Tras 103 días de aventura frenética, Telecinco cierra este martes la edición de Supervivientes 2024. Una edición del reality más duro de Mediaset a la que han llegado Rubén Torres, Pedro García Aguado, Marieta y Arkano hasta el final Solo uno de ellos conseguirá alzarse como vencedor, llevándose a casa el cheque de 200.000 euros.
El reality ha sido todo un acierto en materia de audiencias para Telecinco. Tanto la gala de los jueves, como Conexión Honduras los domingos y Tierra de nadie los martes, han sido lo más visto de la cadena casi cada día, con entregas que superaban el 20% de cuota de pantalla, un dato que ya muy pocos formatos alcanzan.
Supervivientes se consolida así como una pieza fundamental en el engranaje de Telecinco, por las alegrías en espectadores y share, y también por cómo ha retroalimentado a otros formatos. Y es que en Vamos a ver, TardeAR, Fiesta o ¡De Viernes! se ha seguido con especial atención todo lo que acontecía en Honduras (y en los platós del reality, por supuesto).
Este año, Supervivientes cambiaba de manos. Telecinco asignaba la producción a Cuarzo (Así es la vida), mientras que en los últimos años la empresa audiovisual responsable del formato era Bulldog TV. Lo que entonces Cuarzo no imaginaba es que se iba a poner al frente de la edición del reality que más polémicas ha acumulado con diferencia.
Uno de los concursantes de Supervivientes 2024 ha sido Ángel Cristo, hijo de Bárbara Rey y del domador Ángel Cristo. En los últimos meses había reavivado su popularidad, tras años de discreción, cargando contra su madre en ¡De Viernes!. Y se fue a Honduras con el cargador lleno, dispuesto a disparar por aquí y por allá durante el tiempo que permaneciese al otro lado del charco. Ángel ha discutido con muchos compañeros, sacándolos de quicio en ocasiones. Algo que, dentro de lo que cabe, no es nada nuevo bajo el sol en este tipo de formatos. Sin embargo, en sus últimos días como participante se cubrió de gloria.
Primero, tras una discusión terrible en directo con Aurah Ruiz, se salió de la zona de seguridad de los concursantes y el equipo, y se tuvo que hacer un gran despliegue para localizarle. Hasta el ejército hondureño tuvo que sumarse a su búsqueda. Llegó a la otra punta de la isla, en zonas que no conocía, y que podían poner en riesgo su salud por las particularidades del terreno.
La organización decidía expulsarle, pero la noche en la que se lo comunicaron, estiraron el chicle con una larga entrevista a Ángel, que disparó por doquier, mezclando temas como los problemas que tiene con su expareja por acusaciones de violencia machista que nada tenían que ver con su concurso.
Duranta la acalorada conversación, el hermano de Sofía Cristo puso sobre la mesa la agresión que sufrió en Honduras y que no tuvo consecuencias en su momento. Y es que Arantxa del Sol le pegó -ella dijo collejas, luego se habló de puñetazos- por decir que su marido, Finito de Córdoba, había tenido algo con Ana Herminia. Un tema que Arantxa ya mencionó y que provocó que no volviese a aparecer en el reality, siendo vetada, apartada o como prefiramos llamarlo.
Las polémicas se sucedieron desde entonces. Laura Matamoros cargó contra el programa y anunció su retirada del mismo, aunque quedasen varias semanas para la final. Y antes ya abrió la veda Rocío Madrid, que también parecía haber vivido una experiencia amarga. A esto se sumaba el presunto trato de favor a Carmen Borrego (¿por qué a ella la devuelven a España por ansiedad y a otros no?), o las acusaciones de manipulación que han lanzado desde el nuevo Sálvame.
El brillo de Jorge Javier
No todo han sido salseos y trapos sucios en esta edición, en la que habido concursantes que se han dejado la piel por aguantar toda la experiencia. Pero lo más interesante de todos estos meses es cómo Jorge Javier ha pasado de parecer denostado en Mediaset a erigirse como uno de sus comunicadores más potentes y necesarios.
El catalán volvía a presentar un programa tras aquel traspié que fue Cuentos chinos, y demostró que su magnetismo con el público se mantiene intacto, y que el público le quiere. De hecho, ha habido momentos de tensión en Conexión Honduras o Última Hora en los que se le echaba de menos, pues habría manejado el reality por otros derroteros.
Gracias a Supervivientes 2024 sabemos que nos queda Jorge Javier para rato. Este mismo jueves comenzará a presentar la versión All Stars del reality, y ya se ha confirmado que en verano conducirá el talk show El diario de Jorge y, más adelante, la vuelta de Hay una cosa que te quiero decir.