Cómo ha tratado la transexualidad las series españolas: de ‘Farmacia de Guardia’ a ‘Cuéntame’

Esta semana Cuéntame daba un paso adelante en la integración y la visibilidad de las personas LGBTI incluyendo en sus tramas un personaje transexual. Se trata de la peluquera Angie (Julia Piera), quien le cuenta a su jefa primero, y a su novio después, que es una mujer transexual.

“No es malo ni bueno. Es distinto. Distinto como nosotros, como yo. Soy casi una mujer. Me falta el casi. Estoy ahorrando para operarme. Nací hombre”. Así contaba Angie a su pareja su identidad de género, algo que él no acaba de comprender, y que le hace acabar por salir corriendo mientras grita que no es “maricón”.

En las redes sociales muchos aplaudieron la inclusión de este personaje, aunque otros dijeron que Cuéntame no lo ha hecho de la manera correcta, pues fomenta ideas retrógradas como que las personas trans están “en el cuerpo equivocado”, que una mujer trans nace mujer trans, no hombre, o que para ser considerada mujer tuviese que someterse a una vaginoplastia.

Por suerte, los medios de comunicación así como la ficción cada vez comunican mejor todo lo relacionado con la identidad de género, aunque cierto es que en la época que refleja la serie había muchísimo desconocimiento. 

Pese a la crítica, Cuéntame ha tratado bastante bien el tema, pues Angie en ningún momento habla de “sentirse” mujer, sino que reconoce como mujer desde el primer momento, pese a que en su DNI ponga un nombre de varón. De hecho, legalmente en el momento que recoge la serie no podía cambiar el nombre y el sexo en los documentos legales hasta que no se sometiese a una operación de reasignación sexual, tal como mencionaba el personaje en referencias a los ahorros que estaba llevando a cabo.

‘Farmacia de Guardia’, una pionera

Pocas series españolas han tenido un personaje transexual de manera fija en su elenco, y hasta la fecha ninguna ha tenido a uno como protagonista.

Como personaje episódico, una de las primeras series que dio un paso adelante reivindicando la dignidad del colectivo transexual fue Farmacia de Guardia, ya en su primera temporada. Allí conocimos a la tía transexual de Lourdes (Concha Cuetos), a quien dio vida el transformista Fernando Telletxea, conocido por el nombre artístico de Fama.

En aquel episodio titulado Moras y Cristianas esperaban en la botica al tío Mariano, que se presentó con identidad femenina. Esto chocó mucho a la familia, pues “la última vez que le vieron era un tío y ahora es una reinona”, y le continuaban llamando con su nombre de nacimiento, Mariano, pese a que se presentase como Clara Eugenia.

“¿No te da vergüenza, a tu edad, hacer esas cosas?” preguntaba Lourdes. “Ahora o nunca, sobrina”, respondía Clara, dejando claro que cada cual puede y debe vivir su vida como quiera. Como era habitual en la serie, la tolerancia y el respeto acabó gobernando y todos acabaron aceptando la identidad sexual de la tía abuela Clara, eso sí, después de haber hecho mucho humor a su costa y a su pasado.

Mal por ‘Aquí no hay quien viva’

Es un recurso habitual el utilizar personajes transexuales (generalmente mujeres, ya que de hombres transexuales casi no hay historias de ficción audiovisual) como motivo de risa. Lo desacertado es que en general no son personajes que hagan gracia de por sí por ser patosos, por tener respuestas ocurrentes o por cualquier otro motivo, sino porque son el centro de las burlas por su identidad, sobre todo, en temas como llamarles con su nombre de nacimiento.

En la etapa final de Aquí no hay quien viva uno de los personajes era una chica trans, Raquel (interpretada por Elena Lombao), hermana de Mamen (Emma Ozores) y cuñada de Higinio (Ricardo Arroyo).

A Raquel Higinio solía llamarla Raúl, y cuando la muchacha empieza un romance con Emilio (Fernando Tejero) el hecho de su transexualidad sirve para que el grupo de amigos pusiese en duda la virilidad del portero por compartir su vida con una chica trans.

Una cosa es que unos perdedores hagan burla de una mujer por ser transexual, y otra que ésta aparezca afeitándose

Podría admitirse que se busque la risa porque unos personajes ignorantes y perdedores hagan escarnio a costa de un personaje transexual, pero luego vemos a Raquel afeitándose delante de un espejo y este argumento deja de ser válido para defender el tratamiento del humor. 

Elena Lombao fue Raquel en 'Aquí no hay quien viva'

‘La que se avecina’ diferenció travestismo y transexualidad

En la octava temporada de La que se avecina Telecinco introdujo de manera recurrente un personaje trans, Alba Recio (Víctor Palmero), hija del homófobo Antonio (Jordi Sánchez) y la religiosa Berta (Natalie Seseña) y que en otras temporadas fue conocido como Álvaro.

Alba es un personaje muy cómico que con poco explicaba mucho sobre identidad de género. “No soy travesti, soy transexual”, decía en uno de sus primeros diálogos Alba para enseñar a la audiencia a emplear los términos correctos. “Era una mujer atrapada en el cuerpo de un hombre, se llama disforia de género” dijo también el personaje, en referencia al diagnostico psiquiátrico de la transexualidad.

Se llama disforia de género

Cabe destacar que hace escasamente un mes, Víctor Palmero denunció el acoso que estaba sufriendo en redes sociales por interpretar este personaje, pues recibía mensajes como “maricón de mierda, hijo de puta, ojalá te peguen, travesti”.

