La arquitectura es un elemento fundamental alrededor del cual se desarrolla toda nuestra vida y, como tal, debe evolucionar adaptarse a las demandas de la sociedad. En este sentido, la sostenibilidad es el término clave al que hay que prestar mayor atención, y sobre el que ha girado la tercera mesa redonda de la segunda jornada de Cultura sostenible, organizada por el Teatro Real.
Moderada por Manuel Blanco, director de la Escuela de Arquitectura, cuatro expertos han debatido sobre el futuro de la arquitectura y han puesto el foco en las energías renovables y la necesidad de crear una cultura sostenible que traiga consigo una nueva legislación.
"La arquitectura es nuestra tercera piel. Nos tiene que proteger de la contaminación, del ruido, del CO2...", ha comenzado Iñaki Alonso, arquitecto, y CEO y socio fundador sAtt Arquitectura, en referencia a la mesa anterior sobre moda y sostenibilidad, en la que se destacaba que la ropa "es nuestra segunda piel".
Con la pandemia la importancia de los espacios en los que estamos se ha vuelto más visible que nunca. Estos espacios se han transformado, se han convertido en lugares de trabajo, de estudio, de esparcimiento... Tal y como ha resaltado el arquitecto Ignacio Vicens, se ha hecho patente uno de los principios fundamentales de la arquitectura: que "no está hecha para durar 15 o 20 años, sino para ser transformada".
Las energías renovables
Así, uno de los principales retos está en transformar los espacios ya construidos para la instalación de energías renovables. "Hay muchas energías que están por venir y de alguna manera hay que aclimatar los espacios arquitectónicos a ellas. Por ejemplo, en España hay déficit en la red de cargadores de coches eléctricos, lo que provoca que muchas personas no quieran comprarse uno", ha sostenido Daniel Boluda, director general Huawei Digital Power en España.
Teresa Serrano, directora de Comunicación de Grupo Index, ha apostado en este sentido por la utilización de más energía fotovoltaica y dejar de ver las energías renovables como "alternativas". "Las viviendas tienen que ser productoras de energía, ser activas. En España tenemos unas 1.500 horas de producción fotovoltaica mientras que en Centroeuropa son unas 900. Sin embargo, en Alemania la potencia instalada está muy por encima de España".
Una idea que también ha apoyado Alonso, que ha declarado que "las ciudades son el gran reto". "Tenemos que entender los edificios como un organismo de vida que produzcan energía, que puedan gestionar el agua".
"Lo caro es no actuar y la sostenibilidad no puede ser apta para unos pocos"
Renovar la normativa
Estos cambios deben ir acompañados de unos cambios legislativos que faciliten la transición hacia la sostenibilidad. En este sentido, Ignacio Vicens ha subrayado "que se trata de hacer una cultura de la sostenibilidad, y la normativa vendrá después" ya que, si la normativa es la que marca el paso, nos encontraremos ante una "tiranía legislativa".
"El Código Técnico no es el futuro. Estamos gastando mucha energía para conseguir muy pocas cosas", ha insistido en relación a las modificaciones que se están haciendo de este marco normativo que establece las exigencias básicas de calidad que deben cumplir los edificios en España.
Daniel Boluda ha disentido de esta opinión, asegurando que "cada vez hay estructuras más masivas y en ese tipo de sistemas necesitas un control más específico de las energías. Eso, sin un marco legislativo es imposible. Por ejemplo, poner paneles solares aquí en el Teatro Real, sería un reto administrativo".
"Llevamos 10 años debatiendo esto. Yo lo llamo la estrategia del botijo o el termo", ha dicho Iñaki Alonso. Ha continuado poniendo como ejemplo el debate que se mantiene en arquitectura relativo a la ventilación natural o cruzada, y la mecánica.
"Cualquiera diría que es mejor una ventilación natural porque es más ecológica, pero hace un tiempo llegamos a la conclusión de que la ventilación forzada tiene una serie de ventajas incuestionables. La cruzada funciona cuando tenemos inercia térmica, pero en un contexto de cambio climático es difícil refrigerar los edificios. Hay que calcular los edificios con las temperaturas que vamos a tener en los próximos años. Además, tenemos ciudades con una calidad del aire pésima. Con un sistema de ventilación mecánica lo filtramos y limpiamos".
"Si la sostenibilidad es solo para unas élites, fracasará"
Vicens, ha respondido que, en su opinión, la clave está en "aceptar esto y aquello, no esto o aquello". "El Código Técnico no tiene en cuenta que Madrid, por ejemplo, es diferente que en otros lugares. Este es el parámetro, la diversificación, no el 'café para todos'. Si la sostenibilidad es solo para unas élites, fracasará, y el Código Técnico está haciendo que la sostenibilidad sea algo imposible de manejar".
Abaratar los costes
Más allá del debate legislativo, Teresa Serrano ha recordado que un parámetro importante es que toda esta revolución tecnológica debe "ser accesible a todas las familias". "Tenemos que ir a todo aquello en lo que nos abarate. Lo caro es no actuar y la sostenibilidad no puede ser apta para unos pocos. Llevamos muchos meses que la factura de la luz da muchos dolores de cabeza y ahora mismo la energía fotovoltaica posibilita producir cero emisiones, el ahorro en las facturas y terminar con la dependencia energética. Todo eso, a día de hoy, la tecnología nos lo posibilita".
Por eso, Serrano ha apelado a "la voluntad de todos: los agentes, las constructoras y las Administraciones públicas" para conseguir crear un nuevo modelo de ciudades y edificios que mantengan "la belleza de la arquitectura", a la vez que mejoren la calidad de vida de las personas, a la vez que sean sostenibles y respetuosos con el medioambiente.