Las perlas de la feria
El programa Solo Projects ofrece un ecléctica selección
19 febrero, 2010 01:00Santiago Sierra: NO Global Tour, 2009 (Galería Helga de Alvear)
Sin fronteras geográficas ni artísticas, el programa Solo Projects ofrece una ecléctica selección de 34 proyectos con algunas de las propuestas más experimentales de la feria. Discursos conceptuales que varios comisarios han elegido para tirar por la borda tópicos en el pabellón 10.
Es así teóricamente, ya que en su organización estas seductoras plataformas de solo shows están sometidas a las condiciones de financiación y de prestigio propios del sistema de mercado que las promociona. Uno de los recortes del sistema afecta particularmente a la "selección libre" de artistas invitados para estos espacios, quienes deben pertenecer al círculo de intereses de determinadas galerías integrantes del mismo encuentro ferial. Pese a ello, los stands de Solo Projects muestran una escena viva y atrayente por su diversidad, por su anulación de clasificaciones y etiquetas perentorias, y por la frescura de su movilidad o propensión al cambio. Más allá de esa errancia y multiplicidad de planteamientos artísticos, los comisarios de este año subrayan el interés que han puesto en que los diferentes proyectos reunidos aquí dialoguen, confluyan entre sí y conecten con el público. Señalan que la clave que posibilita esta sinergia entre discursos tan diversos está en el alto nivel conceptual que los artistas comparten por encima de las diferencias individuales. Así resulta ser realmente, y de manera particular en las selecciones efectuadas por cuatro de estos diez comisarios, que han operado sobre criterios claramente afines al arte conceptual.
Por su parte, Juan de Nieves (director artístico del EACC de Castellón y, antes, conservador del CGAC de Santiago de Compostela), ha seleccionado a los artistas Ángel Vergara (Stella Lohaus Gallery) y Michael D. Linares (ATM Contemporary / Altamira), por la eficacia provocativa e irónica de sus obras para avivar espacios de socialización y de debate, reactivando la agitación política y cultural de otros tiempos; así como a Seamus Farrell (Meessen de Clarcq) y a Alberto Peral (MasArt) por sus trabajos de arte objetual, con los que obtiene efectos seductores y poéticos de los elementos que recicla, generando "paisajes" que apelan a nuestra capacidad de interpretación psicoanalítica.
A vueltas con la memoria
A su vez, el comisario Sergio Edelsztein (fundador y exdirector del Centro de Arte Contemporáneo de Tel Aviv) propone tres proyectos referidos a la memoria como fuente de inspiración, confrontando épocas, realidades y morales distintas. De ese modo, en el proyecto de Miky Kratsman (Chelouche Gallery) se comparan sus fotografías actuales de la población extremeña de Deleitosa con las que allí mismo realizó W. Eugene Smith en 1950, diferenciándose la imagen "medieval" de la España franquista y la sensación despersonalizada que producen las fotos del pueblo actual. Asimismo, la dualidad es el tema de la película Le passeur, de Filipa César (Cristina Guerra Contemporary Art), un documental sobre el ayer y el hoy social de los contrabandistas que en la década de los setenta ayudaban a los portugueses a cruzar la frontera con España. También se enfrentan dos realidades en el impactante proyecto NO Global Tour de Santiago Sierra (Helga de Alvear / Prometeo Gallery), integrado por un enorme camión que transporta una escultura monumental configurada por el breve letrismo de NO que, al negar lo obvio, nos decanta "hacia algo distinto". Allí estará instalada la escultura.
Dulce hogar
El comisario independiente madrileño Iván López Munuera centra su selección en el concepto extensible de casa, concebida como un "instrumento" fundamental para vivir en nuestro tiempo: un espacio doméstico donde se dirimen ideologías, posicionamientos políticos y vinculaciones afectivas. Así lo corroboran los proyectos de Matthew McCaslin (Fred Gallery), con sus series poéticas de relojes-despertador con horarios internacionales o de televisores donde se ve amanecer; los de Effi Paleologou (The Apartment) con sus fotos oscuras en las que el "hogar" es un sitio o refugio cualquiera construido de luz; los de Jennifer Steinkamp (Soledad Lorenzo), donde lo doméstico se prolonga en jardines digitales llenos de sensaciones; y los de Mónica Fuster (Pepe Cobo) con visiones oníricas y sensaciones del pasado.
