Materias primas y transición energética: Europa y EEUU buscan un frente común para no depender de China
Las materias primas críticas son el elemento vital de nuestra transición hacia una economía digital y verde.
28 mayo, 2023 02:37Bruselas pedirá a los países de la Unión Europea (UE) que se negocie con Estados Unidos un acuerdo que garantice la seguridad al acceso a las materias primas frene a la hegemonía china.
La Comisión Europea y Washington han estado en desacuerdo durante meses por la Ley de Reducción de la Inflación (IRA, por sus siglas en inglés), que está diseñada para dar un impulso a la transición energética estadounidense en su competencia con Pekín y, al mismo tiempo, liberar a Estados Unidos de su dependencia de los minerales chinos.
El cambio significa que Bruselas se inclina hacia las solicitudes de Washington de un pacto vinculante sobre materias primas críticas. La UE había estado presionando por un acuerdo más flexible sobre los minerales críticos utilizados en las baterías de los automóviles eléctricos que no requerirá la aprobación de sus 27 países miembros.
La UE debe asegurarse de que su esfuerzo por asegurar materias primas más críticas no se realice a expensas del medioambiente, y para ello se reunirá con Estados Unidos entre el 30 y el 31 de mayo en Suecia. Pero el objetivo no es centrarse exclusivamente en la seguridad del suministro, sino que se incluyan también las preocupaciones ambientales.
El documento sobre este acuerdo señala que "la UE también debería redoblar sus esfuerzos para aumentar la producción responsable de materias primas críticas en la UE y en terceros países, construyendo así cadenas de suministro sostenibles y fiables". Además, pide "coherencia" entre las políticas europeas "sobre comercio, desarrollo, industria y medioambiente".
Materias primas y reciclaje
A ambos lados del Atlántico, parece que los programas políticos son el único camino para preparar nuestras economías para el futuro. La Ley de Materias Primas Críticas de la Unión Europea (CRMA, por sus siglas en inglés), presentada a principios de este mes, que tiene como objetivo reducir la dependencia de la región de las importaciones de minerales y metales críticos, que se utilizan, por ejemplo, en las baterías de los vehículos eléctricos o los generadores de turbinas eólicas. Si bien en algunos casos las condiciones ya se cumplen hoy, será mucho más difícil para otros.
Según Carsten Menke, director de investigación de próxima generación del banco suizo Julius Baer, el CRMA no pondrá en peligro la transición energética, al mismo tiempo que el reciclaje es la forma más elegante de reducir la dependencia de las importaciones.
"Al parecer, el camino hacia la preparación de nuestras economías y sociedades para el futuro es solo a través de programas políticos", señala Juluis Baer. "Ha habido mucha ambición y activismo a ambos lados del Atlántico desde el comienzo de la pandemia y aparentemente los legisladores se están turnando para impulsar nuevos programas".
La CRMA requiere que para aquellos minerales y metales que están en la lista, la región tiene que extraer el 10%, procesar el 40% y reciclar el 15% de lo que consume para 2030.
Dicho de otra manera, el 90% de los metales y minerales aún pueden importarse, aunque no más del 65% de los suministros provengan de un solo país fuera de la región. Para ilustrar las consecuencias, la Unión Europea cumpliría estas condiciones ya hoy en el caso del cobre.
No obstante, la región sigue siendo exportadora neta de cobre reciclado, lo que desde un punto de vista político parece subóptimo. Por el contrario, será mucho más difícil para la Unión Europea cumplir con las condiciones de minería de la CRMA para metales y minerales como el litio, el manganeso o el níquel, ya que la dotación geológica de la región no es muy rica.
Los expertos de Julius Baer también ven "mucho potencial para el procesamiento en el norte de Europa, rico en energía, para producir metales bajos en carbono o libres de carbono, como el aluminio o el acero, aunque no necesariamente dentro de las fronteras de la Unión Europea".
"Tomando una perspectiva a más largo plazo", consideran que "el reciclaje es la forma más elegante, económica y ecológicamente favorable de reducir la dependencia de las importaciones de la Unión Europea".
En la entidad suiza también están "convencidos de que las limitaciones de la CRMA no pondrán en peligro la transición energética en la Unión Europea". Sin embargo, concluyen que "todo esto se basa mucho más en la realidad económica que en la ambición política".
El interés por este sector, imprescindible para llevar a cabo la transición energética, está provocando una revolución en sus precios, su producción y los mercados internacionales.
Negocio internacional
El trading de materias primas superó en 2022 el umbral de los 100.000 millones de dólares de márgenes brutos de beneficio por primera vez en la historia, lo que supone que, desde 2018, se han triplicado las ganancias de esta industria.
Ese año, el trading de materias primas sumó 36.000 millones de dólares. Así lo expone la consultora estratégica Oliver Wyman en su informe 'Commodity Trading's $100 Billion Year'.
En un contexto marcado por la volatilidad en las cadenas de suministro y los rápidos altibajos en los precios provocados por los efectos de la invasión rusa de Ucrania en 2022, el análisis señala al petróleo y al gas natural como los principales responsables del auge del comercio de materias primas.
"Las sanciones impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea a la energía rusa provocaron que los flujos de estos hidrocarburos dejaran de dirigirse hacia el oeste, generando la necesidad de atraer el petróleo y el gas natural licuado (GNL) estadounidenses hacia Europa, así como de impulsar la búsqueda de nuevas fuentes para cubrir la demanda energética europea", señalan los expertos en energía de Oliver Wyman en España y Portugal.
Cuatro claves
"Esto acabó provocando dos grandes consecuencias: por un lado, una desproporcionada subida de precios en la electricidad y, por otro, un mayor interés por las energías renovables para conseguir paliar este déficit energético, impulsando tanto materias primas procedentes de la energía verde, como el gas natural", subrayan desde la firma.
Uno de los factores es la alta volatilidad en el mercado de las materias primas. Las dramáticas subidas y bajadas de precio del mercado de materias primas en 2022 generaron mayores oportunidades para que los operadores ganaran dinero con la compraventa de la mercancía.
Los patrones de transporte de la industria energética han cambiado. La recuperación económica tras el COVID ha asegurado una alta demanda de materias primas. Este hecho, sumado a la limitada oferta, ha generado inflación de los precios, favoreciendo mayores oportunidades para estos operadores.
La demanda de garantías en forma de efectivo se triplicó en 2022. Esto provocó que muchos operadores se retiraran del mercado por falta de liquidez, mientras que otros aprovecharon la situación para impulsar rendimientos más eficientes del capital.