La Plaza de los Frutos vivirá su última gran historia. Este miércoles 6 de marzo, a las 22:45 horas, se emitirá el episodio final de Amar es para siempre. Tras 12 temporadas, 2.829 episodios y 11 años emisión, la ficción creada por Josep Maria Bener, Antonio Oretti y Rodolf Sirera se despedirá. Realmente son casi 20 años conquistando al público con el bar El Asturiano como referencia, dado que inicialmente estuvo Amar en tiempos revueltos entre 2005 y 2012 en La 1 de TVE.
Una final que parecía que nunca iba llegar, algo de que comenzaron a ser conscientes en las últimas semanas de rodaje dos de sus actores más emblemáticos, Manu Baquiero e Itziar Miranda, los carismáticos Marcelino y Manolita de El Asturiano, el bar que ha servido de nexo con cada temporada de Amar es para siempre, como también entre la ficción de Atresmedia y que la fue en su momento Amar en tiempos revueltos.
“La última semana de rodaje la vivimos con muchísima emoción, la verdad. Ya íbamos viendo el final, que nunca pensamos que iba a llegar, pero que éramos conscientes de que tarde o temprano tendría que venir. Ha sido un camino precioso, un viaje increíble. Nos vamos por todo lo alto, nos emanan muchas emociones, porque hay muchos reencuentros en los que hay mucho amor y lágrimas”, comparte Manu Baqueiro en una entrevista concedida a BLUPER.
Entre esas lágrimas, están también las “de alegría” y las de “estar satisfechos con el trabajo” que se ha hecho. “Hay que reivindicarlo. Es un trabajo muy bien ejecutado por el equipo técnico y por nosotros. No sé si queda pedante decirlo, pero es así. Nos hemos dejado la piel en la serie y hemos tenido muy buena recepción de la gente que nos ha visto”, prosigue el actor.
“Hemo saboreado cada minuto del final. Nos sentíamos un poco como si estuviéramos llegando al final del verano”
“Hemo saboreado cada minuto del final. Nos sentíamos un poco como si estuviéramos llegando al final del verano, de esas temporadas estivales que vivíamos cuando éramos niños, que se acababan y, de repente, comenzabas a recordar lo feliz que habías sido. Ha sido un poco así. ¡Qué afortunados hemos sido y cómo de felices lo estamos siendo hasta el final! ¡Es un lujo!”, agrega Itziar Miranda.
Para Baqueiro y Miranda ha sido un ‘verano’ muy extenso. El 26 de septiembre de 2005 fue cuando comenzó la emisión de Amar en tiempos revueltos en la sobremesa de La 1. Una ficción ambientada en la Guerra Civil Español y que narraba las primeras décadas del Franquismo. La producción rompió la manera de entender las series diarias en España, las cuales estuvieron encajadas dentro de la fórmula de la telenovela latinoamericana, con un inicio y un final.
La serie que revolucionó la manera de entender las diarias
Amar en tiempos revueltos rompió la lógica que se había mantenido con Calle Nueva, El secreto o La verdad de Laura. La ficción de Diagonal TV conquistó al público de La 1 de TVE hasta 2012, tras 7 temporadas, 1.707 episodios y 8 telefilmes especiales para prime time, retratando la realidad española entre 1936 y 1957. Sólo la falta de garantías, debido a los recortes del Gobierno de entonces para RTVE, llevaron a que la productora tuviera que llevarse la serie a Antena 3.
“Hemos aquí tenido una estabilidad económica, por qué no decirlo”
Nació así Amar es para siempre, que ha estado ambientada entre 1960 y 1983, superando ampliamente el recorrido de su predecesora y cautivando a millones de espectadores de forma diaria. Uniendo ambas ficciones, se está ante de una de las producciones más longevas de la televisión española, sólo comparada a los años de veteranía que tuvo Cuéntame cómo pasó en el prime time.
“Ha sido media vida. Entramos con 25 años y salimos con 20 años más. Imaginaos las cosas que hemos pasado aquí, de las más importantes, muchas de ellas hermosas, también cosas tristes. La vida es eso y ha sido bueno. Ha sido un lujo estar una serie así, con tantos compañeros y tanta complicidad”, expone Miranda, quien también no tiene ningún problema es señalar que tantos años en emisión también les ofrecieron a los actores “estabilidad económica”.
