- Nombre: Luzianilla
- Bodega: Dehesa de los Canónigos
- Añada: 2021
- Tipo de vino: Clarete
- Variedad: Tempranillo y albillo mayor
- Región (D. O.): Ribera del Duero
- Alcohol: 14 % Vol
- Formato: 750 ml
- Crianza: 224 días en roble francés de un año
- Cata: Fresco, frutal, complejo y completo
- Precio: 30 €
- Web: www.dehesadeloscanonigos.com
En su privilegiada ubicación en la “milla de oro” de Ribera del Duero, Dehesa de los Canónigos elabora sus vinos mediante un proceso largo y cuidado que tiene como objetivo no perder la esencia de las uvas. Desde el transporte en cajas de no más de 20 kg para no dañar al fruto, hasta la fermentación con levaduras naturales del propio viñedo a temperatura controlada. Todo el mimo es poco para conseguir la máxima que guía los pasos de esta bodega familiar desde sus inicios: “Antes uvas que cubas”.
La búsqueda de la excelencia ha motivado que la familia Sanz Cid esté siempre en constante evolución. Una finca con casi dos siglos de historia que no deja de innovar con el fin de ser más respetuosos con el medio ambiente y sacar la mejor expresión de su terroir. Fruto de este compromiso nace Luzianilla, un clarete de guarda que rinde homenaje a Mª Luz Cid, fundadora de la bodega junto a José Luis Sanz Busto, gracias al convencimiento de sus hijos: Belén, directora técnica y enóloga, e Iván, director general y responsable de viticultura.
Se trata de un vino que procede de una añada, la de 2021, que será recordada por las nevadas registradas al inicio del año, la famosa Filomena que tiñó de blanco gran parte del país y también la dehesa que da nombre a la bodega. Sin embargo, la primavera lluviosa, el verano sin olas de calor y las cálidas temperaturas de principios de septiembre ayudaron a la maduración de las uvas, justo a punto para la vendimia.
El resultado es este clarete elaborado a partir de tempranillo y albillo mayor procedentes de viñas de más de 80 años, con una crianza de 224 días en roble francés de un año, con un atractivo color rosa picota, una nariz intensa de frutas frescas y flores y una boca resulta golosa y refrescante, con la pera blanca, los cítricos y la frambuesa como protagonistas y un ligero amargor final que hace difícil dejar de beber. El clarete perfecto para homenajear a todas las madres en cualquier momento del año.
Maridajes recomendados para Luzianilla
Luzianilla es un vino complejo y muy completo, con una acidez que garantiza su guarda y un interesante potencial gastronómico. El clarete ideal para disfrutar al aire libre junto a pastas, arroces, verduras y pescados, pero con el cuerpo necesario para armonizar también con platos de cuchara y el producto estrella de la cocina ribereña: el lechazo asado.