Una misión arqueológica italoegipcia ha descubierto 33 nuevas tumbas familiares datadas entre los siglos VI a.C. y III d.C. al oeste de Asuán, muy próximas al conocido mausoleo de Aga Khan, el sultán Mohamed Shah que murió en 1957. En la necrópolis se conocen cerca de 400 sepulturas, divididas en hasta 10 niveles diferentes. Algunos de los enterramientos de esta necrópolis, que fue usada desde la Baja Época hasta el periodo ptolemaico y romano del Antiguo Egipto, estaban precedidos por una entrada abovedada a la que se accedía a través de un patio abierto rodeado por muros de adobe mientras que otros estaban directamente excavadas en la roca.
Entre los últimos hallazgos del yacimiento, además de varios ajuares funerarios, se encuentran los restos de varias momias, lo que ha permitido a los investigadores conocer algunas de las enfermedades más comunes en estos periodos históricos, tal y como explica en un comunicado Mohamed Ismail Khalis, secretario general del Consejo Supremo de Antigüedades. En el marco de las investigaciones, se realizaron varios análisis antropológicos a los restos humanos localizados. Los resultados desvelaron que entre el 30% y el 40% de las personas allí enterradas eran jóvenes, aunque también hay recién nacidos y adultos.
En uno de los ataúdes reposaba la momia de un individuo adulto del que se desconoce el sexo, junto a la de un niño pequeño que no llegaba a los tres años de edad cuando falleció. Según señala Abdel Moneim Saeed, supervisor general de Antigüedades de Asuán y Nubia y director de las excavaciones del equipo egipcio, los cuerpos aún se encuentran en su sarcófago de piedra y esperan más análisis para conocer su relación de parentesco.
Daños óseos
En el resto del cementerio se localizaron fragmentos de cerámicas pintadas, tumbas de madera y piedra, mesas de ofrendas y numerosos cartones pintados. "Los datos sugieren que los ciudadanos de clase media de la isla Elefantina [frente a Asuán] fueron enterrados en esta zona de la necrópolis, mientras que las partes superiores del mismo cementerio parecen estar reservadas a las clases altas", detalla Moneim Saeed.
"Se realizaron muchos estudios y análisis de rayos X utilizando la última tecnología en las momias descubiertas para así conocer una imagen completa de las mismas en cuanto a la forma del rostro, conocer el sexo, la edad al morir y si la muerte fue el resultado de una enfermedad orgánica o no", continúa el comunicado.
Por su lado, Patrizia Pianceti, profesora de arqueología egipcia en la Universidad de Milán y directora de la misión del lado italiano, señala que a partir de estos análisis se pudo conocer que muchos de los fallecidos padecieron enfermedades contagiosas. Una de las mujeres presentaba signos de una amputación de fémur a la que sobrevivió. Otras momias presentaban síntomas de anemia, desnutrición, enfermedades del tórax, tuberculosis y evidencias de osteoporosis y artrosis.
La gran mayoría de los problemas óseos se documentó en individuos que murieron a una edad avanzada. Por el momento, la investigación en esta necrópolis junto al mausoleo de Aga Khan está lejos de finalizar y en el comunicado señalan que aún esperan descubrir nuevas tumbas en un futuro.