“También está eso, la estabilidad económica. Eso también produce estabilidad en otros aspectos, como el emocional. Ha sido trabajo del día a día y un esfuerzo continuo, porque fuimos poquito a poquito a la conquista y al final, mira, hemos logrado dar la vuelta entera”, añadía.
Entre La 1 y Antena 3, 19 años de 'Amar'
Casi dos décadas en una misma ficción que, por otro lado, ambos actores confiesan que, echando la vista atrás, parece que “20 años no son nada”. “Nos estamos dando cuenta ahora, con motivo de las entrevistas, echando la vista atrás y mirando imágenes de temporadas pasadas. Nos están revolviendo y recordamos todo lo que hemos vivido. Los diferentes compañeros que han pasado desde entonces y es ahí donde ves que ha pasado media vida”, reconoce la actriz.
“En el capítulo final, habrá muchas sorpresas y ahí se verá el paso del tiempo. Lo que pasa es que nos conservamos muy bien”
Aunque sean casi 20 años los que han pasado desde el inicio de Amar en tiempos revueltos al final de Amar es para siempre, son 47 años los que han vivido Marcelino y Manolita, dado que la primera ficción comenzaba en 1936 y la última finaliza en 1983. Casi medio siglo. “En el capítulo final, habrá muchas sorpresas y ahí se verá el paso del tiempo. Lo que pasa es que nos conservamos muy bien”, comparte la intérprete zaragozana.
La sensación de que Amar es para siempre iba a ser eterna provoca que surjan preguntas de cómo hubieran sido Marcelino y Manolita años después, como en 1992, con los Juegos Olímpicos. “Ese año hubiera estado guay. Es verdad que se han quedado muchas historias por contar, pero hemos narrado otras. Por otro lado, tenemos la suerte de acabar por todo lo alto”, comparte Miranda.
“Todo se acaba, nada es eterno y creo que ha sido una decisión muy inteligente. Hemos abarcado casi 20 años llenos de historias, acompañando a mucha gente y sus soledades, uniendo familias. Hemos tenido suerte de que termine de la manera en la que lo está haciendo”, prosigue.
La manera de hacerse Amar ha provocado que las siguientes telenovelas que se han producido en España tengan unos patrones similares. La mayoría de las series son de época y tienen un inicio, pero su final no está predeterminado. Una manera de ejecutar cercana al serial de otros países y de la que Amar ha creado escuela.
“Sí, antes era como otra liga y Amar hizo que la ficción fuese a otra, como si pasásemos a primera división. Además, estamos en una franja muy importante, que es la sobremesa, que es algo que se refleja por los propios datos de audiencia”, defiende Miranda. “Eso es algo que se ve también en las parrillas de otras cadenas. Al fin y al cabo, las series diarias te garantizan unas horas de consumo y de fidelidad de audiencias que las series semanales de prime time”, añade Baqueiro.
“Las diarias se han vuelto muy importantes para las cadenas. Tengo una anécdota y es que varios actores que antes de que estuviese Amar eran reacios a participar en una ficción diaria. Ahora lo ven como sinónimo de calidad y Amar es considerada un sello de prestigio, de una producción bien hecha. Por ello, mucha gente ha querido venir y hace alguna temporada”, explica el actor.
'Amar', innovación del concepto telenovela
Baqueiro remarca cómo la calidad y revalorización de las series diarias en los últimos años. “No es que haya temporadas de mejor calidad, es que hemos evolucionado mucho a nivel técnico. Estamos ahora con otra forma de rodar. Lo que pasa es que visualmente es está más cuidado, es más claro. Es algo que también ha podido verse con Sueños de libertad. Por supuesto, ese cuidado técnico hace que pueda tener encaje en un prime time, aunque no sea su franja”, razona el actor.
“Creo que ‘Amar’ ha sido una pionera en lo referente a series diarias”
“Aunque el formato telenovela se mantiene, con plano contra plano o planos generales, se está innovando también en esto. En eso, Amar siempre ha sido pionera. Hace poco, vi el primer episodio de Amar en tiempos revueltos y su calidad era fantástica”, añade Itziar Miranda.
“También, en estos casi 20 años la televisión ha cambiado muchísimo y ahora un episodio de una diaria se puede ver a cualquiera hora. Es más, las diarias están entre lo más visto del streaming, incluso en audiencias, algún episodio de Amar ha superado en datos de espectadores a propuestas de prime time. Eso también nos hace saber que somos más exigentes”, continúa, considerando que “las series diarias están de moda”. “Es ficción, es entretenimiento y dan trabajo a mucha gente”, defiende.