Intérpretes: Tom Courtenay, Michael Redgrave, Alen McCowen, Avis Bunnage. Guión: Allan Sillitoe (basada en su propia novela). Fotografía: Walter Lassally (b/n). Sello: Filmax. Precio: 12 euros, aprox. Duración: 104 minutos.
Hijo de su época, este largometraje es el buque insignia del llamado "Free Cinema", movimiento cinematográfico que, al compás de los nuevos cines europeos de los años sesenta, surgió en Gran Bretaña como respuesta a las encorsetadas producciones de la industria británica. Colin Smith es un joven de clase obrera que es enviado a un reformatorio por cometer un robo en una panadería. Debido a sus cualidades de atleta, allí es alentado por el director a entrenarse duramente para una carrera de fondo, pues ha depositado en él las esperanzas de ganar el torneo de colegios. Con un montaje basado en flash-backs (apenas sugeridos por la ausencia de sonido), el film narra de forma simultánea la estancia de Colin en el reformatorio y las causas que lo llevaron hasta él, mostrando de esta forma el opresivo entorno familiar y la ausencia de horizontes para el joven Colin y su novia. La soledad del corredor de fondo fue una de las contadas producciones que abrió las puertas al modernismo del cine británico, instaurando atrevidos códigos lingöísticos que en parte se remontan al realismo documental británico de los años 30 y 40 -y cuyo consecuente son directores como Mike Leigh, Ken Loach o Stephen Frears-, pero que sobre todo buscaba dar testimonio de su realidad más cercana con un lenguaje libre y directo, sacando la cámara a la calle y reformulando la estética de la imagen. Con un blanco y negro que logra atrapar el alma airada de la historia, el film se ha convertido en un clásico de la rebeldía (de obvios paralelismos con Los cuatrociuentos golpes de Truffaut), una conmovedora búsqueda de la identidad generacional y un emblema fílmico del sentimiento anti-establishment que se originó a finales de los años cincuenta y principios de los años sesenta.
La edición de Filmax de esta clásico del cine británico no incluye ningún material extra. Escena clave: El momento en el que Colin decide detenerse antes de llegar a la meta y ceder el paso a su contrincante.