El PP quiere que Teresa Ribera explique su rechazo a la Ley de Doñana en el Parlamento andaluz

El Partido Popular quiere que la vicepresidenta tercera del Gobierno y responsable de Transición Ecológica, Teresa Ribera, explique en el Parlamento andaluz su rechazo al plan de Juanma Moreno para reordenar el territorio y regular unas 700 hectáreas agrícolas en la Corona Norte de Huelva, a unos treinta kilómetros de Doñana.

Lejos de dar marcha atrás por las presiones recibidas en las últimas semanas, los populares siguen adelante con la tramitación de esta polémica norma. Este martes, 2 de mayo, darán un paso más al presentar en la Comisión de Fomento un listado de comparecientes, para que expongan sus argumentos a favor o en contra. 

Según ha podido saber EL ESPAÑOL, los de Juanma Moreno quieren que la ministra Ribera sea una de las personas que acuda a mostrar sus argumentos en sede parlamentaria. En su momento, cuando esta misma ley se tramitó en el Parlamento el pasado año, ya pidieron esa comparecencia sin éxito. 

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Ribera declinó atender a la llamada de la cámara regional basándose en los dictámenes del Consejo de Estado, que establecen que los ministros no están obligados a comparecer ante asambleas autonómicas. Hizo lo propio el presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, Joaquín Páez, entidad dependiente del Gobierno.

Sí participaron los agentes sociales, como fue el caso de los sindicatos UGT y Comisiones Obreras, patronales del sector agrícola, como Freshuelva, y también los alcaldes de las zonas afectadas por el plan.

"Sitio y hora" para la reunión

Esta vez, el PP plantea seguir el mismo camino. Está estudiando los pros y contras en un momento en el que la vicepresidenta ha cerrado la puerta a una reunión con la Junta de Andalucía para abordar este asunto. Ribera ha subrayado que no aceptará sentarse a negociar hasta que Moreno retire la propuesta legislativa. 

Hace unos días, tras el último Consejo de Gobierno, el consejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul y portavoz del Gobierno andaluz, Ramón Fernández-Pacheco, emplazó nuevamente a la vicepresidenta a poner "sitio y hora" para mantener una reunión en la que abordar el problema.

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Sin embargo, la situación se ha enrocado y la oposición en Andalucía -PSOE y Por Andalucía- ha dado un portazo a la vía de la negociación parlamentaria. No participarán en la tramitación tras decidir por separado no presentar enmiendas después de que el comisario de Medio Ambiente, Virginijus Sinkevicius, advirtiera por escrito a la Junta de que la iniciativa "deterioraría" aún más el mayor humedal de Europa.

Sí solicitarán, en cambio, una batería de comparecencias de agentes sociales, agricultores y expertos para que puedan ser escuchados.  

El comisario de Medio Ambiente, Virginijus Sinkevicius, conversa de pie con el consejero andaluz de Sostenibilidad, Ramón Fernández-Pacheco Junta de Andalucía

Mientras tanto, nadie en el Partido Popular plantea ceder ante las posiciones del Gobierno y de Europa. Al contrario, aunque lamentan el rechazo de la Comisión Europea, consideran que es necesario atender las necesidades de los agricultores que perdieron sus derechos a cultivar la tierra en el entorno de Doñana por un fallido plan de la Junta de Andalucía en 2014.

Pulso político

En realidad, este asunto ya se plantea como un pulso político entre la Administración autonómica y el Gobierno central. Tanto la Junta como el PP defienden la legalidad del plan, porque no autoriza la extracción de agua del acuífero de Doñana. Mientras que el Gobierno acusa al propio presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, de ser "negacionista" con el cambio climático. 

Fuentes populares remarcan una y otra vez que la propuesta que han registrado plantea que sólo habrá derecho a riego si se acomete una serie de obras hídricas que dependen del Ejecutivo. 

Y en el caso concreto de la provincia de Huelva, recuerdan que hay una cuenca excedentaria, la del Tinto Odiel y Piedras, que tiene agua suficiente para cubrir todas las necesidades de riego de los agricultores de la comarca, siempre y cuando el Gobierno acometa las obras pendientes y recogidas en una ley de 2018.

Los dirigentes del PP lamentan que el Gobierno haya decidido ir contra la Junta de Andalucía en Bruselas, intoxicando a la Comisión Europea con "falsedades" sobre el plan. Esto ha provocado también que el propio PP europeo tome cartas en el asunto, con una severa crítica de su portavoz, Manfred Weber, al comisario de Medio Ambiente, al que acusó de no ser "imparcial". 

El PP seguirá adelante con su plan con el pretexto de que nadie en el PSOE, ni en el Gobierno ni en Europa ha ofrecido una alternativa al problema que padecen los agricultores. Lo deseable para Juanma Moreno sería alcanzar un acuerdo con el Ejecutivo, y explicar a la Comisión, punto por punto, lo que recoge el plan, para convencer de que no atenta contra Doñana. 

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En cualquier caso, los populares esperan que la tramitación de la proposición de ley culmine y quede aprobada el próximo mes de julio, pero el objetivo, insisten fuentes del PP, es incorporar enmiendas de otros grupos. 

En el Gobierno andaluz son conscientes de que lo único que puede hacerla caer, pero una vez que se apruebe, será una paralización por parte del Constitucional si el Ejecutivo cumple su amenaza de elevar un recurso y el tribunal accede. No obstante, desde el PP aseguran estar tranquilos porque la ley lo que persigue es una reorganización de los suelos, no del regadío, y eso es una competencia exclusiva autonómica.