Elvira Roca Barea gana el Premio Espasa con un nuevo ensayo sobre la propaganda antiespañola
La escritora obtiene el galardón por Fracasología. España y sus élites: de los afrancesados a nuestros días, donde explica cómo la leyenda negra caló en la opinión de las clases dirigentes
13 septiembre, 2019 11:41La obra Fracasología. España y sus élites: de los afrancesados a nuestros días, de María Elvira Roca Barea, ha ganado por unanimidad el Premio Espasa 2019.
El jurado presidido por Pedro García Barreno, y compuesto por Nativel Preciado, Leopoldo Abadía, Fernando Trías de Bes, y Pilar Cortés —en representación de la editorial— ha destacado que la obra ganadora es «un magnífico ensayo, una revisión audaz que cambia la imagen tradicional de la historia de España y el concepto que los españoles tenemos de nosotros mismos».
María Elvira Roca Barea se ha mostrado muy agradecida: «Es un premio muy prestigioso que han recibido personas a las que admiro mucho como Stanley Payne, Antonio Escohotado y Ramón Tamames. Y es, por tanto, un gran honor recibirlo. Un honor que compromete».
Sostiene María Elvira Roca Barea en este libro que la propaganda es una forma de gestionar la mentira que el español nunca ha podido aprender. No supo defenderse de ella en los siglos XVI y XVII, y no sabe hacerlo en el siglo XXI.
El relato según el cual España es una anomalía entre las naciones civilizadas nunca ha perdido su vigencia en nuestro país desde que lo adquirió con el afrancesamiento. A este fenómeno cultural, que solo tuvo lugar en España, le sucedió la Generación del 98 y el regeneracionismo, que consolidaron una visión negativa sobre España que marcó a varias generaciones, y que todavía tiene vigor.
Los españoles durante los siglos XVI y XVII fueron capaces de hacer la vista gorda o incluso desdeñar los prejuicios hispanófobos de otros europeos, lo que algunos autores llamaron el «menosprecio alegre». Ahora bien, este desdén hacia la opinión ajena se acaba en el siglo XVIII. Este libro trata del momento a partir del cual una parte significativa de las élites españolas asumió el discurso de la leyenda negra porque era el discurso ganador desde el siglo XVIII en toda Europa.
De esta manera, la escritora continúa por la senda temática que ya transitó en su libro de 2017 Imperiofobia y leyenda negra, que fue un éxito editorial y que recabó elogios y también críticas negativas por parte de otros intelectuales, como el catedrático de Filosofía de la Universidad Complutense José Luis Villacañas, que incluso escribió el libro Imperiofilia y el populismo nacional-católico, publicado este año, con el objeto de refutar las tesis de Roca Barea.
Nacida en el pueblo malagueño de El Borge, María Elvira Roca Barea es licenciada en Filología Clásica y Filología Hispánica; y doctora en Literatura Medieval. Ha colaborado con el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y enseñado en universidades americanas. Ha publicado varios artículos en revistas especializadas y diarios como El Mundo, El País o ABC; ha impartido conferencias dentro y fuera de España; y actualmente es profesora en el Instituto Huerta Alta en Alhaurín de la Torre. Además del ensayo Imperiofobia y leyenda negra, ha publicado recientemente 6 relatos ejemplares 6, en el que analiza los mitos históricos de la órbita protestante. En 2018 fue galardonada con la Medalla de Andalucía y la Medalla de Honor de San Telmo; y en 2019 con el Premio Héroes Olvidados, otorgado por la Fundación Blas de Lezo por su labor de investigación, divulgación y defensa de la historia de España.
El Premio Espasa tiene una dotación económica de 30.000 euros. Los originales recibidos en esta edición han sido 50, procedentes de España y América Latina. Los asuntos tratados se ocupan preferentemente de la actualidad social y económica, la historia, la filosofía o la globalización. Entre las personalidades que año a año consolidan el Premio Espasa figuran Luis Rojas Marcos, Albert Boadella, Antonio Escohotado, Daniel Innerarity, Jon Juaristi, Manuel Cruz o Stanley Payne. El ganador de la última edición fue Sergio del Molino con el ensayo titulado Lugares fuera de sitio.