Llega la calma a Renfe y Adif. Los sindicatos de ambas empresas han llegado a un acuerdo en la tarde de este miércoles con el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible por el cual queda desconvocada la huelga que se iniciaba este viernes, 24 de noviembre. Además de para este viernes, se habían anunciado paros para el 30 de noviembre y para el 1, el 4 y el 5 de diciembre.
La intervención del nuevo ministro del ramo, el exalcalde de Valladolid Óscar Puente, ha sido clave para propiciar un acuerdo entre ambas partes, según fuentes conocedoras de la negociación consultadas por EL ESPAÑOL-Invertia.
Puente se ha implicado en encontrar el acuerdo. Muestra de ello es que miembros clave de su ministerio han participado en la negociación, y que además han sido respaldados por Raül Blanco, presidente de Renfe y María Luisa Domínguez, presidenta de Adif. El ministro ha estado informado del transcurso de las negociaciones en todo momento, y ha comprometido su palabra en los acuerdos.
Esto supone un triunfo importante para el nuevo ministro, que esquiva un inicio de mandato turbulento en su cartera. Puente consideró en una entrevista en el Canal 24H el miércoles "completamente injustificada" la huelga. "Empezarla sin que ni siquiera hayamos comenzado una negociación para el traspaso no es procedente", declaró.
En la misma línea se expresó este miércoles el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, quien afirmó que "no hay razones para la huelga preventiva", tras asegurar que los derechos de los trabajadores "se verán plenamente garantizados" con el traspaso de competencias.
Según informó el Ministerio, el acuerdo permitirá "trabajar de la mano en el proceso de transferencia de la gestión de Rodalies de Cataluña y en el futuro de Renfe Mercancías". "El acuerdo alcanzado responde al compromiso expresado por el ministro Óscar Puente de garantizar que los representantes de los trabajadores de Renfe y Adif formen parte de las negociaciones y de respetar y salvaguardar en todo momento los derechos socio-laborales y de permeabilidad de todos los empleados de ambas empresas públicas", se afirma el comunicado emitido por el Ministerio.
Las desavenencias se iniciaron con el pacto entre el PSOE y ERC por el cual se cedían las competencias de Rodalies a la Generalitat de Cataluña. Con dicho pacto además de con otras cesiones, el PSOE se granjeaba el apoyo de los republicanos a la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno.
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El pacto puso en alerta los sindicatos, que temían que éste fuese el inicio de la “disgregación de Renfe en 17 empresas pequeñas autonómicas”. Éste era“uno de los riesgos que se corre si el ejemplo de Cataluña cunde en el resto de regiones” y cada gobierno autonómico reclama la gestión de sus cercanías, según defendió Rafael Escudero, portavoz del Sindicato Ferroviario de Renfe.
Para Escudero, este fraccionamiento llevaría a una peor operatividad y al deterioro de las condiciones de los trabajadores. "Nosotros no nos oponemos a que las competencias recaigan en las comunidades autónomas, pero sí al desmembramiento de la empresa pública", añadió. Pedro Aller, responsable de infraestructuras del Sector Ferroviario UGT, llegó a criticar la “falta de rigor absoluto desde el punto de vista técnico en todo” lo que el Gobierno ha anunciado: “No se ha mirado cómo se puede realizar técnicamente”.
Integridad
Ahora, los sindicatos aseguran haber conseguido todas sus reivindicaciones, principalmente "la garantía de integridad" de esta empresa pública y el mantenimiento de sus plantillas.
El 15 de diciembre ambas partes están citadas a una reunión para dar seguimiento al cumplimiento de los acuerdos tratar todas estas cuestiones. Otro de los compromisos a los que han llegado las partes es la puesta en marcha de mesas de negociación específicas para tratar los problemas que llevaron a la convocatoria de huelga. Transportes se ha comprometido también a mantener las condiciones laborales de la plantilla.
"Modificaciones puntuales"
Con el anuncio de la desconvocatoria, Renfe y Adif han recuperado la mayor parte de la oferta habitual prevista para este viernes. En total, 1.548 trenes de Media, Larga Distancia y AVE se habían cancelado, a los que se sumaban otros 990 de mercancías. La compañía ha admitido que se mantendrán algunas cancelaciones y habrá algunas incidencias: "Renfe va a reprogramar la oferta habitual de mañana, por lo que pueden producirse modificaciones puntuales en el servicio ferroviario durante las primeras horas. Esta situación se irá normalizando a lo largo de la mañana".