Lo desacertado de ‘Bienvenidos al Lolita’ y ‘Anclados’

Los guionistas cada vez tienen más consciencia de que para hacer reír al espectador no todo vale, aunque hace no tanto que hemos visto series en televisión con un humor muy zafio sobre personas transexuales, con chistes que incitan al odio y a la discriminación.

En especial, con la transexualidad hay que tener un gran cuidado porque cada año cientos de personas transexuales se suicidan en todo el mundo. En España desgraciadamente hemos conocido casos como el reciente de Ekai o el de Alan en 2015, menores transexuales que optaron por quitarse la vida debido al acoso que sufrían en su entorno.

Como ejemplos que habría que evitar se puede decir el nombre de Bienvenidos al Lolita, emitida en Antena 3 en 2014. Allí conocimos al personaje de la transexual Roxy (Sara Vega), una de las artistas del cabaret que daba nombre a la serie.

El personaje de Sara Vega fue presentado como "99% mujer"

Ya en el primer episodio una voz en off nos contaba que “Roxy es 99% mujer” en referencia a que no tenía reasignado su sexo. Algo que se enfatizó en la secuencia que mostraba a Roxy orinando de pie en un inodoro de caballero por estar los servicios ocupados. Y como era de esperar, alguien debía pillarla en ese momento de intimidad, para que hablen sobre qué tiene o qué deja de tener entre sus piernas.

Algo parecido ocurrió en Anclados, en un episodio emitido en julio de 2015 llamado El Diario de Che-Noah, en el que se presentaba a Fátima (Cayetana Cabezas), un personaje transexual que llegaba al barco para celebrar el Orgullo LGBTI. Aquel episodio estuvo cargado de chistes que irradiaban transfobia, pues se referían a ella como “amigo, “tío” o “Pepe”, su nombre de nacimiento. Además, los personajes (los más patanes del barco) volvían a dudar de su virilidad por sentirse atraídos por ella (“me gustan las tías, tías”) e incluso llegaban a calificarla como una "campana que tiene badajo”.

Carla Antonelli, una actriz trans con un personaje trans

Habitualmente los personajes de mujeres transexuales lo interpretan actrices cisgénero (es decir, no transexuales) o bien hombres caracterizados. Una de las pocas excepciones fue el papel de Gloria (Carla Antonelli) en El síndrome de Ulises, emitida en Antena 3 entre 2007 y 2008.

Gloria fue un soplo de aire entre los personajes transexuales que habitualmente poblan las series, pues no era artista ni nada parecido. Sencillamente era la dueña del bar donde los trabajadores del centro de salud sobre el que giraba la serie se solían reunir.

Los personajes de mujeres trans lo suelen interpretar hombres caracterizados o mujeres cisgénero

“La de Gloria es una historia integradora, y éste es el tipo de cosas que ayudan a normalizar la transexualidad. Es cierto que existen historias terribles, pero también es verdad que hay muchas otras de vidas normales, de dependientas, catedráticas, etc. A los transexuales nos une una circunstancia de vida, pero cada uno somos un ser diferente” decía Carla Antonelli a El País en aquel entonces.

Gloria tenía una hija adoptada, Lucía, interpretada por Elisa Draben, actriz que curiosamente interpretó a un chico adolescente transexual en un capítulo de de Hospital Central. En el episodio La sonrisa de Jonás, su personaje, Andy, recibía una paliza en el colegio, y tras ingresar en el hospital se descubre que el chico está hormonándose con testosterona que le compra su madre por internet, ya que al ser menor no encontraba amparo legal para recibir un tratamiento hormonal. “A nadie se le pide tiempo para ser uno mismo” decía Andy en uno de los diálogos.

Cabe recordar que en Hospital aparecieron numerosos personajes transexuales en capítulos como Game Over, en el que una chica trans interpretada por la actriz María Pau Pingen sufría una agresión por parte de un grupo de skinheads, y que el tratamiento hormonal le produce como efecto secundario una diabetes.

Luna, la nueva reclusa de ‘Vis a vis’

Próximamente regresará Vis a vis a televisión de la mano de Fox, y entre las nuevas reclusas conoceremos a Luna, interpretada por la actriz transexual Abril Zamora. “En ningún momento en el guion se explica que el personaje sea trans” explica para BLUPER íntérprete, quien comenzó su tránsito pasado los 30.

Así, la transexualidad del personaje aparecerá como subtexto ya que “cogieron a una actriz como yo para ese personaje, que estoy en un momento tan inicial de la transición que es muy explícito que soy trans, y que es algo que nunca voy a ocultar porque no es un problema para mí ni nada por el estilo. Nunca se menciona en guion, pero sí se añade algún comentario y tal en algunos personajes que da a entender que es trans”.

No se explica abiertamente que el personaje de Luna sea transexual

Para Abril, “lo bonito es que la trama no se centra en el hecho de que es transexual, y pienso que eso es integración. Es necesario que haya personajes transexuales en una serie y que la trama sea sobre su propia transexualidad, pero resulta más interesante que sea un personaje transexual al que le pasan otras cosas, como que tenga problemas con las drogas, como le sucede a Luna. Además es un personaje naïf, alegre, luminoso. No tengo muchísimo peso, Luna es pequeña por el momento, pero estoy muy contenta y ha sido una experiencia muy interesante para mí”, adelanta.