Los casos de tuberculosis registrados en el mundo baten récords: mató más que la Covid en 2022
La enfermedad acabó con 1,3 millones de vidas el pasado año a pesar de que es prevenible y existe tratamiento.
9 noviembre, 2023 02:50En los últimos dos siglos, la tuberculosis ha matado a más personas que la malaria, la viruela, la peste, el cólera, la gripe y el VIH juntos. La enfermedad es tan peligrosa que hubo un tiempo, no muy lejano, en el que España tuvo que levantar hospitales exclusivos para tratar a sus dolientes. La clausura de estos edificios, algunos abandonados, hace pensar a la población que la peste blanca es cosa del pasado, pero su amenaza nunca se fue.
Según el informe que acaba de publicar la OMS, en 2022 se diagnosticaron 7,5 millones de casos en todo el mundo, la cifra más alta registrada desde que el organismo iniciara su seguimiento.
"Con la tuberculosis tenemos un problema", avanza Raúl Rivas, catedrático de Microbiología de la Universidad de la Universidad de Salamanca. "Es una enfermedad absolutamente extendida, que la humanidad viene arrastrando desde hace miles de años". Apasionado de la Historia —en su libro Historia de los Microbios, dedica un capítulo a esta dolencia— apunta que hay signos de infección encontrados en momias y en restos óseos de animales de más de 4.000 años de antigüedad.
En aquel momento, poco o nada sabían sobre la tuberculosis. La cosa cambió cuando Robert Koch identificó por fin en 1882 a Mycobacterium tuberculosis como su agente etiológico. Mucho se ha avanzado gracias a este logro en el manejo de la enfermedad, prevenible y curable, pero las cifras demuestran otra realidad. En 2010, la OMS registró 5,8 millones de nuevos casos y recaídas. El dato de 2022 supone un incremento del 29,31% en poco más de 20 años.
Aun así, como matiza Rivas y apuntala el mismo informe, se puede tomar como una buena noticia. A medias tintas. La OMS utiliza dos varas de medir la enfermedad: los casos notificados y la incidencia que ellos calculan que hay de verdad. Muchos países afectados no tienen los medios suficientes para hacer un registro exhaustivo, por lo que siempre se ha sospechado que hay más enfermos de los comunicados. En 2022, las cifras se equiparan bastante más entre una realidad y otra: 7,5 confirmados y 10,6 estimados.
España y Europa
La mayoría de los casos se concentran en ocho países: Bangladés, China, Filipinas, India, Indonesia, Nigeria, Pakistán y República Democrática del Congo. "La dinámica en Europa es diferente, pero eso no significa que no haya casos de tuberculosis", indica el experto. En los informes que realiza la UE anualmente, figura que la tasa media de incidencia por 100.000 habitantes es de 7,4. En datos de 2021, las cotas más altas se sitúan en naciones del este, mientras que en el área occidental, España destaca con un 7,4, empatando con Bélgica y sólo superada por Portugal.
De hecho, según el último informe de Vigilancia de la tuberculosis de la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (2022), "por primera vez en 10 años se identifica un ligero repunte en la tasa nacional". En ese año, se registraron 3.927 casos, aunque 211 fueron declarados como importados y no se incluyeron en el análisis. La tasa por 100.000 habitantes es de 7,8.
"Desde luego, las metas que tenía la OMS para tener controlada la enfermedad se complican", lamenta Rivas. La estrategia del organismo Fin a la Tuberculosis, aprobada en 2014, plantea reducir la incidencia en un 80% para 2030. Las muertes un 90%. Sin embargo, como bien apunta Rivas, la cifra actual de decesos no pinta un panorama nada halagüeño. El informe de la OMS estima que acabó con la vida de 1,36 millones de personas. La Covid lo hizo con 1,23. Tras arrebatarle su histórico título de enfermedad infecciosa más mortal, recupera su posición en este funesto ránking.
Rivas, además, plantea otra situación preocupante: la tuberculosis multirresistente a los tratamientos. Tal y como refleja la OMS, en 2022 fueron 410.000 las personas afectadas por esta vertiente de la enfermedad, muy complicada de tratar.
Detección rápida y prevención
Actualmente, existe una vacuna —de eficacia limitada— y 16 nuevas candidatas en ensayos clínicos. La que desarrolla el investigador Carlos Martín desde la Universidad de Zaragoza es una gran promesa y aliviaría en parte este problema de la multirresistencia. Pero hay que tener paciencia.
Mientras tanto, se pueden aplicar medidas paliativas, como la detección rápida, algo que parece estar mejorando. La prevención es otra de las grandes bazas y Rivas refiere que existen factores modificables que ponen en riesgo de contraer más fácilmente la dolencia, como la desnutrición y el consumo de tabaco y alcohol.
Todo lo expuesto representa un gran desafío para la humanidad. Como bien apunta Tereza Kasaeva, la directora del programa mundial de tuberculosis, "necesitamos ponernos manos a la obra para hacer realidad la visión de acabar con la tuberculosis".