La sociedad, capitaneada en España desde finales del pasado siglo por Javier de Jaime, no ha dicho esta boca es mía desde el estallido del debate sobre el racismo en el fútbol español, a raíz de los ataques recibidos por el jugador del Real Madrid, Vinicius Júnior, en Mestalla, el campo del Valencia.

CVC acordó a finales de 2021 con LaLiga, a través de uno de sus fondos, una inversión de 1.994 millones de euros para adquirir el 10% del capital, y percibir durante los próximos cincuenta años el mismo porcentaje de los derechos televisivos de la competición española de fútbol.

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Para financiar parte de esa operación, CVC lanzó una emisión de bonos en mayo de 2022 por importe de 850 millones de euros, a través de la sociedad Loarre Investments, y la colocación se realizó a través de dos tramos.

Cuanto más alta sea la incertidumbre sobre la inversión en LaLiga de CVC, el mercado exigirá mayor rentabilidad a las emisiones de los bonos lanzados por la sociedad de capital riesgo. Por esa razón, si el caso Vinicius planteara dudas sobre el negocio de LaLiga, la rentabilidad requerida a la deuda de CVC crecería: malas noticias para el fondo.

Sin embargo, la rentabilidad exigida a las emisiones de CVC no se ha resentido durante la semana posterior al estallido del caso Vinicius.

La rentabilidad requerida a los bonos de CVC se ha incrementado desde su lanzamiento, pero esta solo se ha elevado de forma llamativa el pasado mes de marzo, con la quiebra del banco estadounidense Silicon Valley Bank y la crisis de Credit Suisse, llegando a marcar un interés superior al 8,5%.

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En la actualidad, esa rentabilidad exigida se sitúa por debajo del 7,7%, inferior al porcentaje marcado en semanas anteriores del mes de mayo, sin que aparentemente el caso Vinicius haya tenido alguna incidencia.

Pero todo eso podría cambiar si el debate sobre el racismo en el fútbol español acaba repercutiendo en el negocio de LaLiga.

El presidente de LaLiga, Javier Tebas. Europa Press.

Más allá de la pérdida reputacional, la compañía presidida por Javier Tebas se arriesgaría a que los grandes jugadores optaran por fichar por equipos de otras competiciones ante un ambiente que consideraran hostil en España, lo que afectaría a los contratos televisivos y a la competencia con otras ligas europeas.

De momento las agencias de calificación de deuda, Moody's y Fitch, en sus informes sobre las emisiones de CVC para financiar su acuerdo con LaLiga, no han recogido nada parecido a la crisis reputacional actual de la competición española. 

Las agencias consideran como el mayor factor de incertidumbre al acuerdo de CVC y LaLiga la oposición mostrada al mismo tiempo por el Real Madrid y el FC Barcelona, y los procesos judiciales abiertos en torno a la cuestión y los planes para la creación de la Superliga Europea.

Pero el tema del racismo en el fútbol español, o sobre el comportamiento de los aficionados en los estadios, podría colarse en sus próximos informes y afectar a la calificación de la deuda de CVC.