Qué fue de Karola Alonso, la concursante de 'GH 2' que no quiso la fama y relató la dura travesía de su hijo trans, Álex
Aunque tenía pareja fuera de la casa mantuvo una relación con otro de los concursantes, Kaiet. En la actualidad, reside en Sevilla, es DJ y empresaria.
25 febrero, 2024 00:53Corría el año 2001 cuando arrancó la segunda edición del revolucionario Gran Hermano. Nombres propios como el de Marta López (50 años) o Fayna Bethencourt (45) irrrumpieron con fuerza en el panorama televisivo. Lo hicieron con sello propio.
A la vista está que su carrera catódica solo hizo más que comenzar en la casa de Guadix de la Sierra; fuera, les esperaban grandes programas y exposición pública. No obstante, no fueron los únicos que hicieron ruido intramuros y se labraron un recuerdo perenne. Hubo una pareja que dio mucho de qué hablar: la formada por Karola Alonso y Kaiet.
Pese a que ella ingresó en la casa en relaciones con su pareja, la llama del amor volvió a surgir en el reality. Karola no sólo fue conocida por esta cuestión, sino porque su expulsión también hizo su particular historia: fue una de las más votadas, convirtiéndose en la candidata para abandonar la casa con el 88 por ciento de los votos.
La navarra no quiso continuar en la vorágine de la fama, y se mantuvo alejada de los focos a la salida de la casa. En la actualidad, gracias a una entrevista que realizó en EL ESPAÑOL se descubrió que es madre de un hijo transexual, de nombre Álex.
Además, es presidenta de Chrysallys, una ONG fundada en 2013 que pone en contacto a familias que tienen hijos menores transgénero. Su paso por la casa donde todo se ve y se oye le hizo adquirir una gran popularidad, pero se apartó de los medios y poco más se volvió a saber de ella. Hasta el año 2018.
Ese año, este periódico publicó un reportaje sobre una delicada -y urgente- temática: los menores de edad que son transexuales, poniendo nombre y rostros a algunos protagonistas, y entre ellas apareció Karola junto a su hijo, Álex.
Cuando sumaba 10 años, el joven, conocedor de su identidad de género, le dijo a su madre: "Yo no soy una niña, yo soy un niño". "Sabía que algo pasaba, que estaba encajando el proceso", explicó Karola, quien relató el proceso en el que su hijo se reconoció como tal. De acuerdo a su relato, el joven Álex pasó por etapas en las que se identificaba como bisexual, chica lesbiana o persona de género fluido, hasta que pudo poner nombre a lo que le ocurría.
Para Karola, asumir la identidad de género de su hijo le costó. "Le pedí tiempo, y fue un error", reflexionó en el mencionado artículo de EL ESPAÑOL. "Lo interpreté como algo rígido, sólido, estático y me impactó", apostilló. Pese a todo, cuando su hijo le pidió que no le cuestionase como el chico que es, y que no necesitaba ningún tipo de tiempo, ella fue rápida y le respondió: "¿Álex? Pues Álex, al colegio".
En aquel 2018, el joven Álex aún no había tomado la decisión de hormonarse. "No sé qué pasará dentro de tres años, cuando me crezca el pecho y quiera dar el paso, quizás sea muy tarde y solo me quede el recurso de la operación. Ahora estoy cómodo con mi cuerpo", resolvió entonces Álex, en su pequeña intervención en el citado reportaje.
El hijo de Karola se descubría como un amante del deporte y reconocía jugar en un equipo de fútbol de su barrio. En otro orden de cosas, Karola es mucho más que una madre comprometida con su vástago. La de Navarra lleva años trabajando en productoras de televisión, como redactora, ayudante de producción y productora produciendo ficción para televisión y formatos televisivos, documentales, TV movies y películas.
Aunque ahora está centrada en su carrera profesional, durante nueve años trabajó como técnica de proyectos en Médicos del Mundo, donde buscaba financiación pública y privada y organizaba eventos, implementando los proyectos de manera integral.
Amén de esto, Karola es la presidenta de Chrysallys, una ONG que contacta a familias que tienen hijos menores transgénero. Tiene un DJ set junto a su amiga Vicky. Bajo el nombre Ultravioletas Dj, hacen actuaciones en eventos y bodas y, de acuerdo a la información que arrojan sus redes sociales, el éxito está asegurado para ellas.
"Música. Son mujeres. Son mujeres en la música. Elegantes y mamarrachas. Indies pero macarras. ¿Preparadas para bailar? ¡Come on!", se puede leer en la descripción que se aporta en el Instagram de su firma artística. Actualmente, reside en Sevilla junto a su hijo y su pareja. En el confinamiento, Karola y su hijo compusieron El Blues del Coronavirus, una amena canción que compartió ella en sus redes sociales para amenizar la cuarentena de familiares, amigos y conocidos.
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Karola Alonso organizó una gran fiesta, también en tiempos pandémicos, a través de un directo en Facebook: ella presumió de su faceta como DJ y entretuvo a los espectadores de su directo casero pinchando las mejores canciones para levantar el ánimo.
Por si su nivel polifacético fuera poco, expuesto todo lo anterior, Karola forma parte de una empresa de catering. Bajo el nombre La Cocina Intrusa, la sevillana organiza eventos gastronómios personalizados para que el cliente se vea inmerso en toda una experiencia con chef privado, servicio de coctelería e incluso música en directo.