esto hace que acumulen fallos. 

16 diciembre, 2023 02:44

"Un problema de señalización retrasa 5 líneas de Cercanías". Esa era la noticia con la que, este viernes, se despertaban los usuarios de una de las redes de transportes más importantes de toda España. 

Un día más en un servicio básico para muchos madrileños y que (fuera de la gresca política) acarrea más de 700 incidencias en lo que va de año. Sólo si analizamos las dos últimas semanas ha habido tres descarrilamientos. 

Pero, ¿por qué? Madrid Total habla con un trabajador de Cercanías y dos representantes sindicales que conocen de cerca el problema para conocer cómo es el día a día detrás de los retrasos y los trenes cancelados. 

Porque, a los mandos del tren que llega diez minutos tarde y tiene el aire acondicionado roto, hay un maquinista que ve como sus plantillas van mermando y tiene que sacar un tren del que no le han dado "parte".

Y, tras la larga lista de trenes esperando para entrar en talleres, hay un trabajador que no da abasto y tiene que considerar como 'arreglado' una calefacción que no sabe si aguantará dos paradas más. 

El maquinista

Miguel (nombre ficticio de esta fuente anónima que trabaja en Cercanías Madrid) asegura que uno de los principales problemas por los que hay tantos retrasos es el estado de los trenes y que, con el colapso de los talleres, muchos salen con fallos. 

Muchos maquinistas dan por inútiles trenes (deben salir de circulación por problemas técnicos como un aire acondicionado que no funciona, grafitis o problemas de motor) y a los cuarenta minutos "están en la vía de nuevo". 

Varios trenes en la estación de Atocha-Almudena Grandes.

Varios trenes en la estación de Atocha-Almudena Grandes. Jesús Hellín Europa Press

"La circulación de trenes tiene un reglamento muy serio. Gran parte del servicio sale adelante porque los maquinistas ponen de su parte. Si se ponen muy técnicos, muchos trenes tendrían unos retrasos muy importantes e, incluso, se podrían suspender", afirma. 

Normalmente, son los propios profesionales los que, cuando se dan el cambio de turno, notifican al compañero del estado del tren que van a sacar de la vía. Pero, si ese tren lleva parado un tiempo y no es un relevo, los que notifican son el Servicio de Gestión de Cercanías. 

El problema es que el tráfico de Cercanías, en muchos casos, no permite al maquinista hacer ciertas comprobaciones porque puede acarrear un retraso en la circulación. 

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"El maquinista llega y le dicen 'tu material está en vía 2 y cuando llega el tren está lleno de gente y listo para salir' y no les da tiempo a mucho más", explica este trabajador de Cercanías, que afirma que no son problemas que van a provocar un descarrilamiento, pero sí pueden provocar que un tren se pare en plena vía. Como ha ocurrido estas semanas. 

A su parecer, la solución "a corto plazo" es invertir en los talleres, "que se hagan más reparaciones, no parches. Que vayan al taller y salgan perfectos". 

El problema es que la escasez del parque móvil de trenes en Madrid, para toda la circulación que hay, impide que muchos de estos trenes puedan salir de las vías. Esto provocaría que habría menos trenes y se incrementarían los retrasos.

Y es precisamente ahí, en los retrasos, donde Miguel ve el gran problema. Porque cuando se acumula mucho retraso se llega a suprimir el trayecto. 

Ahí el maquinista (que se entera casi a la vez que los pasajeros) tiene que salir e informar a todo un tren. Por eso, los trabajadores de Cercanías temen que pase algo "gordo"; como ocurre en el sistema sanitario cuando hay retrasos en la atención a pacientes y se producen las agresiones.

Máquinas 3D

El testimonio de Miguel coincide con los que, desde hace años, llevan denunciando desde el Sindicato de Maquinistas (Semaf). Su portavoz, Teo Moreno, habla con este diario para reiterar que la falta de trenes, sus reparaciones a medias y las obras han desatado la "tormenta perfecta".

"Hay mucha incidencia porque los trenes no se mantienen como se deberían de mantener. Pasan más tiempo en la vía del que deberían entre revisiones", asegura poniendo como ejemplo las ITV que pasa un coche. "Igual, pero con trenes". 

También es consciente de que falta gente en talleres y, por ello, no se realizan las revisiones "tan extensas" como se deberían de hacer a los trenes. 

Estación Puerta de Atocha.

Estación Puerta de Atocha. EP

Las obras que han cortado ciertas vías y el colapso de otras, con más viajeros de los que están acostumbrados a soportar, es otra de las razones. 

La situación es tan desesperante en muchos de estos talleres que hay tirado de ingenio. "Extraoficialmente" desde el sindicato tienen conocimiento de que hay gente que con impresoras 3D hace piezas que faltan en cabina. 

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No son palancas ni nada que pueda influir al funcionamiento del tren, sino cosas más pequeñas y estéticas como puede ser el marco de plástico de un reloj que se ha roto y alguien lo hace con la impresora. "No tenemos nada a nivel oficial, pero a nivel individual sí nos llega". 

Desde Semaf insisten en que la situación en el Cercanías de Madrid es "insostenible" porque si no pasa algo en la vía hay obras. "Cortan el tráfico en una parte y lo canalizan por otra... y eso te multiplica la cantidad de incidencias", añade. 

En el caso de los maquinistas que las plantillas estén justas incrementa todavía más los retrasos. Hay días que, aunque el conductor no tenga que llevar pasajeros y esté de 'reserva', le mandan a mover pasajeros por falta de compañeros. 

"Esto hace que no quede ningún maquinista para mover trenes y te obliga a suprimir algunos. Es una cadena", lamenta. 

AliExpress

Aunque la situación es grave, en ocasiones roza lo cómico. Rafael Escudero, portavoz del Sindicato Ferroviario, reconoció hace unos días que los propios empleados tienen que encargarse de comprar algunas piezas que faltan en el servicio de Cercanías. Ya sea una ferretería normal o incluso en páginas como AliExpress.

Viajeros en la Estación de Cercanías de Chamartín en verano.

Viajeros en la Estación de Cercanías de Chamartín en verano. Alejandro Martínez Vélez Europa Press

Esto es consecuencia de un problema generalizado (a nivel nacional) para obtener piezas de recambio por falta de presupuesto y proveedores.

Lo mismo que falta con la prevención de las vías: sólo hay un tren auscultador para revisar el estado de todas las vías en España. 

Además, desde este sindicato añaden a esta situación los reiterados problemas en el túnel entre Atocha y Recoletos, reformado en 2019. Creen que es necesaria "una auditoria" porque "un cambio que está montado sobre placas de hormigón aparece desalineado" en multitud de ocasiones.

Al final, todos coinciden en que la situación tiene una clara solución: la falta de inversión y en que los damnificados son los usuarios y todos aquellos profesionales que día tras día intentan sacar su trabajo adelante "lo mejor que podemos" con los medios que tienen.