Jacques y Gabriella de Mónaco solo tienen ocho años, pero ya cuentan con un armario de lujo como el de su madre, su tía Carolina (65) o su prima Carlota Casiraghi (36). Los pequeños son unos auténticos Grimaldi y sus outfits suelen destacar por encima de los de otros niños royal. Tal y como demostraron este pasado miércoles 14 de noviembre en un acto de Navidad, son glamurosos, estilosos y llevan en sus genes el gusto por el buen vestir.

Mientras la princesa Charlotte de Inglaterra (7) aparecía en el Christmas de los Príncipes de Gales con un mono de Sfera, Gabriella inauguraba las Fiestas junto a sus padres y hermanos con un abrigo de piel firmado por Emporio Armani y valorado en casi 400 euros. Su hermano Jacques no se quedaba atrás y apostaba por una elegantísima chaqueta de 2.300 euros de la firma italiana Brunello Cucinelli.

Un mes antes, en el Día Nacional de Mónaco, los pequeños también sobresalían con sus looks. Él enternecía por vestir el mismo uniforme que su padre y ella marcaba la diferencia con vestido tipo abrigo hecho a medida por la diseñadora local Terrence Bray. 

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Hace un año, en la misma celebración, Gabriella de Mónaco llamaba la atención con un exclusivo abrigo de felpa de alpaca y lana en color rosa, firmado por Brunello Cucinelli y valorado en 1.300 euros. Lo completaba una boina con adornos florales, cuyo precio era de 119 euros. 

Su mayor revolución estilística, sin embargo, se producía meses antes. En enero de 2021, en la quema simbólica de una barca en Puerto Hércules, una tradición en la que Jacques y Gabriella siempre han tenido un papel destacado, la hija de Charlène y Alberto lucía un total look de Dior, formado por una falda en color rosa bebé y estampado pata de gallo, un abrigo, sneakers y un costosísimo bolso que se convirtió en la pieza protagonista del atuendo. El modelo en cuestión era el Nano, una de las prendas más prestigiosas de la maison, valorada en 3.000 euros. 

El verano también ha sido un buen momento para que los hijos de Charlène (44) y el príncipe Alberto (64) dejen al descubierto su lujoso escaparate. Aunque el invierno se presta para vestir looks más sofisticados, en el caso de Jacques y Gabriella la estación del año parece no importar. 

Tanto este 2022, como otros tantos veranos, Gabriella ha presumido de ser un icono de la moda a su corta edad. El pasado junio, recorría las calles del Principado junto a su padre con un vestido estampado de una marca japonesa y unas originales gafas de sol, su complemento favorito en la temporada estival. Las tiene de todos los estilos y colores. Desde las clásicas Ray-Ban hasta el modelo setentero que llevó con un vestido estampado Dolce & Gabbana en el Gran Premio de Fórmula 1, una de las citas habituales de los Grimaldi.

Jacques ha seguido esta misma línea y cuenta con una amplia colección de gafas de sol que suele mostrar en los actos estivales. En su caso, Ray-Ban ha sido su predilección desde que era un niño de cuatro años. 

Aunque siguen la estela de los Grimaldi, Gabriella también ha heredado la actitud irreverente de su madre, la princesa Charlène de Mónaco. Mientras la exnadadora permanecía en Sudáfrica, la pequeña se atrevía con un corte de pelo algo rebelde que recordaba a los múltiples cambios de look de su progenitora. 

Charlène ha rapado parte de su melena, mostrando un lado rebelde y punk que se distancian por completo de los clásicos estilos royal. También se ha decantado por flequillos y cortes pixies que la han puesto en el foco de la prensa de moda. 

La princesa Gabriella, por su parte, también se ha mostrado con algún estilismo rockero que tampoco ha estado exento de lujos. En febrero de 2019, con solo cuatro años, acudía a la Fórmula 1 con una cazadora de cuero negra de Dior, valorada en 2.500 euros.