De perfil conceptualista más afilado y oscuro es la propuesta de Susanne Neubauer (comisaria independiente alemana), que ha realizado su trabajo para ARCO subrayando la idea de que "comisariar" consiste en establecer un paralelo entre dos actitudes creativas: la de seleccionar de modo responsable y libre, y la de delegar responsabilidad y poder al artista para que él los reinterprete en su obra. Para ello ha seleccionado a Devendra Banhart (Mario Mazzoli), a Giacomo Santiago Rogado (Mark Müller Gallery) y a Tilo Schulz (Steinle Contemporary).
Abajo fronteras
Aunque las claves conceptualistas cruzan por los seis programas curatoriales restantes, prima en ellos la atención a registros geográfico-culturales de orientaciones diferenciadas y de latitudes distantes. Ocurre así en el proyecto de Mª Inés Rodríguez (comisaria independiente colombiana y actualmente Conservadora Jefe del MUSAC de León) que ha seleccionado a cuatro mujeres -Judi Werthein (Ruth Benzacar), Carolina Caycedo, Tania Bruguera y Carla Zaccagnini (Vermelho)-, de la nueva generación de artistas latinoamericanos que producen redes de trabajo y trascienden tópicos y fronteras, creando intercambios directos y confrontaciones de ideas con sus vecinos geográficos. Algo semejante ocurre en la propuesta de André Magnin (comisario independiente en París, implicado en actividades de la Contemporary African Art Collection, con la que se montó en 2006 la exposición 100% África en el Guggenheim de Bilbao), que trae a ARCO diferentes trabajos del arte negro actual, siempre próximos a su entorno vital (en las galerías surafricanas Afronova y Michael Stevenson, en la italiana JZ Art y en la bruselense Aliceday). Mucho más específicas son las perspectivas "historicistas" de la comisaria Olesya Turkina (del Departamento de Arte Contemporáneo del Museo Estatal de San Petersburgo) quien, en su propuesta Explosive Utopia, revisa las largas y contradictorias relaciones del arte ruso moderno con la utopía social (expuestas en Barbarian Art Gallery, Frants Gallery Space y Orel Art), y de Jacopo Crivelli Visconti (comisario italiano, residente en Brasil, vinculado con la Fundación Bienal de São Paulo), quien reúne a figuras centrales de la implantación del arte concreto en Brasil en la década de 1950 (Graça Brandão, Luciano Brito y Marilia Razuk).
Con encuadres marcadamente personales plantean sus programas Shamin Momin (directora adjunta del Whitney Museum de Nueva York) y Adriano Pedrosa (vinculado con la Bienal de São Paulo). Momin propone una mirada sobre el arte estadounidense a través de dos artistas activos respectivamente en Nueva York y Los Ángeles, los dos ejes artísticos del país: Tyler Drosdeck (Newman Popiashvili), con pinturas monocromas, fotografías de frutas doradas y "esculturas-joya", investigando sobre la percepción y valoración de la obra de arte, el objeto de uso y las mercancías. A su vez la instalación de Justin Beal (ACME) reflexiona sobre la combinatoria actual de criterios minimal, arquitectónicos y de diseño, y los "corrompe" con temas eróticos. Por su parte, el comisario brasileño Adriano Pedrosa organiza cuatro solo shows para mostrar "lo último" de artistas de España y países vecinos: el francés Aurélien Froment (Motive), joven artista multidisciplinar que vive en Dublín y que desarrolla trabajos relevantes primando los valores documentales implícitos en la obra de arte; los portugueses emergentes Andre Romao y Mauro Cerqueira (Reflexus y Graça Brandão) y el vasco Juan Pérez Agirregoikoa (Carreras Múgica) que presentan un proyecto en el que la parodia descontextualiza "el mensaje" de una puesta en escena.